un día sin mujeres

El grito luminoso

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La misoginia, la falocracia, los privilegios que se obtienen sólo por haber nacido hombres, por fin son señalados como patologías sociales. Es un grito luminoso y auténtico a la necedad de deslegitimar al movimiento femenino y acusarlo de ser “en contra del gobierno”, sólo porque el gobierno se niega a evolucionar, a aceptar que la falocracia ya terminó. La responsabilidad de todas nosotras es no detenernos y continuar, denunciar que las diferencias existen y son en nuestra contra: ganamos menos en las empresas, en comparación con los hombres con puestos similares a los nuestros, recibimos menos oportunidades de crecimiento. Las labores del hogar y la familia continúan menospreciadas, aunque sean parte fundamental de la construcción social. Los servicios de salud y anticoncepción deben ser universales, gratuitos y desde la adolescencia. El aborto debe ser despenalizado en todo el país y en todas las circunstancias.

La violencia, el uso de la fuerza y los asesinatos de mujeres son la gran y definitiva manifestación de poder que ha mantenido esta sociedad durante siglos, el Estado lo niega y lo minimiza, por eso tenemos que seguir diciéndolo. La violencia busca el sometimiento, busca la reducción y debilidad de las mujeres, el miedo no es únicamente a morir, es en todos los terrenos, es a exigir un mejor sueldo, mejores prestaciones, y a merecer respeto. No vivimos un entorno igualitario, lo que se haga en política, el reparto de puestos y curules, no soluciona las deficiencias que seguimos padeciendo, ni nos convence y mucho menos con la sumisión oportunista y descarada de las beneficiadas del poder.

hombres necios
Ilustración: NBC News.

La huelga general de mujeres demostró qué grande es nuestra ausencia, y lo más grave es que denunció con ese vacío y ese silencio que los hombres son mayoría, en los periódicos los lugares vacíos eran menos de la cuarta parte de las columnas, y a pesar de que se paralizaron sucursales bancarias, la realidad es que no hay equidad. En el arte es evidente, son menos las mujeres que los hombres, y las mujeres de edad madura que llegan a la pintura las adjetivan de “señora que pinta”, como si “señora” fuera un insulto, quitarse esa etiqueta despectiva es muy difícil, y aún con mucho talento la tienen que soportar.

El cambio deberá continuar desde la sociedad, si el Estado se queda rezagado de esta evolución no tendrá la capacidad de detenerla, porque ya hemos llegado a un punto en que la omisión es violencia. Minimizar la violencia y hacerse las víctimas no les va a funcionar, el Estado ha cometido un error formidable, se ha negado a participar de una revolución social, anquilosado en su discurso se niega a entender los signos de los tiempos. La vanguardia es civil, es nuestra, de las mujeres que han levantado la voz, que lo han demostrado desde sus familias, trabajos y existencias, y de los hombres que lo han apoyado, a partir de nosotros vendrá el cambio. No hemos ganado, hemos comenzado, por fin, se abre espacio a la justicia.


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8 y 9 de marzo. La lección de las mujeres

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La demostración de fuerza femenina del pasado fin de semana significó un rotundo triunfo para el movimiento feminista en México. Se puso de manifiesto la capacidad de organización y convocatoria, no sólo para acudir multitudinariamente a las concentraciones y marchas, sino para sustraerse de toda actividad y expresarse con el mismo radicalismo mediante su ausencia.

Tanto las masivas movilizaciones del domingo, como el paro del lunes, representan dos fases, diferenciadas pero concatenadas, de una misma estrategia de visibilización de la mujer y sus legítimas demandas de justicia y rechazo a la violencia de género, que a todas luces ha sido exitosa y aplaudida con empatía en los más amplios sectores de la población.

La abrumadora respuesta colectiva, tanto a la movilización como al paro, constituye un hecho que puede, sin exageraciones, calificarse como histórico, de trascendencia indubitable en el intercambio social y político del país, que ha de demandar, obligadamente, modificaciones sustanciales en la estructura institucional tradicional, con una orientación catalizada por la visión feminista.

movimiento feminista
Ilustración: Square Peace.

