Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, destacó que el país vive su segundo gran momento en la industria automotriz al posicionarse como el quinto productor global de autopartes.
Ciudad de México (elsemanario.com).- México vive su segundo gran momento en la industria automotriz, está posicionado como el quinto mayor productor de autopartes a nivel global y el séptimo en materia de vehículos ligeros, destacó el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.
Al participar en el anuncio de inversión de la nueva planta de Goodyear en México, el funcionario destacó que la industria de autopartes mexicana tiene el 33 por ciento del mercado norteamericano, una de cada tres partes en valor en Estados Unidos viene o llega de México.
“En la balanza comercial tenemos un superávit de 22 mil 500 millones de dólares, en este momento estamos desarrollando capacidades productivas para ir más allá de eso”, destacó el secretario de Economía. Asimismo, resaltó que el anuncio de Goodyear se da en el momento en que México atraviesa por uno de los momentos de expansión más importantes de su historia en el sector.
Los 550 millones de dólares que invertirá la llantera estadounidense, contribuirán a elevar las cifras de inversión en el sector automotriz a 23 mil 200 mdd; serán 16 mil 200 para la industria terminal y seis mil en la de autopartes. Recordó que el primero momento se vivió con la entrada en vigor del TLC de América del Norte, anteriormente antes de ello, hubo decretos automotrices que establecieron impulsar el desarrollo de la industria nacional de autopartes.
Sin embargo, reconoció que la realidad es que antes del 94 teníamos un alto déficit del comercio de autopartes, esto indicaba que en el mercado nacional no había una oferta suficiente y competitiva por lo cual las armadoras establecidas en México, tenían que recurrir a las importaciones.
“Tan sólo en el 93 teníamos un déficit comercial de cinco mil millones de dólares de autopartes, exportábamos apenas tres mil 900 millones e importábamos nueve mil millones”, dijo. Guajardo Villareal, al resaltar que el TLCAN cambió la política aranceralia para la industria de autopartes, pues entraron en un proceso de eliminación gradual que concluyó a llevarlos a cero en el año 2003.
Asimismo subrayó que, al mismo tiempo, el requisito de contenido nacional que tenía el país fue transformado por un contenido regional del 62 por ciento, esto, “sin duda impulsó la producción productiva de la industria de automotriz y autopartes en el territorio de América del Norte con gran éxito”, añadió.
