Las cosas no están claras y la incertidumbre ronda el ambiente comercial de México, Estados Unidos y Canadá, pero lo cierto es que como nunca antes, la posibilidad de que concluya el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) es muy alta, por lo que algunos especialistas han tratado de pronosticar los costos y beneficios que traería un posible fin del TLCAN en la región.
Ciudad de México.- Si bien es cierto que la mayor preocupación deriva del impacto que tendría en México el fin de este acuerdo comercial que por 23 años ha regido los negocios de la región de Norteamérica, Estados Unidos y Canadá no saldrían ilesos de esto, por lo que también sufrirían pérdidas de empleos, mayores costos por productos básicos y reducción de ingresos por exportaciones.
De acuerdo a un estudio realizado por el C.D. Howe Institute, con sede en Toronto, Canadá, el costo a nivel económico sería alta para los tres países, ya que este bloque trilateral perdería un total de 220 mil empleos; el intercambio comercial se reduciría en 120 mil millones de dólares y el PIB regional sería 0.225 por ciento menor.
Dan Ciuriak, autor de este estudio, resaltó sin embargo la importancia de acuerdos bilaterales ya que esto podría mitigar los efectos negativos y si “Canadá mantuviera un libre comercio con México, se evitaría la pérdida de entre 4 mil y 8 mil empleos”.
Pero a pesar de estas predicciones que hace el Howe Institute y que retoma El Economista, Canadá no ha dado señales sólidas de intentar negociar con México de manera separada algún tipo de acuerdo y se ha mantenido incluso
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Las oportunidades que se le presentan a México
En este sentido, las circunstancias adversas que se pueden presentar con el fin del TLCAN, también pueden ser nuevas ventanas de oportunidades para ciertos sectores nacionales, que pueden salir de cierta manera beneficiados si aplican estrategias correctas.
“México no podría evitar impactos negativos significativos”, sobre todo en gran parte del sector industrial -dice el estudio-, pero podría ser “compensado en cierta medida por su sector agrícola que reclama participación en el mercado interno”.
Y una de las industrias nacionales que podrían verse favorecidas es la de producción de lácteos, ya que según Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería, se podría aumentar la derrama económica nacional y generar más empleos sin tener que depender de las exportaciones a Estados Unidos, principalmente.
Según cifras de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche, este sector representa 11% del Producto Interno Bruto (PIB) de la industria alimentaria, con un total de 704 mil millones de pesos, pero si se fortaleciera el mercado interno, “se tendría una derrama en su economía de 60 mil millones de pesos todos los años y tendría 150 mil empleos adicionales”, agregó Gómez Lobo.
Con esto, ciertas industrias podrían aprovechar esta coyuntura para ser parte fundamental en el desarrollo del país y propiciar las condiciones internas adecuadas para generar empleos y recursos de manera directa en diversas regiones del territorio nacional.
