Aún sin acuerdos trascendentales, con el tiempo encima y con asuntos de preponderancia atorados, continúan las reuniones ministeriales entre los representantes de Estados Unidos, México y Canadá, pero lo que parece inevitable es que los salarios serán la gran disyuntiva a resolver en cuanto a las reglas de origen del sector automotriz del TLCAN, ya que nuestro país lleva una nueva propuesta para tratar de sortear las peticiones hechas por el gobierno de Donald Trump en esta materia.
Ciudad de México.- México se enfrenta a peticiones sobre las reglas de origen del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que están “fuera de la realidad” y que son “inalcanzables”, ha dicho la industria automotriz nacional, luego de que Estados Unidos presentara una propuesta en donde quiere que el 40 por ciento del contenido de autos ligeros y 45 por ciento para camionetas, sean producidos en regiones con salarios superiores a 16 dólares por hora.
Al parecer, esta petición no estará a discusión por parte del gobierno de Estados Unidos y según informó The Wall Street Journal (WSJ), incluso piensa “penalizar” a México si no aumenta los salarios al menos hasta esa cifra.
“La propuesta trataría de que las fábricas mexicanas paguen más por la mano de obra o de lo contrario, serían presionadas para enviar trabajos del sector automotriz de México a Estados Unidos o Canadá”, publicó este diario.
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Una propuesta inalcanzable, dice la AMIA
Sin embrago, para la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), esta situación propuesta por Estados Unidos es “irreal” y no es “alcanzable por la industria”, ya que no existen las condiciones para aplicar estas medidas de manera inmediata.
Según su presidente, Eduardo Solís, las modificaciones a las reglas de origen hechas por el gobierno de Donald Trump “no permiten que este sector sea ganador frente a otras regiones del mundo” y para el directivo, el objetivo primordial es “tener un sector automotriz competitivo”.
La propuesta mexicana
Para ello, anunciaron que presentarán una contrapropuesta en las mesas de negociaciones para tratar de encontrar un equilibrio que beneficie a los tres países, pero no hay detalles sobre este documento que llevará el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, a las reuniones ministeriales que se realizan en Washington.
De acuerdo a información de El Economista, “en lo que no está de acuerdo México es en que exista un componente salarial de la regla de origen porque las economías no son comparables”, pero mantiene el nivel de contenido regional de 75 por ciento, tal como lo pide Estados Unidos; además que agrega un periodo de implementación de las nuevas normas.
Así, el gobierno y la industria automotriz mexicana trataran de convencer a sus socios comerciales de esta nueva propuesta, que según la AMIA es “aceptable, alcanzable y realista”.