El activismo estruendoso, radical y por momentos desenfrenado mostrado con la avalancha púrpura que abarrotó y desbordó el espacio de las plazas públicas en diversas ciudades, fue seguido por la ausencia, la demostración, por demás explícita, del prominente sitio que ellas ocupan y del profundo vacío que dejan, si así lo deciden, en el corazón del conglomerado social.

La poderosa exhibición de lo que la mujer representa y la gran presión que es capaz de ejercer en lo político, económico y social, no puede ni debe ser desestimada, por el contrario, debe ser analizada y reflexionada en profundidad, con todas sus implicaciones, facetas y aristas.

El 8 y 9 de marzo, son ya un referente histórico, una lección que debe ser aprendida por sociedad y gobierno para la generación de nuevos paradigmas, no únicamente sobre la condición de la mujer y el respeto a su dignidad y derechos, sino en lo que se refiere a su aportación y relevancia en la solución de los más apremiantes problemas nacionales y en la construcción de un país más justo e igualitario, que, simplemente, no será sin ellas.

 El apabullante resultado de los días 8 y 9 de marzo, sin embargo, no puede quedar en el simple regocijo del éxito logrado, debe tener consecuencias, trascender a resultados, a lograr el cambio en el estado de cosas de manera propositiva y activa, la movilización es un medio, no el fin. Toca ahora dar impulso a políticas públicas concretas, al diseño de propuestas, mecanismos y acciones orientadas a generar transformaciones de fondo. Las demandas son explícitas, procede entonces proponer soluciones y acompañarlas vigorosamente para su implementación.

mujeres empoderadas
Ilustración: Celag.

Debe tenerse en cuenta que, abierta o veladamente, se ha sugerido la existencia de intereses abyectos que pretenden aprovecharse del movimiento feminista para fines perversos. Se ha insinuado la infiltración de grupos incógnitos para desvirtuarlo y poner en duda su legitimidad. Ambas cosas pueden suceder, los movimientos sociales, por más transparentes, siempre enfrentarán este tipo de riesgos y otras amenazas abiertas para descalificarlos y descarrilarlos.

Valor, honestidad, unidad, metas claras y, sobre todo, oídos sordos al canto de sirenas, a la tentación política y al interés personal, son factores indispensables para la sanidad y legitimidad de un movimiento que, no sólo ha despertado la simpatía popular, sino que puede ser de trascendental aporte para la reconstrucción del deteriorado tejido social en su más amplia concepción y la recuperación del Estado de derecho.


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‘Huellas imborrables’

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Paro nacional 9 de marzo ‘Un día sin mujeres’ en cifras

‘El nueve, nadie se mueve’, fue la propuesta que el Colectivo Brujas de Mar convocó para un paro nacional el 9 de marzo denominado ‘Un día sin mujeres’ que tuvo un índice de respuesta sin precedentes y que dejó desoladas calles, universidades, oficinas y transporte público.

Al 10 de marzo, las autoridades mexicanas no habían emitido cifras oficiales; sin embargo, con una mayoría de participación femenina en el paro, las industrias del sector salud, maquiladoras, comerciales y servicios serían las más afectadas.

De acuerdo con la Dra. Bertha Martínez, Coordinadora de la Licenciatura en Logística Internacional en CETYS Universidad Campus Mexicali, el mercado laboral de las propias mujeres se vería afectado, principalmente las participantes de pequeñas y medianas empresas, así como para las dedicadas al empleo informal, quienes, en caso de no laborar, no percibirán ingresos durante el día de paro.

Para el resto de los sectores, las mujeres representan el 55 por ciento de gasto ejercido en el ámbito de la salud médica y estética, mientras que para el comercio de ropa y calzado se trata del 50%, haciendo que sean estos sectores los más económicamente vulnerables ante el escenario de paro.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) actualizadas en el 2019, en México 4 de cada 10 trabajadores que forman parte de la economía formal son de sexo femenino, quienes generan ganancias diarias por poco más de 25 mil millones de pesos.

