Estas son las razones del distanciamiento entre AMLO y el EZLN

Lectura: 3 minutos

La distancia entre el zapatismo y Obrador tiene su origen en 2001, cuando el PRD (partido al que pertenecía AMLO) “traicionó” al EZLN.

Andrés Manuel López Obrador encabezará el primer gobierno de izquierda en México, pero uno de los símbolos de resistencia civil más representativos del país no se sumará a su plan de gobierno.

Pocos días después de las elecciones del primero de julio, el Ejército Nacional de Liberación Zapatista (EZLN) lo dejó muy en claro: no se sumaría al triunfo de Obrador y, por el contario, aseguró en un comunicado que “podrán cambiar el capataz, los mayordomos y caporales, pero el finquero sigue siendo el mismo”.

Te puede interesar: Plan de López Obrador en el sector energético pone en riesgo inversión de Pemex: Moody´s

El mensaje directo fue firmado por el Subcomandante Galeano (antes Marcos) y constata el distanciamiento del zapatismo con la figura de Andrés Manuel, quien ha conseguido el respaldo de varias organizaciones de izquierda.

La carta de Obrador

El EZLN irrumpió en la escena política del país el pasado 1 de enero de 1994 y, tras varios años de lucha, se consiguió negociar y firmar los Acuerdos de San Andrés en 1996. Este pacto tenía como objetivo establecer la autonomía de los pueblos indígenas del país, sin embargo, nunca se cumplieron por completo.

López Obrador, de acuerdo con su equipo cercano, buscará retomarlos como un acto que fomente el diálogo con el EZLN, sin embargo, por el momento, el grupo zapatista no se ha mostrado abierto a iniciar conversaciones con AMLO, con quien mantiene una larga controversia.

El desencuentro entre AMLO y el EZLN

La distancia entre el zapatismo y Obrador tiene su origen en 2001. Ese año, tras un recorrido por todo el país, dirigentes del EZLN, encabezados por Marcos, solicitaron la tribuna de la Cámara de Diputados para urgir en el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés.

En respuesta, el Congreso aprobó una Ley Indígena sumamente diferente a lo acordado inicialmente, lo que ocasionó el rompimiento del diálogo zapatista con el gobierno federal. López Obrador era entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal, y una figura importante del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

El PRD apoyó inicialmente la propuesta zapatista, pero al final votó en favor de la “contrarreforma”, la iniciativa del Ejecutivo. En respuesta, el EZLN se dijo traicionado y desde ese momento rompió todo diálogo con el gobierno federal y durante varios años el acceso a sus comunicaciones estuvo cerrado.

Con Obrador, desde entonces, siempre hubo un distanciamiento intenso. “Hombre extraordinariamente hábil y pragmático, López Obrador ha concebido la jefatura del Gobierno del Distrito Federal como trampolín para la silla presidencial“, dijo Marcos en 2003 y en 2006, durante su primer campaña presidencial, pidió no votar por el tabasqueño.

No ha importado que el político izquierdista haya intentado acercarse al movimiento zapatista. Siempre hay desconfianza. En 2012, también durante el periodo electoral, Obrador intentó renovar el diálogo con Marcos. “Les extiendo mi mano franca en señal de respeto y reconciliación”, dijo Obrador en Chiapas, pero la respuesta fue dura.

“Uno de los tres bribones que habrán de disputarse el trono sobre los escombros de México ha venido a nuestras tierras a demandarnos silencio”, escribió Marcos al referirse a los tres candidatos presidenciales de entonces.

Ahora, con el triunfo de Obrador y a pocos meses de que inicié su gobierno, el EZLN no ha dado muestras de reemprender el diálogo pronto, sino todo lo contrario, pero aún quedan seis años en los que no sería imposible pensar en un eventual aunque sorpresivo giro en la historia.

Con información de BBC

Síguenos en Facebook – Twitter – Instagram – Telegram

 

0 0 votos
Calificación del artículo
Subscribir
Notificar a
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
0
Danos tu opinión.x