Sociedad, Gobierno e industria; se unen para hacer frente a la catástrofe del sismo en México. El uso de la tecnología ha hecho la diferencia a lo vivido en 1985 para atender emergencias.
Ciudad de México.- Eran las 1:12pm del 19 de septiembre y Andrea daba un sorbo a su taza de café en el 7o piso, retomando de lleno sus actividades después de que por protocolo de seguridad, el cuerpo de Protección Civil de su empresa les había ordenado evacuar el edificio como parte del simulacro nacional que se realizó en conmemoración al 32 aniversario del terremoto de 1985.
Dos minutos después, al dejar la taza sobre su escritorio, observó que se movía levemente y después con más fuerza. “Esto ya no es un simulacro, es real, ¡Esta temblando!”, escuchó a su compañero de alado gritar. Rápidamente se levantó de su asiento y corrió a las rutas de evacuación, pero el tiempo fue insuficiente para salir del inmueble.
El edificio ubicado en la colonia Hipódromo Condesa de la Ciudad de México se movió con fuerza y las paredes crujían, los vidrios retumbaban y las lámparas encendidas en la ruta de evacuación parecía que iban a explotar. Afortunadamente, la tierra dejó de temblar. “¿Todos están bien?”, preguntó el jefe de área, pero Andrea sólo tenía algo en la cabeza, “Mi familia, ¿Cómo estarán?”.
Lo único que Andrea tomó de su escritorio fue su teléfono celular. Y aún en las escaleras de evacuación intentó escribir con dedos temblorosos un mensaje a su marido, a su hijo de preparatoria y a su hija de secundaria.
El alma le regresó al cuerpo cuando su hija respondió el mensaje “Estoy bien mamá, ¿Tú como estas?”, el esposo también se reportó a salvo, pero el que no respondía ni los mensajes ni las llamadas era su hijo, que había ido al cine con sus amigos después de la escuela en una plaza comercial cerca de casa al sur de la ciudad.
Horas de angustia vivió la familia de Andrea cuando supieron que la plaza dónde su hijo se encontraba había sufrido graves afectaciones por el sismo y edificios se habían desplomado en las cercanías a su hogar.
Fue alrededor de las 3pm que se pudieron comunicar con su hijo. El joven había sido testigo de las escenas más devastadas de la ciudad y buscaba ayudar. El padre llegó por su hija a la escuela abriéndose paso con el Wase y todos se lograron reunir en casa al filo de las 6pm. El resto de la familia, amigos y conocidos; la mayoría estaban bien, lo supieron a través del Safety Check habilitado en Facebook y los mensajes en otras redes sociales.
En todo esto, el papel de la Coordinación de Estrategia Digital Nacional fue fundamental para hacer frente a la emergencia activada a la 1:14pm del 19 de septiembre. La integración de la tecnología, permitió realizar acciones inmediatas por parte de todos los sectores de la sociedad y ayudar a los habitantes de las zonas afectadas por el sismo de magnitud 7.1 a enfrentar los momentos de crisis.
La catástrofe del sismo 19-S colapsó más de 40 edificios en la Ciudad de México y dejó daños en más de 3 mil inmuebles, dejando a miles de personas sin hogar, que fueron ubicados en albergues.
Con la Coordinación de Estrategia Digital Nacional, que, bajo la dirección de Alejandra Lagunes, que tiene como objetivo la “adopción y el desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación” en México, se habilitó un mapeo colaborativo de datos sobre el sismo, en donde los ciudadanos pudieron registrar inmuebles afectados por el movimiento telúrico y que hasta el momento suma más de 11, 700 registros de datos de colapsos, reportes al 911, albergues, centros de acopio y daños.
La labor de la industria digital también fue indispensable para agilizar el servicio de ayuda y atender emergencias. El Mapa de Crisis de Google comoayudar.mx, aplicaciones desarrolladas firmas líderes como Facebook y Wase, también han representado una herramienta fundamental para el Gobierno Federal.
Gracias a la coordinación de la industria, Google activó el Localizador de Personas, con 25,700 registros, las Alertas SOS y el Mapa de Crisis. Waze colaboró abriendo sus datos de tráfico y reportes de emergencias. Facebook activó la función Safety Check, y en conjunto con Yalo se programó el primer chatbot de gob.mx para resolución de dudas. Con la donación de infraestructura de la compañía cartográfica Carto, se desarrollaron mapas de resiliencia para diversas instituciones de gobierno. Finalmente con Twitter, se logró amplificar los esfuerzos realizados por sociedad civil, industria y gobierno para conocimiento de la población.
“Ante la emergencia, estas acciones demuestran el poder de la ciudadanía, y de la colaboración entre todos los sectores de la sociedad, para utilizar la tecnología digital y los datos confiables, oportunos y ciudadanos para el bienestar de todos.”
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