En la foto de ‘Infraganti’ se muestra una muestra de protesta a las afueras del Palacio Nacional compuesta por zapatos rojos representando a las mujeres desaparecidas, cifras que han dejado huella en México.

Foto: Instagram

9M: Desmemoria e inmovilización de las mujeres

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Cedo hoy mi columna “Palimpsestos culturales” a Ana Ortiz. Escuchemos la voz de una mujer activista, de una antropóloga joven, Maestra en Estudios Mesoamericanos y Profesora en la Escuela Nacional de Antropología. Hay más voces, pero leer a Ana Ortiz es meternos a la mirada de una militante, marxista, feminista y, que me consta, conoce México en sus entrañas. Su voz es otra voz. Callemos los hombres, muchas mujeres desearán discutir con Ana. Gracias por aceptar escribir en este espacio.


Por Ana Ortiz S.R.

Desde hace algunos días, las conversaciones que he escuchado, los mensajes en mis chats y las noticias que he pescado, han estado inundados de invitaciones, consignas y proclamas hacia un solo sentido: “El nueve nadie se mueve” que va acompañado por el complemento #Un día sin nosotras. En general, en los espacios que frecuento se respira un ambiente de entusiasmo y de explosión organizativa en torno a ese día; con mi pesimismo y “sospechosismo” característico, inmediatamente me llevan a pensar en una llamarada de petate.

Al preguntarle a mis alumnas, a mis compañeras, a mis amigas, a las mujeres a mi alrededor qué piensan y qué van a hacer, encontré dos actitudes generales, una que podría denominar simplemente como la participación entusiasta –ya mencionada–, y otra que denotaba en sus respuestas confusión e incomodidad, revueltas con una dosis de desconfianza y vergüenza, de no poder dar una respuesta definitiva y contundente en este ambiente movido por una legítima indignación. Yo también me sentía así. Pero ¿por qué?

mujeres en accion
Ilustración: Clémence Gouy.

En un momento de iluminación y recurriendo a mis conocimientos históricos, políticos y antropológicos para tratar de analizar la cuestión, un pensamiento me inundó. Me quedé atónita mientras pensaba “¡Nuestras abuelas y bisabuelas se han de estar revolcando en sus tumbas!”. Esta iniciativa que prendió como yesca en la sociedad clasemediera mexicana es una regresión a lo más retrógrado del sistema patriarcal, y está cumpliendo a la perfección con el mandato más refinado e inasible, la absorción del patriarcado en las venas y en las entrañas mismas de las mujeres para perpetuarse. Ahora, y como ha sucedido a lo largo de la historia, somos nosotras mismas las que nos ponemos los grilletes y aceitamos el mecanismo de pensamiento y reproducción machista, no solamente criando machos e impidiendo los vínculos reales de sororidad y solidaridad femenina. Al reflexionar sobre “El nueve nadie se mueve”, lo que me saltó a la mente inmediatamente fue la extra recalcitrante frase machista, “Las mujeres como las escopetas: cargadas y detrás de la puerta”.

¡¿Cómo puede ser que a lo que esté invitando una gran mayoría de mujeres, muchas enmarcadas en organizaciones y grupos feministas, sea a quedarnos quietas y calladas en nuestras casas, incluso cancelando la comunicación mediante medios electrónicos?! ¿Qué hay más desvinculante e inmovilizante que eso?, perdón pero es cagarse en los cientos de luchas históricas, en los cientos de miles de mujeres reprimidas, incluso muertas por luchar y exigir un lugar digno en nuestra sociedad, en nuestro mundo; y no sólo eso, en los millones –sí, aún son millones– de mujeres que hoy no pueden salir de sus casas, ni ir a la escuela, ni a un trabajo, ni al médico, ni juntarse con amigas, o las que luchan todos los días para salir del ámbito doméstico…

