A mi parecer el oficio político del PRI, está volviendo a la escena nacional; se están privilegiando las formas, aunque los fondos prevalecen, aunque estos serán juzgados a posteriori. Ahora a los políticos se les ve por todas partes, en restaurantes y cafés, pasando de una mesa a la otra, cabildeando, negociando y los más conspirando. Esta era la manera en que se venía haciendo política en México, unos pocos disfrutando de sus nuevos encargos, otros sufriendo las injusticias de no haber sido invitados a participar y haciendo ver lo mucho que trabajaron para el candidato y sus programas de gobierno.
En mi opinión hay demasiados desconocidos en el gabinete, sobre todo en el ampliado en donde se están pagando cuotas y favores. Qué lástima que se siga en ello, aunque quienes saben de estos menesteres dicen que este es solo un primer gabinete, que las cosas cambiarán y la gente también, pero entonces ¿para qué perder el tiempo?
Siempre he pensado que es un desperdicio no tener un servicio civil de carrera en la función pública; los nuevos llegan a aprender y los que ya sabían y podrían haber escalado, son mandados a otros puestos en donde tendrán que volver a aprender. Reinventamos a nuestro país cada seis años y esto ha venido generando los atrasos que sufrimos en casi todos los aspectos.
La verdad es que llegué a pensar que con el PRI en el gobierno, no se repetirían los errores que en principio tuvo Fox y luego Calderón en esta docena trágica; llegaron instalando equipos en las diferentes dependencias y echaron fuera a quienes tenían experiencia, aquellos, la mayoría nunca adquirieron la experiencia y el conocimiento, o muy pocos, pero esos desplazados del PAN de hace doce años siguen sin poder participar, porque ahora no los llamaron a colaborar, es decir se perdieron una o dos generaciones que mucho bien podría hacerle a nuestro país.
Algo que me parece muy importante de señalar es que las capturas han dejado de televisarse en el show diario de los noticiarios, ¿recuerda usted a cuantos detenidos se les calificaba como jefes de cárteles o bien expertos financieros que salían en la pantalla chica con el pelo hasta los hombros y tatuajes por todos lados? Todos sabemos que los verdaderos señores del dinero del narcotráfico viven en Nueva York y no tienen pinta de lancheros, pero las cosas están cambiando para bien. La ley de víctimas fue aprobada, habrá que corregirle muchas cosas, pero por lo menos tenemos una ley. La propuesta de unificar los códigos penales parece que se resuelve favorablemente, por fin habrán delitos que tengan las mismas sanciones en todo el país, evidentemente tendrán que pasar por los congresos locales muchas de ellas y será ahí en donde veremos quienes están o no dispuestos a luchar con la ley en la mano en contra de la delincuencia.
Yo creo que las cosas van bien, que seremos muchos quienes seguiremos insistiendo en muchos de los temas desde la crítica para de esta manera, poder contribuir a tener un México mejor y más justo. Por lo pronto en mí, prevalece el beneficio de la duda que les otorgo a los políticos, y aunque mi opinión no sea tan importante trataré siempre de ser puntual y acusar directamente a quienes no hagan el trabajo bien hecho. Claro, muchos pensarán, huy que miedo! Y tendrían razón… Aún así seremos muchos los que hagamos el esfuerzo de ver de cerca los errores y criticar, pero también ver los aciertos y felicitar en su momento; ojalá que haya más de los segundos que de los primeros.
