Se piensa que la CRCC esta íntimamente ligada al gobierno chino, que funciona como su brazo derecho y que en múltiples ocasiones ha ayudado a generar más recursos que cualquier otra corporación.
Ciudad de México (elsemanario.com).- La construcción del Tren de Alta Velocidad México-Querétaro, generó gran controversia en México y China, al menos así se explicó en The United Daily News, el pasado once de noviembre, tras la cancelación de la licitación que había sido ganada por el consorcio estatal China Railway Constuction Corporation, una de las mega corporaciones constructoras con mayor poder en el mundo.
A partir de este escándalo se expuso a la corporación a nivel mundial. Se detectaron algunos otros trabajos que están realizando bajo nombres alternos y en asociación con otras grandes empresas como CSR-GIA-PRODEMEX-TEYA-GHP, para realizar trabajos de infraestructura alrededor del mundo.
En la mayoría de los casos no construyen, simplemente financian participando como un banco que aporta crédito a los países. Actualmente están enfocando su fuerza en América latina y África, realizando aportaciones que alcanzan hasta los diez millones de dólares.
Se piensa que la CRCC esta íntimamente ligada al gobierno chino, que funciona como su brazo derecho y que en múltiples ocasiones ha ayudado a generar más recursos que cualquier otra corporación.
China reacciona ante polémica
El ministro chino Yang Chiatang se reunió con el titular de la Secretaria de Comunicaciones y Transporte (SCT), Gerardo Ruíz Esparza, en Pekín, para hablar sobre el retiro abrupto del contrato por parte de las autoridades mexicanas. La causante de este revocamiento tienen relación con preocupaciones acerca de la transparencia de esta licitación. El acuerdo alcanzaba los tres mil 750 millones de dólares y pretendía construir un tren de alta velocidad, bajo las estructuras que esta corporación implementa; generalmente ellos se encargan de proveer todas los requerimientos que van desde el personal, el diseño, la ingeniería, material, entre otros recursos, para el cumplimiento de sus proyectos, lo cual les genera un margen mucho mas alto de ganancias al ser su propio proveedor.
El contrato fue cancelado debido a que polemizó, por argumentos que usó Presidencia, en los que supuestamente daba respuesta a críticas por no ser una oferta justa para las empresas, sobre todo las propias empresas mexicanas, ya que parece ser que CRCC resulta ampliamente favorecida al ser el ‘único’ participante postulado para realizar este proyecto.
El ministro de Comercio de China dijo que creía, había argumentos legales para pedir una compensación por la cancelación del acuerdo en México. Cuando se cuestiona a los responsables de este tema, su respuesta consiste en afirmar que las partes involucradas se encuentran ‘sensibles’ respecto a comentar acerca de esto.