Reconozco e intento sumarme a los esfuerzos por hacer un movimiento que involucre a muchos sectores de la sociedad con reclamos y exigencias tan legítimas como las que se plantean como motor del paro, pero justamente por eso la propuesta no puede ser guardarnos y callarnos. Teóricas feministas como Silvia Federici y Rita Segato resaltan la creación de vínculos como el germen creativo y la virtud de los movimientos feministas. Este paro precisamente apunta a lo contrario, al aislamiento. Una cosa es un paro activo, creativo, con acciones unitarias o dislocadas, que realmente confronte y ponga en un predicamento al poder, y otra cosa es irnos a guardar, a callar y a aislarnos por nuestra propia iniciativa y además con la venia del esposo, del patrón, del rector, de los curas y ministros misóginos, violadores y pederastas.

#Un día sin nosotras sólo plantea la ausencia de nosotras con nosotras mismas, el sistema imperante ha intentado invisibilizarnos por siglos siendo que somos parte medular de la sociedad. No nos van a ver en los ámbitos públicos, ¡qué novedad! El patriarcado lo aplaude: menos molestias con las intrínsecamente revoltosas, con las mitoteras, con las sangronas que manchan con su inmundicia.

mujeres en lucha
Ilustración: Vea Vaquero.

Como dice Rita Segato: Lo que nos dice que estamos llegando a destino es la reacción de los que nos odian. La reacción violenta de los de siempre es la medida de lo que estamos avanzando. ¿No nos dice nada que empresas, gobiernos, instituciones educativas, televisoras, partidos políticos, entre otros, den su beneplácito disfrazado de apoyo para que todas nos quedemos en casa? Un texto muy esclarecedor de la feminista Laura Mora Cabello de Alba dice: En definitiva, patriarcado, capitalismo y democracia están en profunda relación, siendo el primero el sustento sobre el que se asientan el sistema económico dominante y la forma política e institucional de convivencia del presente. No esperemos que sea legítima la preocupación y el “apoyo” de los pilares del sistema.

Yo no pienso que hay que postergar la lucha de género para cuando triunfe la revolución, esas luchas deben ir a la par, puesto que no se pueden separar patriarcado y capitalismo; Clara Zetkin y Rosa Luxemburgo lo supieron. Como militante de izquierda he visto cercanamente cómo el patriarcado y el ejercicio patriarcal del poder descomponen y quitan congruencia y probidad a los proyectos políticos más nobles, carcomiéndolos desde dentro. Así como no hay una sola lucha revolucionaria tampoco hay un solo feminismo. Descalificar a aquellas que no hagan paro el 9 de marzo, así como a los esfuerzos reales hechos por muy pocos varones para cuestionar y destruir el patriarcado, únicamente nos lleva a un maniqueísmo que raya en fascismo. No les enseño a mis hijas a odiar a los hombres, les enseño a ser feministas críticas que luchen contra la opresión y la injusticia en su más amplio aspecto.

Ese lunes 9, antes de ir a dar clases, las voy a llevar a la escuela y muy especialmente ese día les voy a explicar que, gracias a la lucha de mujeres valientes, hoy tenemos ese derecho entre muchos otros, y que deben aprender para seguir luchando.


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El 9 de marzo habrá clases ¿sin maestras?

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SEP no suspende clases el 9 de marzo, maestras podrán unirse al paro nacional sin mujeres

El personal docente a nivel prescolar, primaria y secundaria está conformado por el 71 por ciento de mujeres, lo que pone en dida la funcionalidad del sistema educativo este 9 de marzo, día del paro nacional sin mujeres.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció que las clases el 9 de marzo en escuelas básica de México se desarrollarán con normalidad y sólo se permitirá que mujeres – maestras y personal administrativo – se ausenten de sus actividades y participen libremente del paro nacional, por lo que los hombres de ‘cada escuela se ajustarán a su realidad’.

Un día sin maestras

Si todas las maestras y mujeres de administrativo que colaboran en la SEP deciden unirse al paro nacional sin mujeres, 720 mil 185 docentes dejarían de impartir clases.

