Desmilitarizar el país fue una de las primeras promesas de campaña de AMLO, sin embargo, en medio de la crisis contra el huachicol, todo parece indicar que la Guardia Nacional tendrá el visto bueno de los legisladores.
El presidente Andrés Manuel López Obrador se concentra ahora mismo en la estrategia nacional en contra del huachicol, plan que ha generado retrasos en el abasto de gasolina en varios estados del país, pero no ha dejado de lado otras polémicas propuestas como el de la Guardia Nacional.
Ahora, tras varias semanas de críticas, el presidente dijo en su rueda matutina de este martes, que la propuesta es que la Guardia Nacional se divida en dos mandos: uno administrativo que dependerá de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana y otro operativo, que dependerá de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
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Cabeza civil, pero cuerpo militar, como lo calificó la politóloga Denise Dresser. Ante las denuncias de una estrategia de militarización en el país que, afirman organizaciones de derechos humanos, ha generado abusos por parte de las fuerzas armadas, Obrador ha ofrecido un “término medio” que, no obstante, afirman sus críticos todavía no es suficientemente claro y no garantiza que las violaciones a los derechos humanos se detengan.
Pese a todo, el mandatario dijo que se siente confiado en que los legisladores aprueben la propuesta, en la que será necesaria la participación del Ejército, la Marina y la Policía Federal.
⚠️ Circula documento con los cambios al dictamen de #GuardiaNacional ⚠️
Si estas serán las modificaciones, es atole con el dedo. El mando operativo real, queda en la SEDENA (verde) y se mantiene la presencia militar de forma indefinida y no verificable. (CUARTO TRANSITORIO) pic.twitter.com/lm9uQEC1GT
— Alfredo Lecona (@AlfredoLecona) January 14, 2019
“Yo acepto que sea de esta forma porque nos hace falta tener la Guardia Nacional”, indicó el fundador de Morena.
Los cambios que se esperan
Se espera que la Cámara de Diputados realice al menos cuatro cambios importantes en el dictamen aprobado en diciembre pasado sobre la Guardia Nacional. Estos cambios tienen como objetivo atender alguna de las críticas y observaciones que han realizado servidores públicos y expertos sobre el mando civil.
Cabe destacar también que organizaciones civiles han criticado la propuesta del presidente, ya que, señalan, con la creación de este cuerpo se continúa con la estrategia de militarización del país que ha sido fallida en muchos frentes.
Estas organizaciones han acusado también a la a la Comisión de Puntos Constitucionales de excluir sus observaciones del dictamen que será discutido en la Cámara de Diputados este mes.
Los cambios al texto de la Guardia Nacional
Pese a las críticas, la semana pasada se llevaron a cabo audiencias públicas a fin de conseguir el consenso suficiente sobre el dictamen aprobado en diciembre sobre la Guardia Nacional.
Los legisladores dieron a conocer que entre los cambios se encuentran el anunciado mando civil, además de que se espera que se modifiquen mecanismos de intervención que originalmente se habían propuesto en los municipios, así como la posibilidad de fortalecer el mecanismo de control legislativo sobre el nuevo cuerpo.
Se espera también que, pese a las críticas, los diputados mantengas algunas medidas más polémicas establecidas en el primer dictamen, como la capacidad de investigación que tendrá la nueva fuerza, así como la formación y administración en ámbitos de la Defensa Nacional.
