Las elecciones en Estados Unidos mantienen a México en la incertidumbre y sus autoridades financieras están dispuestas a adoptar medidas que contrarresten los efectos negativos por choques externos.
El gobierno de México está dispuesto a tomar medidas en materia económica para contrarrestar los efectos negativos que una posible victoria del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, generarían a la economía mexicana.
En conferencia de prensa, el titular del Banco de México, Agustín Carstens, buscó calmar a los mercados asegurando que las autoridades financieras del país preparan un plan de contingencia en caso de un “escenario adverso” tras los comicios presidenciales en Estados Unidos del 8 de noviembre, reconociendo que de ganar Trump la presidencia, el efecto hacia la economía mexicana sería desfavorable.
“Y, sin duda, si el escenario adverso se manifiesta pues es previsible que las autoridades mexicanas también respondamos de alguna manera”, indicó Carstens. “Independiente del resultado, tendrá consecuencias, espero que positivas, podrían ser negativas, en todo caso ahí tendríamos que ajustar nuestra posición de política si es necesario“, añadió.
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Hacienda actuará ante panorama negativo hacia México tras comisiones en EE.UU.
Las declaraciones del gobernador de la banca central mexicana se emiten un día después de que el titular de la Secretaría de Hacienda, José Antonio Meade, asegurara en entrevista con El Financiero que México está en posición de enfrentar los choques externos que arrojan altos niveles de volatilidad e incertidumbre en la economía, derivado de la variación en las encuestas preferenciales de los candidatos presidenciales en Estados Unidos.
“Estamos no sólo frente a la coyuntura electoral, sino en general como un país que está expuesto al mundo y que en este mundo de mucha volatilidad e incertidumbre, permanentemente hemos venido enfrentando retos”, afirmó en entrevista con El Financiero Bloomberg. “fortaleciendo nuestros fundamentales, mandando señales de responsabilidad, eso es lo que alcanzamos a hacer y lo que pensamos es necesario y suficiente frente a la volatilidad que pueda venir de ese episodio (electoral) o de cualquier otro que tengamos hacia adelante”, añadió.
La realidad es que ante la incertidumbre de los resultados electorales en Estados Unidos, principal socio comercial de México, la economía nacional se mantiene a la expectativa, siendo víctima de la volatilidad en el mercado cambiario.
En las últimas cinco semanas, el peso mexicano sufrió una fuerte caída frente al dólar y fue hasta este jueves 3 de noviembre que logró una leve recuperación ante los resultados del último sondeo electoral, que coloca a la candidata demócrata, Hillary Clinton, en ventaja moderada frente al republicano Donadl Trump.
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