De acuerdo con los datos del Sistema de Información y Gestión Educativa de la SEP, el colapso se verá en el nivel preescolar, donde dejarían la responsabilidad de la educación a 7 mil 445 profesores varones, ya que el 96.29 por ciento son mujeres; es decir, 192 mil 993 profesoras.

En México existen 223 mil 931 planteles de educación básica, públicos y privados, según las cifras de la Secretaría de Educación Pública. En cuanto a los educandos de preescolar, primaria y secundaria, prácticamente sólo se les vería a la mitad de las mujeres, ya que las menores representan el 49.25 por ciento: 12 millones 533 mil 823 alumnas, frente a 12 millones 913 mil 644 varones.

En las 96 mil 903 escuelas primarias, las profesoras representan 69.31 por ciento, por lo que, de faltar (366 mil 786 mujeres), la responsabilidad de aprender a leer y a escribir quedaría a cargo de los 162 mil 391 hombres. Para soportar el faltante, se tendrían que implementar aulas con 79 alumnos por cada profesor, mezclando los grupos y las edades.

En el nivel secundaria, los datos muestran que en los 37 mil 622 planteles, las mujeres docentes son el 56.21 por ciento, pero los alumnos varones son más de la mitad, cifra que no es menor: 3 millones 306 mil 928 de adolescentes varones, frente a 3 millones 229 mil 333 alumnas.

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Mujer ¿Vas a participar en el paro nacional?

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Mayoría de mexicanas apoyan movimiento un día sin mujeres 9 de marzo

¿Cuántas mujeres apoyan y participarán en el paro nacional ‘Un día sin mujeres’ del 9 de marzo?

De acuerdo a una encuesta realizada por El Financiero, en México el 67 por ciento de las mujeres apoyan el movimiento que busca demostrar la importancia de las tareas de la mujer en todos los sectores de la economía y la sociedad, mientras que el 57 por ciento está dispuesta a participar en el paro nacional y ‘no moverse el 9’.

Las mujeres entre 30 y 49 años de edad son las que más interesadas y dispuestas están en participar en el movimiento ‘Un día sin mujeres’ del 9 de marzo.

En la Ciudad de México, donde se concentra la mayor actividad económica y burocrática del gobierno federal, el 55 de las mujeres entrevistadas expresó su intención de sumarse al paro del 9 de marzo, siendo las jóvenes de entre 18 y 29 años las que dijeron estar más interesadas.

Un día sin mujeres 9 de marzo estad{isticas
Fuente: El Financiero

‘Un día sin mujeres’ sin represalias

Cuestionados acerca de si creen que habrá o no sanciones para las mujeres que no acudan a realizar sus labores o actividades, el 22 por ciento de las personas entrevistadas a nivel nacional cree que sí habrá sanciones para la mayoría de ellas; el 25 por ciento, que habrá sanciones solamente para algunas, y el 45 por ciento cree que no habrá ninguna sanción. El 8 por ciento restante no sabe qué opinar al respecto.

En la encuesta de la Ciudad de México también se abordaron algunas preguntas que se hicieron el año pasado con respecto al Día Internacional de la Mujer, que se celebra el 8 de marzo.

Según el estudio, el porcentaje de entrevistados que dicen que sí celebran el Día de la Mujer creció 14 puntos, de marzo de 2019 a marzo de 2020, al pasar de 29 a 43 por ciento. Ese crecimiento se observa principalmente entre los hombres, con un aumento de 16 puntos (de 27 a 43 por ciento), frente a un aumento de 12 puntos entre las mujeres (de 31 también a 43 por ciento).

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¿México es feminista?

En la encuesta de la Ciudad de México también se abordaron algunas preguntas que se hicieron el año pasado con respecto al Día Internacional de la Mujer, que se celebra el 8 de marzo.

