Alfonso Romo, el próximo titular de la Oficina de la Presidencia, aseguró que no se quitará ningún contrato petrolero, pero se necesitan resultados para demostrar que la reforma energética es tan benéfica como lo plantearon en un principio.
Ciudad de México.- Ante la incertidumbre que se había generado en torno a que Andrés Manuel López Obrador iba echar abajo la reforma energética, Alfonso Romo aseguró que las empresas e inversionistas pueden estar seguros que no se quitará ningún contrato petrolero.
Y además, señaló que trabajaran de la mano de ellos para conocer las complicaciones que enfrentan, los problemas que han hecho que se retrase la implementación de la reforma a plenitud y encontrar la manera de solventar esto para detonar el desarrollo del sector.
“Lo que estamos diciéndoles es, si ya ganaron las licitaciones, qué problemas tienen; si tienen problemas de permisos, por lo que sea, qué tenemos que hacer para que ustedes cumplan e inviertan y nos demuestren que la reforma si va a traer inversión y más petróleo”, subrayó Romo.
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Manda un mensaje positivo al mercado
En ese sentido, Alfonso Romo aseguró que la intención del nuevo gobierno es dar certeza a los inversionistas, que sigan desarrollando proyectos productivos de alto impacto y que se modifique la estructura burocrática que ha sido un lastre en el país.
Según el próximo jefe de la Oficina de la Presidencia, tanto los ganadores de estas licitaciones como Petróleos Mexicanos (Pemex), han señalan que “la burocracia está deteniendo la reforma energética”.
Por tal motivo, el empresario regiomontano planteó la pregunta: “qué tenemos que hacer para convencer al sector privado y a Pemex para quitar esas barreras, para hacer realidad la reforma energética”.
Para conocer el entorno y buscar soluciones, Romo aseguró que en los próximos 10 o 15 días, “se van a revisar los contratos con el espíritu de quitar cualquier duda”, que tengan los inversionistas sobre el nuevo gobierno.
Y aseguró que se va a “respaldar lo que se ha hecho”, pero adelantó que el objetivo es que “nos demuestren que realmente la reforma si va a traer más producción y beneficios al Estado”.
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Un buen negocio para todos
De esta manera, Alfonso Romo aseguró que lo el nuevo gobierno espera es que la reforma energética sea un buen negocio para los inversionistas y para el país.
“Si los contratos se cumplen como están, serán un buen negocio para los inversionistas y para el gobierno, pero lo queremos ver en la realidad”, afirmó el futuro Jefe de la Presidencia en declaraciones que retoma Notimex.
Pero dejó en claro que ellos darán las condiciones necesarias para continuar con los contratos, pero necesitan ver resultados, ya que de acuerdo con lo que se prometió cuando se hizo la reforma, deberían de producirse en estos momentos 2.83 millones de barriles diarios, pero solo se obtienen 1.8 millones, una cifra que tendrán que elevar en un corto plazo.
