Carles Puigdemont aclaró que la razón de haberse trasladado a Bélgica fue para seguir trabajando con unas “garantías que no se dan en España”.
El presidente depuesto de Cataluña, Carles Puigdemont, advirtió este lunes que no pedirá asilo político en Bélgica y, por el contrario, se mostró a favor de “ralentizar” el proceso de independencia en la región autónoma para evitar así la violencia.
“No estoy aquí para pedir asilo político. Estoy aquí en Bruselas como la capital de Europa. Estoy aquí con el fin de actuar con libertad y seguridad”, precisó Puigdemont en una rueda de prensa ofrecida en cuatro idiomas (catalán, francés, inglés y español).
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Puigdemont aclaró que la razón de haberse trasladado a Bélgica fue para seguir trabajando con unas “garantías que no se dan en España”, por lo que ha calificado como una “ofensiva altamente agresiva de parte del gobierno español.
“Hemos venido a Bruselas para poner el problema catalán en el corazón de Europa y denunciar la ausencia de imparcialidad de la justicia española y el déficit democrático del Estado español”, detalló el funcionario en una rueda de prensa a la que asistieron más de 200 periodistas internacionales.
El mandatario catalán dijo también que acatará la petición del gobierno central para llevar a cabo elecciones adelantadas en Cataluña el próximo 21 de diciembre, pero pidió a Mariano Rajoy aceptar el resultado del proceso electoral anticipado.
Puigdemont aseguró que su gobierno ofreció entablar el diálogo al gobierno español, oferta que no ha sido escuchada y aprovechó para criticar la aplicación del artículo 155 Constitucional, que permite medidas extraordinarias para recuperar la legalidad en Cataluña.
“Estamos apoyando las diferentes iniciativas que se estaban y están poniendo en marcha para evitar que la aplicación del artículo 155 se lleve a la práctica y acabe desmontando el sistema institucional catalán”, aseguró el funcionario catalán.
“En esta línea apoyamos a los sindicatos, a las entidades, a los cargos directivos del gobierno que se han quedado en sus puestos de trabajo y les pedimos que hagan todo lo posible para evitar la demolición del sistema institucional catalán”, señaló.
