Alberto Leyva, comentó que el cardo ayuda a combatir esta mortal enfermedad y que desde hace mucho tiempo se utiliza para algunos padecimientos, y es común encontrarla en las carreteras, pero por ser considerada maleza, se corta y está en peligro de extinción.
Ciudad de México.- Las plantas del desierto en Sonora se han convertido en una esperanza de vida para los enfermos con Cáncer, investigadores de la Universidad de Sonora ‘Unison’ han obtenido resultados muy prometedores en este terreno.
Alberto Leyva Peralta, quien se desempeña como investigador y estudiante del doctorado en Ciencia de Materiales del Departamento de Investigación en Polímeros y Materiales de la “Unison” señaló la necesidad de encontrar opciones de control a esta enfermedad. Dio a conocer resultados positivos en su estudio contra el cáncer, ya que lograron diferentes tipos de compuestos de tipo alcaloide y de tipo ácido graso.
Informó que evaluó la planta Argemone gracilenta, conocida como Cardo o chicalote nativa de la región, en busca de fuentes naturales que logren minimizar o curar el cáncer.
Entramos en una nueva fase para tratar de modificar esos compuestos aislados, de tal manera que le podamos dar una propiedad mejor a la que normalmente tiene el compuesto de la planta y que podamos aumentar esa actividad para probarla con una diversidad más grande de líneas celulares de cáncer.
Asimismo, Juan Carlos Gálvez Ruiz, investigador del Departamento de Ciencias Químico Biológicas, aseguró que no cortan la planta de raíz a fin de preservarla y utilizan diferentes partes para extraer compuestos activos.
Resaltó la necesidad de tener al consumir esta planta a manera de infusiones o té, porque en el estudio han aislado compuestos benéficos para la actividad anticancerígena, pero que eso no significa que no sea tóxica.
El Semanario sin Límites, información de medios