Según el estudio, el porcentaje de entrevistados que dicen que sí celebran el Día de la Mujer creció 14 puntos, de marzo de 2019 a marzo de 2020, al pasar de 29 a 43 por ciento. Ese crecimiento se observa principalmente entre los hombres, con un aumento de 16 puntos (de 27 a 43 por ciento), frente a un aumento de 12 puntos entre las mujeres (de 31 también a 43 por ciento).

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Marcha 8 de marzo ‘Por las que ya no están’

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Marcha 8 de marzo: horarios, rutas y todo lo que tienes que saber

Las mujeres mexicanas buscan hacer oír su voz y exigir mayores garantías de sus derechos, equidad de género y seguridad a su integridad física.

En una de las sociedades en las que el hombre ha llevado la batuta en la mayoría de los sectores, las mujeres se levantan empoderándose y exigiendo en un hecho sin precedentes un freno total a la violencia de género y a la ola de feminicidios sin respetar edad ni estatus y que ha horrorizado al país.

En el marco de la conmemoración del ‘Dia Internacional de la Mujer’ la marcha del 8 de marzo convoca a mujeres de todas las edades a protestar por sus derechos. Agrupaciones y colectivos feministas han hecho un llamado a manifestarse en al menos 20 ciudades en todo México.

En la Ciudad de México la marcha del 8 de marzo iniciará en el Monumento a la Revolución rumbo al Zócalo Capitalino, haciendo una parada en la Antimonumenta ubicada frente al Palacio de Bellas Artes.

Mapa marcha 8 de marzo
Google Maps

La convocatoria es a las 14:00hrs., del domingo con el rostro cubierto o descubierto, respetando el orden de los contingentes indicados en redes sociales.

Marcha 8 de marzo contingente
Imagen: Redes Sociales

Marcha del 8 de marzo en otras ciudades de México

Toluca 

En esta ciudad se está convocando a dos movilizaciones: la primera tendrá como punto de reunión la Alameda Central y dará inicio a las 16:00 horas. Tendrá como punto de llegada la Plaza de los Mártires.

Querétaro

Las manifestantes se reunirán a las 16:00 horas en la Plaza de la Constitución. 

Monterrey

La Explanada de los Héroes será el punto de partida de la marcha del 8 de marzo en Monterrey; se ha citado a las 16:00 horas, sin embargo habrá actividades culturales desde dos horas antes.

Aguascalientes

En la zona hidrocálida las actividades iniciarán desde una noche antes; pues el punto de congregación de las manifestantes será Exedra, el sábado 7 a las 22:00 horas.

Guadalajara

En la perla tapatía las manifestantes se congregarán a las 18:00 horas en Plaza Universidad, desde ahí marcharán hasta la Glorieta de las Personas Desaparecidas. Sin embargo desde las 11 d ela mañana se efectuarán actividades y talleres en el punto de reunión.

Tampico

En esta ciudad tamaulipeca la marcha iniciará a las 16:30 horas, y tendrá como punto de reunión el Walmart Alijadores.

Marcharé el 8 de marzo y me guardaré el 9 porque tenemos una deuda histórica entre nosotras

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No se nace mujer, se llega a serlo.
Simone de Beauvoir.

Estamos frente a lo que se considera una nueva ola de feminismo. Que lo que busca son los derechos de las mujeres, mayor igualdad, eliminación de la violencia de género, respeto, seguridad, protección, accesos igualitarios a la educación, al trabajo a los sueldos, salud, entre muchas e importantes demandas.

Si les preguntamos a las mujeres, no creo que haya ni una que diga que no lo merecemos, que no lo quiere, que la demanda es injusta o arbitraria, todas sabemos lo que vivimos en lo cotidiano, el trabajo que nos implica ser mujer hoy y ahora.

La violencia que viven nuestras niñas y adolescentes, les afecta emocional y físicamente, lo que más me preocupa es la normalización de ese tipo de actitudes desde edades muy tempranas, crecemos creyendo que así es el mundo y que está bien, que así nos tocó, que por ser mujeres ésa tiene que ser nuestra vida.

8 y 9 de marzo
Imagen: Pinterest.

