AMLO se convirtió este martes en la figura paternal que dio un “regaño” a la UNAM por lo que llamó un uso superfluo de los recursos públicos por parte de la Universidad más grande de México.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo hoy que los rectores están en su derecho de protestar por los recortes en el presupuesto del próximo año, pero advirtió que se “acabaron los lujos” y que la UNAM tiene que “hacer más con menos”.
Ante los cuestionamientos sobre la reducción del 6% en el presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el presidente respondió con un inesperado “regaño” y advirtió, siempre sin mencionar el nombre de la máxima casa de estudios, que el presupuesto del próximo año deberá aprovecharse de manera eficiente y acabar con los “lujos” y “gastos superfluos”.
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“Lo que sí puedo decir en general es que se va hacer más con menos, porque se acaba la corrupción y se acaba el derroche y va a rendir el presupuesto (…) Van a haber mucho más recursos que antes. Y aclaro, tiene que rendir más el presupuesto, porque deben terminarse los lujos. Tiene que haber austeridad”, indicó López Obrador en su conferencia matutina de este martes.
¿Diálogo con rectores?
El presidente tabasqueño adelantó también que buscará un diálogo con los rectores inconformes de las universidades que han criticado el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, pero adelantó que no habrá cambios en la asignación de recursos.
“Si hay inconformidades y protestas es normal, lo qué hay que buscar es el diálogo y que todo se resuelva, como decía Juárez, con la razón y el derecho”, dijo el fundador de Morena ante la posibilidad de que los recortes a la educación generen protestas o manifestaciones.
Menos presupuesto, pero más becas
Por otra parte, Obrador insistió en que si bien se hizo un recorte al presupuesto para la UNAM, el Conacyt y el IPN, se beneficiará a más de cuatro millones de estudiantes de educación superior, que obtendrán becas durante su administración.
Con todo, el “regaño” del presidente no ha logrado acallar las críticas y la incertidumbre en torno al tema de la educación.
Por el contrario, las palabras del presidente han generado escozor y molestia entre integrantes de la comunidad universitaria, por lo que muchos consideran una invitación a un “diálogo” en el que los representantes de la Universidad no tendrán oportunidad de hacerse escuchar.