Sin sorpresas. México sigue siendo inmigrante ante EU y Canadá en Cumbre

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Ciudad de México.- La importancia de afinar acuerdos con México por parte de Canadá quedó claro cuando su primer ministro, Stephen Harper, sin importar que se trataba de un encuentro de la región de América del Norte, hizo un espacio en su protocolaria agenda para observar un partido de Hockey que tuvo lugar en los juegos olímpicos de Sochi. Orgulloso del momento, incluso lo publicó en redes sociales a pesar de que se encontraba en medio de un encuentro de alto nivel.

Esa indiferencia fue también percibida por el presidente, Enrique Peña, quien a pesar de solicitar de manera directa su “eliminación”, no hubo respuesta de su homólogo canadiense sin importar que destacara cifras como los 263 mil trabajadores mexicanos que han servido al campo canadiense a través de programas de empleo temporal.

Tras el arribo este miércoles del presidente, Barack Obama, quien llegó en punto del medio día a bordo del Air Force 1, las cosas no fueron diferentes, por lo que no cabe duda entonces, que la inmigración es un tema incómodo para Canadá y Estados Unidos, este último lo externó con la llegada tan vaporosa de su presidente Obama, quien luego de haber entablado una conversación privada con Peña Nieto, comer y develar una plática, apenas si tendrán tiempo para desarrollar los temas de la agenda trilateral.

“Es una cumbre un tanto desangelada porque hay muy poco tiempo para tomar todos los acuerdos de la agenda trilateral. (…) El factor de que Obama viene un rato come y se va también es desangelado, significa que no le están dando importancia en EU a la cumbre”, señaló Pía Taracena, académica de la Universidad Iberoamericana a CNN.

Llegado el momento del encuentro con el presidente de Estados Unidos, Peña Nieto apenas pudo tomarse la fotografía de recuerdo en el jardín botánico Cosmovitral y conversar de manera privada con Obama en una brevísima charla, que incluso fue aprovechada por el mandatario estadounidense para fijar la postura de su país sobre los acontecimientos violentos que se han venido dando en Kiev, Ucrania.

“Si el presidente me lo permite, quisiera decir algo sobre Ucrania, EU condena en los términos más fuertes la violencia que se está dando en ese país, estamos trabajando en un diálogo profundo con nuestros colaboradores en Europa”, señaló el mandatario al interrumpir el diálogo con Peña Nieto que se supone, serviría para desarrollar estrategias que fortalezcan la región, donde lamentablemente no figuró la inmigración.

Lo más que Obama alcanzó a mencionar, fue un pronunciamiento por una cooperación bilateral, donde “las fronteras sean más eficientes en temas comerciales, es la oportunidad de abrir nuestros mercados”.

“También tenemos la oportunidad de hablar sobre intercambio par que los jóvenes puedan viajar y los países puedan beneficiarse de estos intercambios”, alcanzó a ofrecer.

 

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