REALISMO MÁGICOURBANO ROSA!

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Si usted es uno de esos turistas -o visitante endémico- que busca y gusta por descubrir la magia escondida o albergada en un sitio natural o rural o, aún mejor, la magia custodiada por una ciudad contemporánea, y que además ofrezca una extraña pero fuerte mezcla de sobredosis de adrenalina –o de cualquier otra sustancia transmutaconciencias– con una pizca exorbitante de realismo mágico urbano, dese un momento –o una vida completa, si la magia del lugar lo atrapa…literalmente!- para visitar -antes que le quiten por completo todo vestigio de magia- la exclusiva Zona Rosa de la ciudad de México, la versión metropolitana más acabada del triángulo mexica de las bermudas –y de las desnudas-, el lugar donde realidad y ficción se unen fantasmagóricamente, en el espacio y en el tiempo actuales, transformando para siempre la chistera social y política urbana de la ciudad de México.

 

El conjunto de hechos y procesos demutación y permutación constantes y permanentesde la Zona Rosa,desde su época de oro como distrito de la moda y la farándula, pasando y permaneciendo un largo periodo en su etapa de degradación, subutilización ymarginalidad, han derivado y (de)generado, en nuestros días, en la implantación teórica-práctica del realismo mágico literario y pictórico,algunas veces de manera espontánea y otras no tanto, como componente físico de su symploké urbana, materializándose, de esta forma, comoel distrito contemporáneo del realismo mágico urbano mexica!

 

Cuna del progresismo antiacademicista chilango, del posmodernismo pro(gre) mecanicista e industrialista, del new age yunkista, delos movimientos contraculturales en general y, por supuesto, contraclimáticos en particular –ropas de finísimo terciopelo negro y botas de miles ojales y agujetas kilométricas!…ser gótico chilango en verano es un pequeño lujo que sólo algunos se proveen-, en resumidas cuentas, semillero de los movimientos contra…lo que se pueda de finales del siglo XX y principios del XXI. La Zona Rosa, continente espacial, urbano y social del realismo mágico contemporáneo urbano, aporta a la cultura metropolitana coetánea-como sucedió, en su momento, con la pintura y la literatura del realismo mágico- un componente fundamental al maravilloso y caótico entramado de la ciudad, un elemento extraño –o ya comúnmente llamado focalizado– y que consiste en la introducción de un elemento insospechado, incierto, improbable, dudoso, absurdo, irracional, incoherente, descabellado, insensato, ilógico, disparatado e inadmisible, en un contexto–en un marco espacial, temporal, social y político- predominantemente realista o, al menos, que pretende estar, entender y operar en la realidad, y que, naturalmente, genera y suscita, en el espectador, en el ciudadano, en el paseante, en el turista, en el paisano, un efecto extraño o maravilloso, insólito o fantástico y que deriva, también naturalmente, en un estado dedesconcierto absoluto, de turbación y desorientación tajante,dejaa la concurrencia aturdida o (des)agradablemente estupefacta, como quien dice: hechos unos…pasmados, a todos.

 

 

¡Sin rastro! Desaparecidos de Zona Rosa. Dos vinculados con reclusos

 

A cinco días de la desaparición de los jóvenes, las autoridades capitalinas no han logrado avances para dar con su paradero.

 

A cinco días de haber desaparecido, los jóvenes que se encontraban en un centro irregular conocido como Heaven (bar tipo after pero con el registro de ser un restaurante), no han podido ser encontrados por las autoridades capitalinas, quienes se encuentran sin avances en la “línea de investigación” que ofrecieron a familiares de los jóvenes, para dar con su paradero.

 

Metrópoli El Semanario Sin Límites, viernes 31 de mayo de 2013

 

Nada por aquí nada por allá…ZAZ ¡Sin rastro!, desaparecen jóvenes de la Zona Rosa, como truco de chistera, como si se tratara de un acto de prestidigitación urbana de la más alta calidad y hechura copperfieldana. HistóricamenteMéxico -y para el caso la Ciudad de México- noha destacadoni mundial ni regionalmentecomo una cuna de grandes magos, nunca hemos contado con un David Copperfield, que ante un auditorio abarrotado de miradas atónitas logra desaparecer tanto objetos animados como desanimados del escenario o, para el caso –cuando también desapareció a parte de su público…claro, él los regresó a la brevedad y sanos y salvos-,la desaparición que ejecutó de la Estatua de la Libertad; tampoco hemos contado con magos de la talla del inglés Harry Houdini quien, en minutos de gran expectación y nerviosismo de su público, lograba escapar –sin necesidad de tramitar un amparo- de un descomunal número de cadenas y candados que lo aprisionaban dentro de un tanque lleno de agua; ni tampoco a un René Lavand que, en su manipulación maravillosa de los naipes –y no en la maravillosa manipulación de las cuentas del erario público-, lograba confundir y desorientar a muchos.

