El Tren México-Toluca, el Paso Exprés en Cuernavaca y el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), todas presentan los mismo problemas: son megas obras de infraestructura con sobre costos y falta de claridad en las licitaciones.
Ciudad de México.- Un estudio denominado ¡Ojos a la Obra!, realizado por México Evalúa, confirma el lamentable refrán que asegura que las cosas en el país se “hacen al ahí se va”, sin planes definidos, sin estudios previos ni plazos de tiempo; así como tampoco una plena transparencia en los procesos de licitación.
Mariana Campos, coordinadora de este proyecto, aseguró que “el estudio evidencia fallas sistemáticas en la preparación de los proyectos de infraestructura”, pero el problema se multiplica cuando son obras de estas dimensiones.
“Los procesos de construcción inician sin contar con un diseño del proyecto suficientemente desarrollado, e incluso hay casos en los que ni siquiera está contratada la supervisión. Esto deriva en que las obras sean ineficientes, lo que llega a comprometer su efectividad”, dice Campos, además de que elevan sus precios de manera alarmante.
Y agrega: “Así fue necesario realizar retrabajos para la barda perimetral del NAIM, cambios de trazo del Tren Toluca y la definición del diseño del proyecto a la par de los trabajos en el Paso Exprés”.
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El NAIM y sus prisas
En el caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de México y que el nuevo gobierno a puesto en duda su viabilidad, México Evalúa señala que ya ha generado sobrecostos promedio de 70 por cierto, “al no existir topes presupuestales en su financiamiento”.
Además, en cuanto a las licitaciones solo el “27 por ciento de concursos o licitaciones se adjudicó el contrato con suficiente rivalidad”, lo que implica que en todas las demás, no se evaluaron “completamente más de cinco proposiciones solventes”.
Y peor aún, “en algunos casos se observó que sólo fue evaluada completamente una oferta, derivando en una contratación que, en la práctica, no es distinta de la adjudicación directa”, dice México Evalúa.
En temas de sobre costos, pone el ejemplo de la barda perimetral del NAIM; que tuvo un precio mayor en 89 por ciento al presupuesto original, al pasar de mil 547 a 2 mil 930 millones de pesos y en lugar de construirse en los 563 días planeados, estuvo lista en 863 días, un desfase de 53 por ciento.
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El Tren México-Toluca y el Paso Exprés
Estas obras también estaban planeadas para ser las insignias en infraestructura de esta administración, sobre todo el Tren México-Toluca, que junto con el de Querétaro que finalmente se suspendió, iban a ser la muestra de modernidad que el país necesita en materia de movilidad.
Sin embargo, el proyecto del tren mostró muchas fallas desde un principio, con un trazo que se ha tenido que ir modificando sobre la marcha, sin llegar a acuerdos con los pobladores de las zonas afectadas y como siempre, esto originó retrasos de tiempo y costos que muchos más elevados a los presupuestos iniciales.
Así, el incremento de costo se calcula en 77 por ciento al pasar de 33 mil 741 a 59 mil 217 millones de pesos.
Pero además, en cuanto a la trasparencia de las licitaciones, el estudio de México Evalúa señala que “desde un inicio se registró una baja afluencia de proposiciones, un promedio de seis participantes por licitación, y en siete concursos sólo asistieron menos de cuatro oferentes”.
Para el caso del Paso Exprés en Cuernavaca, la única de estas obras que ya fue terminada pero que luego fue motivo de escándalo porque se formó un socavón que provocó la muerte de dos personas, tiene las mismas características en materia administrativa.
“En el Paso Exprés, la situación fue peor; la descalificación de licitantes alcanzó el 91 por ciento, lo que implicó elegir al contratista del principal contrato entre 2 de las 23 propuestas iniciales”, señala el análisis.
Estos casos pueden ser significativos de la forma en que se designan las obras públicas, ya que el documento revela que en ninguno de estos proyectos, se “publicó información de los estudios de mercado, las proposiciones (ofertas), las subcontrataciones, los pagos, los informes de supervisión y auditoría interna, siendo información vital para la rendición de cuentas y que debe publicarse de acuerdo con los estándares internacionales”.