Antes de que se encontrara esta grabación, las únicas evidencias de la esclavitud sexual que padecieron miles de mujeres asiáticas constaba sólo de fotos y testimonios de las sobrevivientes.
Una grabación en blanco y negro de lo que se cree fueron mujeres explotadas sexualmente por el Ejército japonés durante la Segunda Guerra Mundial ha visto la luz por primera vez, gracias a un grupo de investigadores de Corea del Sur.
De acuerdo con un reporte de la BBC, las imágenes fueron capturadas en vídeo por las tropas estadounidenses en la provincia china de Yunnan, previamente bajo el control japonés, y fueron encontradas recientemente en los archivos de Estados Unidos por investigadores de la Universidad Nacional de Seúl.
En la grabación, una película muda, en blanco y negro, de apenas 18 segundos, se observa a siete mujeres posiblemente coreanas frente a varios soldados estadounidenses y chinos que luchaban contra la ocupación japonesa.
En el clip se muestra el momento en que una de las mujeres habla con uno de los soldados, mientras el resto mira hacia el suelo con gesto asustado.
Los investigadores piensan que el video data de septiembre de 1944 y que habría sido tomado frente a una llamada “estación de confort”, nombre con el que se conocían a los prostíbulos usados por las tropas imperiales de Japón en la localidad de Sonshan, en la provincia china de Yunnan.
Investigadores e historiadores consideran que unas 200.000 mujeres, principalmente en China y la península de Corea, fueron forzadas a prestar servicios sexuales a soldados japoneses desde 1930 y especialmente en la recta final de la Segunda Guerra Mundial.
Cabe destacar que antes de que se encontrara esta grabación, las únicas evidencias de la esclavitud sexual que padecieron miles de mujeres asiáticas, en su mayoría surcoreanas, a menos de los ocupantes nipones constaba sólo de fotos y testimonios de los sobrevivientes.
Según rescata El Comercio, en Japón, gran parte de la clase política todavía duda de la existencia de las llamadas “mujeres confort”, a pesar de que hoy en día se estima que quedan vivas 38 mujeres víctimas de esclavitud sexual a manos del Ejército nipón.
Japón acordó con la anterior Administración surcoreana aportar 1.000 millones de yenes ( 7,6 millones de euros) para un fondo de compensación para las víctimas, sin embargo, la asociación que agrupa a las sobrevivientes asegura que no se le tuvo en cuenta en las negociaciones.
