Davos 2020

¿Hacia un nuevo tipo de capitalismo?

Lectura: 4 minutos

Recientemente concluyó la 50 edición del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. Esta reunión estuvo marcada por diversos temas, entre los fundamentales, la crisis ambiental global, la desigualdad a nivel mundial, los retos de la Cuarta Revolución Tecnológica Industrial, las preocupaciones por la desaceleración económica y por una posible nueva crisis financiera mundial.

Klaus Schwab, co-fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial plantea: ¿Qué tipo de capitalismo queremos?, para él, existen tres modelos: el primero es el capitalismo de accionistas, que considera que el principal objetivo de las empresas es la obtención de beneficios y que ha sido el modelo predominante en casi todas las sociedades occidentales; el segundo es el “capitalismo de Estado”, para el cual el Estado debe marcar la dirección de la economía y ha tomado una gran importancia en China y en otras economías emergentes. El tercer esquema es el del “capitalismo de las partes interesadas”, (stakeholder capitalism), que para Schwab es la respuesta más acertada a los desafíos sociales y ambientales de nuestros días.

Klaus Schwab
Klaus Schwab, co-fundador y presidente ejecutivo del WEF (Fotografía: El Semanal).

El capitalismo de accionistas, sostiene Schwab, ha sido el modelo predominante en la historia económica reciente. Es el esquema prevaleciente en Estados Unidos, desde la década de 1970. En su momento de máximo esplendor, cientos de millones de personas de varios países del mundo prosperaban en tanto que las empresas orientadas a la obtención de beneficios abrían nuevos mercados y creaban nuevos empleos. Pero el capitalismo de accionistas omitió su responsabilidad social. Esto sumado a las presiones ejercidas por el sector financiero para obtener resultados de corto plazo, provocó que este capitalismo de accionistas estuviera cada vez más desconectado de la economía real. Añade Schwab que este tipo de capitalismo ya no es sostenible. Primero por el profundo daño ambiental que provoca. El esquema es agresivamente destructor de la naturaleza. Para Schwab el stakeholder capitalism comienza a imponerse. Cada vez son más los inversionistas y los ejecutivos que empiezan a comprender que su éxito a largo plazo depende del éxito de sus clientes, empleados y proveedores, así como de su contribución a la comunidad. Éste, dice Schwab, ha sido uno de los propósitos del Foro Económico Mundial, desde su creación.

La Business Roundtable de Estados Unidos, el grupo de presión más influyente de ese país, se muestra a favor del “capitalismo de las partes interesadas”. De igual forma la inversión de impacto está adquiriendo cada vez más importancia. Permite a los inversionistas buscar beneficios ambientales y sociales, además de financieros. Schwab plantea un nuevo manifiesto de Davos para que las empresas paguen un porcentaje equitativo de impuestos; tolerancia cero frente a la corrupción y respetar los derechos humanos en sus cadenas de suministro mundiales, así como respetar la competencia en igualdad de condiciones. Por último, señala Schwab, la empresa debe ser parte activa para mejorar la situación del mundo.

Finalmente, el capitalismo de Estado debería evolucionar, sostiene Schwab, hacia el capitalismo de las partes interesadas con el propósito de garantizar que no se corrompa. El capitalismo de las partes interesadas debe ayudar al cumplimiento de objetivos sociales más amplios como el Acuerdo de París de 2015 y los Objetivos del Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030.

Elizabeth Warren y Joseph Stiglitz
Izquierda: Elizabeth Warren, precandidata presidencial demócrata en Estados Unidos; derecha: Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía y miembro del Club de Roma.

Además del planteamiento de Klaus Schwab de impulsar el “capitalismo de las partes interesadas”, hay otras propuestas más radicales como la del economista Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía y miembro del Club de Roma, de un “capitalismo progresista” o la de la senadora Elizabeth Warren, precandidata presidencial demócrata, en Estados Unidos, de un “capitalismo responsable”.

Sin embargo, estas propuestas tienen también numerosas críticas que sostienen que el afán de lucro siempre ganará si no se legisla para garantizar que las empresas cumplan sus compromisos y asuman responsabilidades específicas.

Al mismo tiempo que se da esta discusión, Oxfam publica su Informe Anual sobre la desigualdad mundial. Según Oxfam, los 2,153 multimillonarios más ricos del mundo tienen ahora más riqueza que los 4,600 millones de personas que representan el 60% de la población mundial. Además, los 22 hombres más ricos del mundo tienen ahora más riqueza que todas las mujeres de África.

Asimismo, las temperaturas medias mundiales alcanzaron niveles récord en 2019. Las sequías e incendios forestales afectaron a numerosos países, en tanto que las inundaciones devastaron a otros, haciendo desaparecer ciudades enteras.

De esta manera, en tanto que el capitalismo de accionistas y la especulación financiera siguen en auge la economista principal del Fondo Monetario Internacional, Gita Gopinath, plantea una reducción de sus previsiones de crecimiento para 2020 y 2021 en relación con la estimación anterior de octubre pasado y la jefa del FMI, Kristalina Georgieva, advierte que la economía mundial corre el riesgo de vivir otra Gran Depresión como la de los años treinta. De igual forma, se alerta sobre el riesgo del aumento de la desigualdad y la creciente incertidumbre causada por la emergencia climática y las guerras comerciales.

capital y recesion
Imagen: El País.

¿Qué significa Davos?; ¿Es un lugar para debatir y encontrar soluciones globales o se trata simplemente de discutir para simular y seguir haciendo las cosas como siempre? ¿El capitalismo de las partes interesadas significa un compromiso corporativo real o es sólo un recurso de mercadotecnia para ser “políticamente correctos”?

En todo caso, Davos es un claro ejemplo de que el mundo está cambiando y que la problemática global exige nuevas soluciones si queremos detener el gradual colapso global que estamos enfrentando.

