Medidas sanitarias para reanudar industria de la construcción, automotriz y minera
Las autoridades mexicanas presentaron un protocolo de seguridad sanitaria para permitir la reanudación de la industria de la construcción, automotriz y minera
Las medidas sanitarias para reanudar la industria de la construcción, la automotriz y la minera, así como fábricas de equipos de transporte, fueron reveladas por la Secretaría de Salud, protocolos con que empresas deberán cumplir para poder reactivar sus actividades productivas tras la contingencia del coronavirus covid-19.
La premura por reanudar actividades productivas en estas industrias claves para la economía se programan para el 1 de junio; sin embargo, no podrán realizarse sin antes realizar las adecuaciones pertinentes que garantices la seguridad sanitaria de sus trabajadores.
En el acuerdo modificatorio, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el viernes 15 de mayo se establece que estos negocios podrán comenzar sus preparativos a partir de junio y compromete a las empresas a presentar una propuesta de protocolos de seguridad sanitaria que sigan los lineamientos establecidos por las secretarías de Salud, Economía y del Trabajo y Previsión Social.
“La presentación, aplicación y aprobación de los protocolos, a los que se refiere la fracción anterior podrá darse al mismo tiempo que se lleven a cabo las medidas de preparación para la entrada en operación de las empresas”, aclaró el documento.
Los negocios tendrán hasta el 1 de junio para el establecimiento de las medidas de seguridad sanitaria. La Secretaría de Salud enfatizó que las empresas en cuestión podrán reanudar sus actividades solo si el proceso se completa y aprueba antes de esa fecha.
El miércoles 13 de mayo, Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, enfatizó que dichas acciones podrían afectar, por ejemplo, el número de empleados que pueden estar al mismo tiempo en una planta.
El aforo de empleados podría verse reducido en 75, 50 o 30 por ciento, de acuerdo con el estado de la pandemia del nuevo coronavirus en cada región del país.
Si bien la dependencia mencionó que este es un “acuerdo de buena voluntad”, también subrayó que se reserva el derecho de clausurar las empresas o industrias si estas no cumplen con los protocolos y ponen “en riesgo la salud de los trabajadores”.
Estas acciones forman parte de la segunda etapa que el Gobierno contempla para la reapertura de actividades por la pandemia del COVID-19.