Cuentan que Mintzita Corazón e Itzihuapa, se reúnen todos los años la noche del Día de Muertos en el fondo del lago de Pátzcuaro, Michoacán, para refrendar su amor y darle vida a una de las leyendas más significativas de esta región, que se remonta a la época de la llegada de los españoles y que marcó la posterior conquista del reino purépecha.
Ciudad de México.- Estos dos jóvenes eran los herederos del trono de Janitzio y cuando llegaron los conquistadores, Mintzita ofreció a Nuño de Guzmán el fabuloso tesoro que se encontraba bajo las aguas del lago a cambio de la liberación de su padre, pero cuando Itzihuapa estaba a punto de extraerlo, se vio rodeado de veinte sombras de remeros que lo sumergieron al fondo del lago y así se convirtió en el vigésimo primer guardián de las misteriosas riquezas un alma enamorada que cada año se rencuentra con su amada.
Historias como estas abundan en todo el territorio nacional y por eso el Día de Muertos es una de las celebraciones más importantes de nuestro país, ya que combina tradiciones, creencias y mitos que se remontan más allá de la Nueva España y la llegada de la religión católica.
Pero esto es uno de los atractivos que ofrecen estos lugares para los viajeros, que en estas celebraciones pueden conocer leyendas fantásticas, disfrutar de su riqueza gastronómica y descubrir tesoros históricos como los de que Mintzita Corazón e Itzihuapa.
En este sentido, la plataforma de boletos de autobús Clickbus promueve entre los turistas la visita de lugares en donde el Día de Muertos contiene elementos muy especiales de acuerdo a cada región y sus creencias milenarias.
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Celebraciones coloridas y llenas de sabor
Uno de los lugares que recomienda esta plataforma de viajes digital es Mérida, Yucatán, en donde la celebración a los muertos se llama “Hanal pixán” y se lleva a con una mezcla de costumbres mayas y católicas y una combinación de platillos únicos en el mundo.
Y uno de sus principales atractivos es su comida, ya que ofrecen a sus difuntos y también a los vivos que los visitan, “tamales rellenos de guisados, con la técnica tradicional conocida como pib, la cual consiste en cocinar a la leña dentro de un agujero en la tierra”, según información que retoma Notimex.
Otro de los destinos recomendados por esta plataforma de viajes, es Tuxtepec en el estado Oaxaca, “donde la fiesta de los difuntos conserva y respeta los elementos más tradicionales de las ofrendas” y sus principales elementos lo conforman la “flor de cempasúchil, las veladoras formando una cruz, el agua, la sal y el incienso”.
Además, los viajeros pueden disfrutar de los tapetes de aserrín, “llenos de colores y motivos religiosos tanto católicos como indígenas y son preparados con días de antelación y una precisión milimétrica para que estén listos en la Noche de Todos los Santos”, explica Clickbus.
Y para los que buscan además de historia y gastronomía típica de las regiones, arte y espectáculos culturales, se encuentra el Festival Mictlán que se realiza en Xalapa, Veracruz, y que es uno de los más representativos de este estado del sur del país.