 

Nuestra magia es diferente y nuestros magos también lo son, aunque los resultados en el espectador pueden resultar muy similares; en el México de hoy y siempre, contamos con magos ilusionistas -en todas las áreaslaborales, tanto en los productores de alimentos, en los creadores de símbolos, en los que producen las leyes, como en los productores de bienes y servicios, en fin en todas las actividades socioeconómicas-, que maravillan a veces y enfurecen en otras. De estos magos ilusionistas,hemos podido constatar desde la ilusión de la supuesta economía robustahasta el escapismo legal -como elemento mágico fundamentalde la justicia y la cultura nacionales-;desde las suertes de adivinación explícita realizada por cualquier candidato, ante las cámaras de TV a pregunta expresa,sobre la supuestacerteza exaltada deltriunfo electoral previo a las elecciones y aún después de ellas hasta los trucos de ocultismo de la realidad estadística económica y social mexicana y la obscenidad de la información que desinforma al respecto; desde los actos de encantamiento fraguado por el reparto de ‘beneficios’ a los seguidores partidarios o sindicalizadosy operado por los ‘líderes’ sociales, políticos o gremiales hasta la prestidigitación de las actuaciones de la autoridad. Sin embargo, el fenómeno de magia contemporánea más actual y de mayor escala –en el mundo mundial- es la suerte de desaparición de 11 jóvenes…bueno no! de 12 jóvenes…bueno, creemos que sólo desaparecieron 6!…en fin, es un caso muy complicado y no sabemos cuántos, pero lo que sí sabemos es que desaparecieron, porque no sabemos en dónde están!…la desaparición, ante las cámaras de vigilancia del DF, de un grupo de jóvenes que se encontraban saliendo de un antro en la Zona Rosa, un acto de evanescencia quela sitúa como el mayor referente del realismo mágico urbano contemporáneo.

 

Quieren a Zona Rosa como Pueblo Mágico

 

Tras los incidentes registrados en el bar Heaven, reviven la propuesta de convertir a la Zona Rosa en pueblo mágico, además de sacar del congelador, un presupuesto de 40 mdp para cirugía de la Zona.

 

Jorge Eduardo Pascual Nevarez, presidente de la Asociación de Comerciantes de la Zona Rosa (Acozoro), señaló a El Semanario Sin Límites que tras la crisis que han sufrido los comercios luego de que trascendiera la desaparición de un grupo de jóvenes (doce confirmados) en el bar after Heaven, revivir la propuesta que se hizo en 2006 de convertir a la Zona Rosa en un Pueblo Mágico, no es una mala idea.

 

Metrópoli El Semanario Sin Límites, miércoles 5 de junio de 2013

 

Nada por aquí, nada por allá…ZAZ ¡Quieren a Zona Rosa como Pueblo Mágico!, pues será por las desapariciones recientes –y todavía habría que esperar, porque falta considerar en dónde aparecen…porque si aparecen ahí mismo, ZAZ, ya se ganó el mote de Pueblo Mágico!-, porque después de una lectura, digamos medianamente rigurosa, del programa de Pueblos Mágicos se puede intuir con claridad que existe una gran distancia que separa a la Zona Rosa de los supuestos, criterios, principios y requisitos para que pueda considerársele -convertirse y recibir todos sus beneficios-como Pueblo Mágico!?, de inicio habría que ver si la solicitud de inscripcióncomo tal es recibida y/o aceptada o desechada por falta de evidencia mágica!

