México llega al G20 como una economía sólida y con influencia mundial

En medio de un entorno internacional complicado, México llega al G20 como una economía sólida y con influencia mundial para plantear temas importantes.

Ciudad de México.- Con una presencia internacional importante, México llega al G20 como una economía sólida y con influencia mundial para tocar temas que son trascendentales en el desarrollo futuro del comercio internacional.

Con la experiencia de haber sido anfitrión de este evento que congrega a los 20 países más importantes del mundo, México se ha convertido en una nación capaz de impulsar propuestas que tienen un impacto positivo en la economía mundial, así lo destacó el titular de Hacienda.

“México llega con temas que desde hace tiempo ya han sido importantes”, señaló en su momento el secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), José Antonio Meade.

Dado el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) que se ha mantenido al alza y una estabilidad puesta a prueba en diversas ocasiones, México llega al G20 como una economía sólida y con influencia mundial, gracias a “las credenciales que le da su política pública”, señaló el secretario de Hacienda.

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Además, para el gobierno federal esta una gran oportunidad para fortalecer su postura de apertura comercial y de responsabilidad ambiental, dos temas en lo que ha tenido encuentros desafortunados con su similar de Estados Unidos.

Según el sitio Dinero en Imagen, el funcionario mexicano considera que “este encuentro permite que los países expresen su voluntad política alrededor de diversos temas, que van desde impuestos hasta cambio climático”, temas en los cuales México tiene una postura abierta al diálogo y de colaboración continúa.

De esta manera, México llega al G20 como una economía sólida y con influencia mundial y en esta reunión, que se llevará a cabo el 7 y 8 de julio en Hamburgo, Alemania, el gobierno federal busca ratificar su visión de que el mundo actual necesita del comercio y de la cooperación internacional.

“En medio de las tensiones se busca mandar señales de que el comercio sí es una medida importante, de que las economías son globalmente dependientes, que las cadenas de valor se han vuelto también globales y que la forma como los países participan en el mundo tiende a ser al amparo de regiones”, señaló José Antonio Meade.