Tenemos que educar a niños y niñas, desde la infancia, es responsabilidad de todos y todas hacerlo, ejemplificar y puntualizar el respeto, prohibir actitudes dañinas y violentas, para que no crean que están bien o que es “normal”. Es importante hablar y entender sobre las nuevas masculinidades, que rompen con las ideas tradicionales de cómo debe comportarse un hombre y qué debe esperar de una mujer.

Históricamente se ha construido la idea de que el hombre es “el sexo fuerte” y la mujer “el sexo débil” más frágil, menos capaz, e incluso, menos inteligente. Lo más impresionante es que se cree que es algo “natural” que se da desde el nacimiento.  Sabemos que es en realidad un mandato, que se ha ido desarrollando con la cultura, el tiempo y la historia y perpetuando a través de la educación.

Ésta es la razón por la que los hombres han sido protagonistas de la historia y de las decisiones que se toman en la política, el ámbito social, cultural, y se relegó por muchos años a la mujer al rol de crianza y cuidado de los hijos, a la satisfacción sexual de los hombres, así como a las labores del hogar.

Habiendo estado muy inconformes desde el siglo XVIII, las mujeres comenzamos a protestar y pedir un cambio que hasta hoy no se ha visto. Los expertos dicen que todavía vamos a tardar 100 años más para verlo, nosotras no estaremos aquí, este cambio no se va a dar si nos quedamos calladas, si no hacemos nuestra parte, si no levantamos la voz, si no lo exigimos.

protestas en marzo
Fotografía: Noticieros Televisa.

El cambio debe darse en todos los espacios, el público y el privado, porque sí es real, todavía estamos viviendo violencia de género que se refleja en que ganamos menor salario que los hombres por el mismo trabajo; también, los puestos en la política, en el mundo militar, en la economía y el sector salud, sigue siendo mayoritariamente de hombres.

Además de que muchas mujeres en el interior de sus casas siguen sufriendo violencia, desigualdad de labores, malos tratos, explotación económica, abusos sexuales y emocionales. Parecería que en los espacios públicos estamos ganando terreno, pero en los privados sigue existiendo la misma relación de poder de los hombres contra las mujeres y niñas.

Este 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer, no debería de existir un día internacional de la mujer, pero existe por una necesidad real de visibilizarse, de hacer que nos escuchen, que las cosas cambien.

Cada una de las olas feministas han sido muy importantes y en cada una de ellas ha habido un avance, pero no es suficiente, es por eso que sigue el movimiento, es por eso que hoy se suman nuevos movimientos mundiales como el #MeToo que buscan impulsar acciones a favor de la igualdad de género y parar el abuso contra las mujeres.

A muchas las están violentando mientras lees este escrito, a otras las están matando, muchas están llorando por dolores físicos, emocionales, por abusos, por pérdidas, por injusticias.

protestas
Ilustración: @inned.

No todas las mujeres están pensando lo mismo, ni queremos que suceda, la diversidad de pensamiento y el respeto al mismo, hace que el mundo se mueva, cambie y mejore.

Lo que sí te pido es que apoyes, que si no entiendes, respetes, que te informes, que escuches, que leas, que estudies, que te solidarices.

Sí, sólo por el hecho de ser mujer, porque es importante hacerlo, porque tenemos una deuda histórica de solidaridad entre nosotras, porque juntas podemos, porque lo merecemos, porque ¡ya basta!, porque nos están matando, porque ¡ni una más!

Porque si te quedas callada, le das la razón a la violencia.

Yo marcharé el 8 de marzo junto a mis hijas, mis hermanas, mis amigas, mis colegas, mi género. Junto a mujeres valientes, heridas, solas, juntas, acompañadas, cansadas y esperanzadas en un cambio real.

Y pararé el 9 de marzo, para que se note, para que se escuche en la soledad y el silencio nuestra ausencia, para que nos valoren, para que nos extrañen, para solidarizarme y por sororidad con mis hermanas mujeres.

Esto es para todas nosotras, gracias a todas por leerme.


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