A pesar de que tal vez los bolsillos de los mexicanos aún no perciben un beneficio real con respecto al desempeño que ha tenido la economía nacional, los expertos aseguran que ésta ha mostrado una fortaleza inesperada y como ejemplo de ello es el crecimiento alcanzado en el primer semestre de este año, por lo que las proyecciones futuras son muy buenas.
Ciudad de México.- Luego de un inicio de año lleno de incertidumbre y preocupaciones, el 2017 se ha convertido en un año que ha sorprendido a propios y extraños por el comportamiento que ha tenido la economía, con un crecimiento constante y mostrando una fortaleza inesperada que ni los expertos podrían haber pronosticado en enero pasado.
Para el segundo trimestre, los datos preliminares pronostican un crecimiento económico de entre 2.4 y 3.0 por ciento, y a pesar de que estos números son todavía menores a las capacidades y necesidades que tiene el país, da pie a que los próximos seis meses sean mejores de lo esperado.
Cifras del banco de inversión Merrill Lynch, aseguran que la economía de México durante 2017 crecerá 2.1 por ciento, desde el 1.8 por ciento estipulado anteriormente.
Esto ha generado beneficios para las personas, que si bien siguen sufriendo el alza de la inflación y sus repercusiones en los precios de los productos de la canasta básica, los niveles de desempleo han disminuido y con ello la informalidad.
Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) la tasa de ocupación en el sector informal representó el 27 por ciento de la población ocupada, luego que en el primer semestre del año se han creado 517 mil 434 nuevos empleos.
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Beneficios para los consumidores
Para la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), estos números son muy positivos y según su perspectiva, esto se debe a que “el motor exportador volvió a encenderse y la generación de puestos de trabajo avanza en forma dinámica, también ha mejorado la percepción de consumidores y empresarios y se mantiene el control sobre las finanzas públicas”.
Sin embargo, estos números no serán trascendentales para la sociedad hasta que no sea perceptible una mejora real en los precios al consumidor, por lo que la cámara de industriales considera que se debe fortalecer el mercado interno, ya que es “un motor indispensable para el crecimiento de la economía”.
Así, según declaraciones que retoma Notimex, la Concamin considera que hay un factor de riesgo y es que “la inversión productiva mantiene números negativos, por lo que debemos ser cuidadosos en la conducción de la política económica, sin triunfalismos” ni exceso de confianza.
Con esto, esperan que la inflación en el corto plazo comenzará a desacelerarse y junto a la estabilización del precio de los combustibles y del peso en el mercado cambiario internacional, generen un impacto directo en los precios al consumidor y se refleje esta fortaleza macroeconómica en beneficio de la sociedad y de sus bolsillos, para recuperar un poco del poder adquisitivo perdido.
