A pesar de que es considerado como un gran triunfo para el comercio de la región, los temas pendientes que deja la firma del T-MEC como los aranceles al acero y al aluminio, le quitan brillo a la tan esperada firma que por fin se realizó.
Ciudad de México.- En el marco de la cumbre del G20 en Buenos Aires, Argentina, Enrique Peña Nieto, Donald Trump y Justin Trudeau, firmaron el documento con el cual se sustituye al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Luego de un año y medio de tensas negociaciones, el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) pasará a la ratificación de los Congresos de los tres países, pero hay algunos temas que siguen pendientes y que para muchos, contradicen el espíritu de este nuevo acuerdo.
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Los aranceles al acero y aluminio
El tema más polémico sin duda es la permanencia de los aranceles al acero y al aluminio que impuso Estados Unidos y en donde México y Canadá, aún siendo sus socios comerciales, no han logrado que se les exente de estos gravámenes.
Esto a pesar de que “Trump se comprometió a quitar los aranceles al acero y el aluminio sólo si se cerraban las negociaciones del T-MEC, lo cual hasta ahora todavía no cumple”, tal como lo señala El Economista.
Para Moisés Kalach, líder del Cuarto de Junto en las negociaciones del T-MEC por parte del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el hecho de que persistan estos aranceles rompe con la armonía que significa este nuevo tratado.
Los aranceles son algo “inverosímil”, dice el líder empresarial y considera que esto “no hace sentido con la política de libre mercado y menos con tus socios comerciales”.
En esto coincide Luis de la Calle, director de la Consultora De la Calle, Madrazo, Mancera, quien considera que México y Canadá deben seguir presionando para que se eliminen estos aranceles, ya que de otra forma, Estados Unidos tendrá una ventaja adicional.
Por lo que advierte que “deben permanecer firmes en sus represalias y en el litigio en el ámbito internacional para que no se recurra a este tipo de medidas”.
Y agregó: “La principal amenaza al sistema multilateral de comercio es la aplicación de aranceles de una manera unilateral e injustificada por parte de Estados Unidos”.
La reforma laboral en México
Otro aspecto que aún está pendiente a pesar de que ya se firmó el T-MEC, son las modificaciones legales al entorno laboral en México, ya que nuestro país se comprometió a apegarse a las normas internacionales de la Organización del Trabajo (OIT).
Entre otras cosas, se deben establecer las bases legales para eliminar los contratos colectivos vía sindicatos, así como el trabajo forzado y el infantil; sin embargo, estos temas siguen pendientes y de acuerdo a Jesús Seade, representante del nuevo gobierno en las negociaciones del T-MEC, estarán listos en próximos meses.
“El primer paquete de reformas es para fin de año, ése es el compromiso que fue tomado”, refirió Seade, pero desde la perspectiva de los demócratas en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, donde a partir de enero tendrán mayoría, si estos cambios no suceden sería el principal motivo para no ratificar el T-MEC.
Pero de acuerdo al representante comercial de AMLO, “las eventuales reformas laborales son cambios que México quiere realizar y que nadie nos está imponiendo”, lo que implica que es factible que los legisladores aprueben estos cambios dentro de las fechas establecidas.
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Los derechos de autor
Otro de los temas que se modificaron para el T-MEC, fueron los derechos de autor y la propiedad intelectual, en donde se hacen más estrictas las regulaciones pero hay una enorme preocupación con respecto a sus aplicaciones, ya que para muchos esto podría ser un incentivo para la censura en Internet y México no está preparado para enfrentar esto.
En el Capítulo 20 se obliga a México a instaurar un mecanismo de la legislación estadounidense denominado “notificación y remoción”, a través del cual los proveedores de servicio de Internet se verán obligados a “remover contenidos de manera expedita cuando un usuario que se asuma como propietario de una obra denuncie el material”.
Para Luis Fernando García, director de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), esto incentiva a que cualquier persona, sin necesidad de que se acredite como propietaria legal del contiendo, “pueda solicitar se remueva y de esta forma se utilice esta metodología para otros fines” lo que “puede generar censura en Internet”.
