Los gastos y las preocupaciones suelen elevar el nivel de estrés. Estas son algunas recomendaciones para enfrentar el estrés de fin de año.

De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cerca de 2.3 millones de personas mueren por accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo y la Organización Mundial de la Salud destacó a México como el principal país con mayor nivel de estrés laboral, por encima de China y Estados Unidos.

Estas cifras son realmente alarmantes para un país en el que pocas son las opciones de atención emocional y mental que permitan contrarrestar los efectos del estrés laboral en la salud y vida cotidiana.

Desde padecimientos gastrointestinales, dolores musculares, ansiedad, insomnio y otros trastornos, son los que se presentan cuando una persona sufre de altos niveles de estrés causados por actividades o presiones laborales.

Y a este nivel de estrés “cotidiano” se le aumenta el causado por el cierre del año, las complicaciones para la salud emocional, mental y física pueden ser graves.

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La responsabilidad de manejar los niveles de estrés por lo general suele recaer en el trabajador, por eso tenemos estas recomendaciones que permitirán controlar el estrés de fin de año.

Determinar prioridades

Con las revisiones de fin de año y las fechas límite encima, el estrés por terminar esos informes de último minuto está a tope, pero no todo se podrá hacer de esa manera. Revisa tu lista de tareas pendientes y pregúntate: “¿Es una prioridad de alto nivel que afectará mi buena reputación en la oficina o puede esperar?”. Pon un plazo más razonable a lo que no urge y despeja tu mente para resolver las prioridades.

Delegar responsabilidades

Alivia el estrés pidiendo el apoyo de otros. Si te toca llevar galletas a la oficina, contrata a un repostero que esté emprendiendo su negocio, la ayuda será mutua. Pide a tu familia que te ayude a envolver los regalos para la casa y la oficina, incluso puede ser divertido si le quitas la dosis de estrés. Enfrenta la carga de trabajo apoyándote en tu equipo de trabajo, a veces la ansiedad viene de querer hacer todo tú mismo

Dedica tiempo a la respiración

Hazlo como un ritual diario para eliminar el estrés. Esta es una forma barata y fácil de fomentar una sensación de calma durante tu jornada laboral. Tómate un descanso dos veces al día para respirar (puede ser en la mañana y al final de la tarde). Toma tres respiraciones profundas; inhala y cuenta hasta tres; mantente así por un momento y exhala contando hasta tres. Haz una segunda ronda y, en la tercera, duplica la duración de la exhalación. Pruébalo, seguro harás mejor tu siguiente actividad.

Tener pensamientos positivos

¿Tienes un colega de mal carácter o es difícil trabajar con él o ella? Cambia tu mentalidad de negativa a positiva, al “sonreír” ante esa situación, tu mente se abrirá para replantear los pensamientos que te hacen sentir mal o atrapado. No te concentres en las fallas de los demás, en su lugar, trata de aprender nuevas formas de trabajar con ese tipo de personas. Ese enfoque te dará mayor satisfacción porque aprenderás a persistir a los contratiempos y te darás cuenta de que tu esfuerzo te lleva al éxito.

Agradecer

El final del año siempre es un buen momento para reflexionar, tómate un tiempo para recordar los mejores momentos en el trabajo. ¿Qué proyectos te hicieron crecer?, ¿cuántos colegas mejoraron tu experiencia laboral e incluso personal? Si no disfrutas tu trabajo, escribe una lista de los puntos positivos asociados con tu posición, eso te ayudará a mejorar tus habilidades de gratitud y pensamiento positivo, lo que también reducirá tu estrés.

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