El papa Francisco oficializó el proceso para convertir en santo a Jacques Hamel, quien fue degollado en julio por militantes islamistas
El papa Francisco anunció este miércoles que el cura francés, Jacques Hamel, quien fue degollado en julio pasado por militantes islamistas ha sido beatificado, con lo que el religioso ya está en camino de convertirse en santo.
Francisco describió este miércoles al cura galo como un “mártir”, durante una misa especial en el área de Ruan, en Francia, donde atacantes islamistas irrumpieron el pasado 26 de julio en la iglesia en Saint-Étienne-du-Rouvray, obligaron a Hamel, de 85 años, a arrodillarse y lo degollaron mientras pronunciaban consignas en árabe.
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“El padre Jacques forma parte de la cadena de mártires” que comienza con Jesucristo en la Cruz, “y se repite hasta hoy”, destacó Francisco, según rescata la ABC en su portal web.
El pontífice destacó que hoy existen más mártires cristianos que en los primeros tiempos de la Iglesia y aseguró que hoy son más los cristianos “asesinados, torturados, encarcelados o degollados por no renegar de Jesucristo”.
“El padre Jacques Hamel fue degollado en la Cruz justo cuando celebraba el sacrificio de la Cruz de Cristo. Era un hombre bueno, manso, fraternal, que siempre intentaba crear la paz. No perdió la lucidez para acusar y decir claramente el nombre del asesino: ‘¡Aléjate de mí, Satanás!’”, señaló Francisco.
¿Qué significa ser beatificado?
La beatificación es uno de los primeros pasos que se requieren en la religión para que una persona pueda convertirse en una santidad para la Iglesia Católica Romana. Según rescata el diario Excélsior, de manera habitual, se requiere de un milagro constatado para que un candidato a la santidad sea beatificado, pero ese requisito puede no requerirse si la persona murió como mártir.
Para la Iglesia Católica, se puede conferir la santidad de forma póstuma a personas consideradas santas durante su vida, y que ahora se cree que están con Dios, por lo que pueden interceder ante Él para realizar milagros.
