Investigaciones anteriores han demostrado que las personas con sueño interrumpido tienen problemas para regular sus emociones y tienen más probabilidades de tomar decisiones impulsivas.
Las personas con síndrome de piernas inquietas tienen un mayor riesgo de pensamientos suicidas, sugiere un nuevo estudio. Los investigadores dicen que el trastorno neurológico, que causa que los pacientes muevan constantemente sus piernas, hace que una persona tenga casi tres veces más probabilidades de considerar quitarse la vida.
Investigaciones anteriores han demostrado que las personas con sueño interrumpido tienen problemas para regular sus emociones y tienen más probabilidades de tomar decisiones impulsivas.
Los científicos, de la Escuela de Medicina de Yale en Connecticut, dicen no saber por qué el síndrome hace que las personas piensen en el suicidio, pero que los hallazgos muestran que los médicos deben controlar de cerca a sus pacientes con este padecimiento para detectar cualquier signo de tendencias suicidas.
El síndrome de las piernas inquietas (SPI), o piernas cansadas, es una condición que hace que las personas que sufren la necesidad de mover las piernas constantemente debido a una sensación incómoda, a menudo se describe como estar arrastrándose.
Los síntomas suelen ser más graves durante la noche, cuando una persona está sentada o acostada en la cama, lo cual causa que quienes sufren este trastorno no pueden dormir bien por la noche.
El Dr. Brian Koo, coautor del estudio y profesor asociado de neurología en la Escuela de Medicina de Yale, cree que la falta de sueño puede llevar a la depresión y al suicidio.
Según el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares, se estima que entre el 7 y el 10 por ciento de la población sufre de este síndrome.
Algunos medicamentos como los relajantes musculares y las pastillas para dormir pueden ayudar a aliviar los síntomas, pero no existe aún una cura.
Para el estudio, el equipo examinó a 192 pacientes diagnosticados con la enfermedad y 158 personas en un grupo de control. Ambos grupos llenaron cuestionarios sobre el síndrome, su sueño, depresión y pensamientos o conductas suicidas.
Incluso después de tener en cuenta la depresión y otros factores, el 27 por ciento de los pacientes con SPI tuvo ideas o comportamientos suicidas de por vida en comparación con el siete por ciento del grupo de control.
Esto significa que las personas con el síndrome de piernas inquietas tienen casi tres veces más probabilidades de pensar o planear cometer suicidio. Las probabilidades de suicidio también aumentaron si su SPI era grave o muy grave, o si también sufrían de depresión.
Si bien el estudio solo muestra una asociación, el Dr. Koo sospecha que el SPI causa tendencias suicidas. “Habiendo tratado a cientos de pacientes, creo que está causando depresión y probablemente suicidio. Si funciona a través de un mecanismo de pérdida de sueño o algo más, no lo sé”, comentó.
El Dr. Peter Franzen, profesor asistente en el departamento de psiquiatría de la Universidad de Pittsburgh, dijo que el nuevo estudio es consistente con otros que muestran la relación entre la alteración del sueño y la ideación suicida.
Un estudio de 2017 de la Escuela de Medicina de Stanford encontró que las personas que se dormían a horas diferentes cada noche y se levantaban a horas diferentes cada mañana tenían más probabilidades de experimentar síntomas suicidas.
Y un estudio publicado este mes de Brigham and Women’s Hospital encontró que los adolescentes que dormían menos de seis horas por noche tenían tres veces más probabilidades de considerar o intentar suicidarse que los que dormían ocho horas por noche.
“Las personas con sueño interrumpido no funcionan tan bien. El sueño es importante cuando se trata de regular las emociones. Y hay déficits cognitivos cuando no duermes bien. Tienes problemas con la toma de decisiones y eres más propenso a tomar decisiones impulsivas”, explicó el Dr. Franzen.
En México existen las siguientes líneas de ayuda para aquellos que consideren tomar su propia vida.
- DECIDE VIVIR MÉXICO A.C. Teléfono: 01(333)1211956
- Guanajuato: 01800-2900024 (Línea de Atención a Crisis Psicológicas de la Secretaría de Salud de Guanajuato) y 066 (Emergencias).
- Jalisco: 01800-2274747 (Servicio de Intervención en Crisis del Instituto Jalisciense de Salud Mental) y 075 (Telmujer).
- Ciudad de México: 01800-4727835 (SAPTEL Cruz Roja Mexicana), al 0155-58046444 (Línea UAM de Apoyo Psicológico) o al 0155-55335533 (Plan Estratégico para la Prevención del Suicidio, del Gobierno del Distrito Federal).
- Puebla: 01-800-900-8432 (Di Sí a la Vida) o a los teléfonos 01 800 420 52 80 o 01800-5903636 (Línea de la Esperanza).
- Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y Veracruz: 01800-8223737 (Línea de Apoyo Emocional del Centro Estatal de Salud Mental).
- Yucatán: 999-9453777 (Salvemos una Vida).
- Nayarit: 311-2 14 01 01 (Servicio de Intervención en Crisis Telefónica del Centro de Salud Mental).
- Campeche, Quintana Roo y Yucatán: 01800-2328432 (VIVETEL, Secretaría de Salud de Campeche)
- Baja California Sur: 066 (Línea de la Esperanza, enlazada a la Central de emergencias).
- Baja California Norte: 075 (Línea de Intervención en Crisis).
- Hidalgo: 01800-8393822
- Resto de la República: 066 (Central de Emergencias)
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