 

 

El Programa Pueblos Mágicos contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país quesiempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representanalternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabidoguardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

 

Un Pueblo Mágico es una localidad que tiene atributos simbólicos, leyendas, historia, hechos trascendentes, cotidianidad, en fin MAGIA que emana en cada una de sus manifestaciones socio – culturales, y que significan hoy día una gran oportunidad para el aprovechamiento turístico, para locual serán consideradas aquellas localidades que cuenten con una población base de 20,000habitantes.

 

OBJETIVOS DEL PROGRAMA

• Estructurar una oferta turística complementaria y diversificada hacía el interior del país,basada fundamentalmente en los atributos histórico – culturales de localidades singulares.

Aprovechar la singularidad de las localidades para la generación de productos turísticosbasados en las diferentes expresiones de la cultura local; artesanías, festividades, gastronomía, y tradiciones, entre otras.

• Aprovechar la singularidad de las localidades para la generación de otros productos turísticos tales como la aventura y el deporte extremo, el ecoturismo, la pesca deportiva, y otros que signifiquen un alto grado de atractividad dentro del territorio de la localidad participante.

• Poner en valor, consolidar y/o reforzar los atractivos de las localidades con potencial yatractividad turística, fomentando así flujos turísticos que generen:

 

‒ Mayor gasto en beneficio de la comunidad receptora (artesanías, gastronomía,amenidades y el comercio en general), así como,

‒ La creación y/o modernización de los negocios turísticos locales.

 

• Que el turismo local se constituya como una herramienta del desarrollo sustentable de laslocalidades incorporadas al programa, así como en un programa de apoyo a la gestiónmunicipal.

Que las comunidades receptoras de las localidades participantes aprovechen y se beneficie del turismo como actividad redituable como opción de negocio, de trabajo y de forma de vida.

 

PUEBLOS MÁGICOS, Reglas de Operación, SECTUR

 

No sé ustedes pero desde una perspectiva más lúdica, plural y tolerante –y, claro, con las ganas y la magia necesaria para que cuadre a como dé lugar- quizás sí podría haber algunas coincidencias que permitiríanencuadrar el programa de pueblos mágicos con la realidad de la Zona Rosa; por ejemplo, aquello de la “…MAGIA que emana en cada una de sus manifestaciones socio – culturales…”, podría echarse mano de las recientes desapariciones, del ocultismo de los desaparecidos –on tan tú?– y de los actos de prestidigitación de la autoridad en relación con los avances –o la falta de ellos- en la investigación. Con todo esto, a poco no la sonaja no es susceptible de considerarla un pueblo mágico, pos como no mi buen? También hay coincidencias importantes en relación con el aprovechamiento de la “…singularidad de las localidades para la generación de productos turísticos basados en las diferentes expresiones de la cultura local; artesanías, festividades, gastronomía y tradiciones…”, por supuesto también podría cumplir en esto, -claro está con muchas ganas de que cumpla- y pa’ muestra un botón: los discos pirata y las pictóricas tarjetas de presentación de los antros de la zona pueden formar parte con certeza de las artesanías locales; la festividad del Nos vamos al mundial, nos vamos al mundial!,podría llenar el requisito de la expresión cultural de festividad más representativa;asimismo, las típicas hamburguesas de McDonald’s y Burger King y ni que hablar de los populares cafés de Starbucks, formarían parte fundamental del riquísimo menú gastronómico endémico y, por supuesto, el ya tradicional y pintorescolevantón de paisanos!, se podría indicar como una de las más arraigadas tradiciones de la zona. Me cae que, tomando en cuenta todo esto, sí que se lo merece la zonajita…nuestro pueblo mágico de la ciudad deMéjico!

 

Arquitectura: Considerar la armonía y conservación general de los elementos arquitectónicos, civiles o públicos, que dan carácter e identidad al poblado. No necesariamente deberán serpoblados con monumentos históricos, sino también pueblos con arquitectura vernácula o delsiglo XX.

 

Edificios emblemáticos: Destacar edificios que, por su estilo, historia o majestuosidad sean, porsi mismos, un elemento atractivo para el visitante.

 

Fiestas y Tradiciones: Como parte del patrimonio cultural inmaterial, cabe resaltar la importanciade las festividades locales, como elementos culturales que sustentan la vida de la comunidad.

 

Producción Artesanal: Una muestra de la creación e imaginación de los pueblos se presenta ensu población artesanal como parte de la magia que los envuelve.

