Ya está firmado pero aún falta el paso más importante y por eso en el caso del T-MEC, México quiere estar seguro que EU y Canadá lo ratificarán y cuando haya señales precisas de eso, ser el primer país en que el Congreso lo apruebe y dejar todo listo.
Ciudad de México.- En el ambiente se perciben ciertas dudas e incertidumbre con respecto al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que si bien se dio el primer paso cuando los presidentes de los tres países lo firmaron, el proceso de ratificación por los congresos locales aún sigue estancado y sin este proceso, el acuerdo no entrará en vigor.
Por tal motivo, la secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín, advirtiendo que se pueden avecinar complicaciones por la postura que han asumido los demócratas en los Estados Unidos, por lo que instó a los senadores a estar listos para ratificar el T-MEC, pero hasta estar seguros que los otros dos socios también lo harán.
De esta manera, la funcionaria aseguró que el gobierno federal buscará que “México sea el primero en ratificar el nuevo tratado”, sin embargo esto no podrá ser hasta que se tenga la certeza Estados Unidos y Canadá lo aprobarán.
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Los demócratas son la principal amenaza
Con la nueva realidad del Congreso de los Estados Unidos, en donde los demócratas tiene mayoría en la cámara baja y también una abierta confrontación con Donald Trump, está situación ha modificado el panorama para el T-MEC y el gobierno de México lo sabe.
“Como ustedes saben, ha cambiado la composición política en el Congreso estadounidense y la llegada de los demócratas ha hecho que la mirada hacia el capítulo laboral y las reformas laborales en México, tengan mayor importancia”, señaló Márquez Colín.
Esto implica exigencias que tiene que cumplir México en materia legislativa y ambiental para modificar leyes y cambiar algunas condiciones actuales que preocupan a los legisladores estadounidenses, ya que consideran que de no modificarse, nuestro país tendrá beneficios extras sobre el mercado de los Estados Unidos.
“De ahí que nosotros lo que estamos planteando a ustedes, senadores y senadoras, es que sigamos de cerca la ratificación, tanto en Estados Unidos como en Canadá, que México sea el primer país que ratifique el Tratado, pero muy cerca, cuando estemos seguros, que los otros países lo van a ratificar”, dijo la secretaria de Economía.
Diversificar mercados
Sin embargo, Márquez Colín también está consciente de la importancia que tiene el hecho de abrir nuevos puentes comerciales con otros países y diversificar los mercados, ya que la realidad es que “más allá del flujo de mercancías y servicios, representan inversiones a largo plazo”, aseguró en declaraciones que retoma Dinero en Imagen.
En ese sentido, destacó los tratados más recientes que son muy importantes para el país, como el TPP 11 y el de libre comercio con la Unión Europea, lo que permitirá tener opciones en otras regiones del mundo para exportar productos nacionales a gran escala.
Sin embargo, la tendencia mundial apunta a que cada vez se ven más con fuerza un “viraje al proteccionismo en Estados Unidos, Europa y América del Norte”, por lo que consolidar “nuevos métodos de comercio internacional” es muy importante para el país y para “ampliar su presencia comercial en el mundo”.
Con esta paradoja donde todos hablan de libre mercado pero algunos imponen aranceles incluso a sus socios más importantes, se están generando nuevas condiciones a nivel mundial, lo que implica que México debe estar preparado para esto, sobre todo cuando en Estados Unidos los mensajes siguen siendo confusos hacia la apertura comercial.
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Trump también pide la ratificación del T-MEC
Por su parte, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, también pidió al Congreso de su país que ratifiquen el T-MEC para acabar con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que lo sigue considerando como “un error comercial histórico”.
Por tal motivo, Trump pidió a los legisladores aprobar el T-MEC “para que podamos traer empleos de manufactura, para que podamos expandir la agricultura; proteger la propiedad intelectual y garantizar que más autos tengan orgullosamente esas cuatro hermosas palabras: Hecho en Estados Unidos”.
Pero fiel a su estilo belicoso, también lo ve como una manera de protección interna, ya que su otro argumento fue que con la “aprobación de una legislación comercial recíproca”, se puedan defender “si otro país nos pone un arancel justo en un producto estadounidense, podamos hacer lo mismo, con el mismo arancel al mismo producto que ellos nos venden a nosotros”.
De esta manera y con el entorno que presenta ciertas dificultades que hasta el momento no se pueden dimensionar, en el caso del T-MEC, México quiere estar seguro de que EU y Canadá lo ratificarán y dar ese gran paso hacia suelo firme en materia comercial y dejar de lado la incertidumbre que parece que acompaña a Trump en todo lo que hace.
