Canadá anunció ayer aranceles compensatorios por 16 mil 600 millones de dólares canadienses (12 mil 800 millones de dólares) sobre exportaciones estadounidenses.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó duramente la respuesta de Canadá en contra de los aranceles a las importaciones de acero y aluminio impuestas por Washington, en lo que parece ser una amenaza a su vecino del norte y sectores de su industria.
Como se ha vuelto habitual, tras darse a conocer las medidas de Canadá, el mandatario estadounidense compartió un mensaje en cuenta oficial de Twitter en el que destacó que:
“Canadá ha tratado muy mal a nuestras empresas agrícolas por mucho tiempo ¡Son muy restrictivos en el comercio! ¡Deben abrir sus mercados y retirar sus barreras comerciales! Reportan un enorme superávit comercial con nosotros. ¿Reportan lo mismo los madereros de Estados Unidos?”.
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Canada has treated our Agricultural business and Farmers very poorly for a very long period of time. Highly restrictive on Trade! They must open their markets and take down their trade barriers! They report a really high surplus on trade with us. Do Timber & Lumber in U.S.?
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 1, 2018
La amenaza velada a la industria maderera de Canadá se da apenas un día después de que dicho país anunciara aranceles compensatorios por 16 mil 600 millones de dólares canadienses (12 mil 800 millones de dólares) sobre exportaciones estadounidenses, en respuesta a la implementación de aranceles a la importación de acero y aluminio de la UE, Canadá y México, anunciados este jueves por Washington.
México también respondió a lo que calificó como “medidas proteccionistas” de Estados Unidos, con “medidas equivalentes a diversos productos” provenientes del vecino país del norte, en respuesta a los aranceles que afectarán alrededor de 4 mil millones de dólares en productos de aluminio y acero que el país envía a EU.
En medio del estancamiento en las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el secretario de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, expresó que las medidas anunciadas por todos los involucrados no deberían ser el inicio de ningún tipo de guerra.
“Una guerra comercial es cuando hay un escalamiento de conflicto, en este caso es simplemente una respuesta a una primera acción”, señaló el funcionario, aunque aceptó que llegar a un arreglo sobre el TLCAN se ve “muy difícil” antes de los comicios presidenciales de julio en México.