 

Cocina tradicional: Elemento de fundamental importancia para resaltar el carácter de identidad ysu vínculo con el turismo cultural es la cocina tradicional que se puede disfrutar en su contextooriginal.

 

PUEBLOS MÁGICOS, Reglas de Operación, SECTUR

En el tema de los bienes tangibles o del patrimonio cultural urbano, ahí sí que se gana lo de Pueblo Mágico, pero fácilmente. Sólo por poner unos cuantos ejemplos de lo pintoresco, tradicional, endémico y único del sitio en lo referente a sus valores arquitectónicos, urbanos y paisajísticos; en la calle de Niza se puede encontrar una muestra muy singular de arquitecturas y edificios emblemáticos de gran factura ‘original’ y de un ‘localismo’ y ‘regionalismo’ avasallador, muestra de ello son: el espectacular estilo chalet suizo del restaurante del mismo nombre, escala, ritmo y proporción unidos en una sola pieza de arquitectura excepcional –sólo le falta que algún día caiga nieve para que usted quede atrapado por los paisajes nevados de los cantones suizos-; o, mero en frente, deslícese por el tiempo –que transcurre para lograr atravesar la calle- y asista, con toda su familia, a un rincón de la ciudad prohibida de Pekín!, con todo y buda de por medio; o, si es usted un poco más aventurero y desea adquirir mayores vivencias del lugar, avance unos cuantos pasos y sumérjase en las yardas, costumbre enraizada entre sus clientes más distinguidos y asiduos, logrando, de esta forma, perpetuar esta tradición milenaria –de a cómo nos toca carnal!?, pos de a mil,de a milagro como siempre!-, y si lo que busca es descubrir lo indecible, lo inconfesable, la experiencia extravagante y más extrema del realismo mágico urbano rosa, dese la vuelta por la calle Lancaster y diríjase al meritito cielo, con todo su señor incluido, y súbase a su nube y desaparezca –hasta que lo encuentren- en el Heaven.

 

Lo mágico de la Zona Rosa está ahí, en la zona rosa, en el conjunto de actividades, hechos y sucesos que dan fe de su magia, de su alto valor para convertirse en Pueblo Mágico –bueno, según Don Pascual-, para convertirse física, social, política y mediáticamente en el representante contemporáneo del realismo mágico urbano rosa mexica!

 

Pero, ¿será que esa es la vocación más adecuada para la Zona Rosa, será que lo mejor es que se convierta –o peor aún, la convirtamos- en un Pueblo Mágico? ¿No es más probable –e inteligente- que, dadas sus características intrínsecas urbanas: ubicación geográfica, en relación con el DF y la Zona Metropolitana del Valle de México; relación de proximidad con el corredor financiero más importante de la ciudad de México; sus características y cualidades de accesibilidad –metrobús, metro, autobuses BRT, ecobici, peatonalización de calles, etc.-; la amplia variedad de servicios y de comercio con los que cuenta: suproximidad a una gran diversidad de equipamientos públicos y privados y a oficinas de gobierno local y federal; su relación funcional, política y económica con el Centro Histórico de la ciudad y un largo etcétera- y su rol fundamental para lograr consolidar un modelo de desarrollo urbano más ordenado y sustentable, un nuevo modelo territorial que, no sólo la Zona Rosa debe adquirir, sino que la zona central de la ciudad de México requiere? ¿No será que conviene mucho más implementar una estrategia de fomento al desarrollo urbano –insisto, ordenado y sustentable- que un criterio basado en la protección y salvaguarda de sus valores ‘tradicionales’ que, actualmente, le son ajenos? La apuesta de la Ciudad –y de sus ciudadanos, por supuesto- debe ser a la promoción y fomento al desarrollo urbanos sustentable, equitativo y competitivo, lograr comprender -con la mayor complejidad urbana intrínseca posible- la vocación esencial de las diferentes zonas del territorio de la ciudad, para lograr promover y materializar los proyectos de regeneración urbana que nos permitan transitar –aunque sea poco a poco, pero de manera segura- hacia la consolidación de una ciudad de beneficios para todos, un modelo de ciudad que maximice el valor urbano de las diferentes zonas de la ciudad en un marco basado en el interés general y la utilidad pública, a favor del ciudadano y de las siguientes generaciones de chilangos.

 

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