Retos de la Tecnología para el Tercer Sector

Lectura: 2 minutos

La revolución tecnológica actual está provocando varios cambios.  El primero en sentirse es el económico, ya que algunos mercados, los más eficientes, procesan rápidamente los acontecimientos. A continuación vienen los sociales, los que tienen que ver con instituciones y sistemas de gobierno que tardan muchos años en reconocer y adaptarse a la nueva realidad.

 

El hilo conductor de la revolución tecnológica es la redistribución de poder entre los actores.  Este nuevo equilibrio de fuerzas transforma las instituciones y los sistemas de gobierno, ya que lo que comúnmente se conoce como  la fuerza del pueblo hoy  se está constituyendo como una colectividad que opera de manera directa.

 

En Estados Unidos y otros países, en el contexto de la competencia electoral por puestos de representación se entiende a Internet y sus aplicaciones como herramientas fundamentales para lograr un triunfo en las urnas. Sin duda el ascenso a la presidencia de  los Estados Unidos del organizador social  que es Barack Obama no se explica cabalmente sin el poder social que es posible gestionar mediante Internet. Curiosamente, mucho se habló de Facebook como agente principal de este cambio, pero la realidad es que la red social por excelencia no se encontraba todavía en su máximo apogeo. Tampoco fue un algoritmo mágico y de patente especial que haya conseguido el deseado efecto de comunicación y acción. La herramienta utilizada fue el correo electrónico. Los asesores del entonces candidato presidencial sabían que el éxito radicaba en dirigir y encauzar la comunicación para articular el poder de la sociedad. Para ello no se podían repetir las fórmulas conocidas de los medios tradicionales, de modo que, por primera vez, se trató de conectar. ¡Sí, conectar! Conectar con un lenguaje directo y personal, privilegiando la conversación sobre el mensaje sórdido masivo. Fue así como un medio, Internet, se utilizó como la gran herramienta para comunicar y convocar el voto y la acción a favor de una causa, a favor de un candidato.

 

Si es cierto que Internet y sus tecnologías ha sido aprovechado por aquellos que buscan ocupar puestos de representación popular, lo es también el hecho de que estas herramientas deben ser manejadas por el llamado tercer sector, ya que a través de las organizaciones no gubernamentales (ONG) el juego democrático se enriquece, se generan equilibrios y contrapesos al poder político y se contribuye a mantener una voz ciudadana en los asuntos de interés público.

 

En México, el tercer sector está llamado a cumplir un papel fundamental. Es necesaria la participación ciudadana para que el interés de estado ya no sea monopolio del gobierno o de un grupo de interés determinado.

 

Más que nunca, las ONG necesitan adquirir habilidades e influencia en el nuevo terreno de la comunicación. Tienen que ser innovadoras, mostrar arrojo para hacer oír sus causas y sobre todo ser auténticas y directas para sumar voluntades.

 

Además, el reto es doble,  ya que para tener éxito deberán asumir un compromiso con la transparencia y el rendimiento de cuentas. Toda organización debe operar bajo el entendido de que en esta nueva era, en la que es posible llegar a una gran cantidad de personas utilizando para ello un simple dispositivo de cómputo, no se sostienen engaños ni simulaciones.

 

 

0 0 votos
Calificación del artículo
Subscribir
Notificar a
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
0
Danos tu opinión.x