México debe estar preparado para el combate al cambio climático, la erradicación de la pobreza, la Cuarta Revolución Tecnológica-Industrial, que comprende entre otros aspectos, la Inteligencia Artificial, la genética, las neurotecnologías y la automatización de la producción, todo ello basado en una sólida educación. Nuestro país, al igual que el mundo, enfrenta retos inéditos ya que vivimos un cambio de época. Todos estos retos debemos afrontarlos con pleno respeto a los derechos y las libertadas fundamentales de las personas.


También te puede interesar: Los retos globales para 2020

El Informe de Riesgos Globales 2020 del Foro Económico Mundial

Lectura: 4 minutos

Se realizó la reunión número 50 del Foro Económico Mundial en Davos. De igual forma, se publicó en Londres, el 15 de enero de 2020, las principales conclusiones del Informe de Riesgos Globales 2020 del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés, World Economic Forum).

En este Informe se señala que las graves amenazas al clima representan los principales riesgos a largo plazo, pero que las “confrontaciones económicas”, y la “polarización política interna” son los riesgos más importantes para el 2020. El Informe añade que la agitación geopolítica y el retroceso del multilateralismo amenazan la capacidad de todos para hacer frente a los riesgos globales compartidos. Asimismo, se agrega que si no se atiende con carácter urgente la resolución de las divisiones sociales y a la promoción de un crecimiento económico sostenible, los líderes no pueden abordar sistemáticamente amenazas como la crisis climática o las amenazas a la biodiversidad.

La polarización económica y política aumentará este año. La colaboración entre los líderes mundiales, las empresas y los responsables de formular políticas es más necesaria que nunca para detener las graves amenazas al clima, el medio ambiente, la salud pública y los sistemas tecnológicos.

co2
Imagen: Directivos y empresas.

El Informe advierte que este año se incrementarán las divisiones nacionales e internacionales y la desaceleración económica. Se consultó a más de 750 expertos y responsables de la toma de decisiones a nivel mundial para que clasificaran sus mayores preocupaciones en términos de probabilidad e impacto y el 78% señaló que espera que las “confrontaciones económicas” y la “polarización política interna” aumenten en 2020.

Este Informe elaborado en colaboración con Marsh & McLennan y “Zurich Insurance Group”, destaca la necesidad de establecer objetivos de protección de la Tierra y de impulso de las economías, y que las empresas eviten los riesgos de pérdidas futuras potencialmente desastrosas, ajustándose a objetivos que tengan fundamento científico.

Por primera vez en diez años de la encuesta, los cinco principales riesgos globales en términos de probabilidad son todos de carácter ambiental:

1. Fenómenos meteorológicos extremos con grandes daños a la propiedad, la infraestructura y la pérdida de vidas humanas;
2. Fracaso de los gobiernos y las empresas en la mitigación y adaptación al cambio climático;
3. Daños y catástrofes ambientales provocados por el ser humano, incluidos los delitos ambientales, como los derrames de petróleo y la contaminación radiactiva;
4. Pérdida de biodiversidad grave y colapso de los ecosistemas (terrestres o marinos) con consecuencias irreversibles para el medio ambiente, lo que resulta en un grave agotamiento de los recursos tanto para la humanidad como para las industrias;
5. Catástrofes naturales graves como terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas y tormentas geomagnéticas.

Se añade que las partes interesadas se deben adaptar al cambio de poder de la época actual y a las turbulencias geopolíticas, sin dejar de prepararse para el futuro. El tiempo se agota para abordar algunos de los desafíos económicos, ambientales y tecnológicos más apremiantes.

Presidente del Foro Economico Mundial
Børge Brende, Presidente del Foro Económico Mundial.

Børge Brende, Presidente del Foro Económico Mundial, planteó que el panorama político está polarizado, el nivel del mar está subiendo y los incendios climáticos se encuentran ardiendo. Éste es el año en que los líderes mundiales deben trabajar con todos los sectores de la sociedad para restaurar y revitalizar nuestros sistemas de cooperación, no sólo para obtener beneficios a corto plazo sino para hacer frente a nuestros riesgos de fondo. Además, el Informe de este año se centra en los impactos de la creciente desigualdad, las brechas en la gobernanza de la tecnología y los sistemas sanitarios bajo presión.

Como uno de los múltiples temas que contiene el Informe se señala que la actividad humana ya ha causado la pérdida del 83% de todos los mamíferos silvestres y la mitad de las plantas que son la base de nuestros sistemas alimentarios y sanitarios. Peter Giger, Director de Riesgos “Zurich Insurance Group” advirtió sobre la necesidad urgente de adaptarse más rápidamente para evitar mayores e irreversibles impactos de cambio climático y de trabajar más para proteger la biodiversidad del planeta. Añade que los ecosistemas biológicamente diversos capturan cantidades enormes de carbono y proporcionan beneficios económicos que se estiman en el equivalente al PIB de Estados Unidos y China juntos.

Las empresas y los responsables de formular políticas se deben apresurar para transitar a una economía con bajas emisiones de carbono y a modelos de negocios más sostenibles.

En suma, debemos tomar decisiones de fondo sobre nuestros esquemas de producción y consumo en todo el mundo.

El Informe de Riesgos Globales 2020 se elaboró con el apoyo de la Junta Asesora de Riesgos Globales del Foro Económico Mundial. Colaboran Marsh & McLennan y “Zurich Insurance Group”, y sus asesores académicos en la “Oxford Martin School” de la Universidad de Oxford, la Universidad Nacional de Singapur y el “Wharton Risk Management and Decision Processes Center” de la Universidad de Pensilvania.

La lección que deja Davos 2020

Lectura: 3 minutos

Davos 2020, el resumen del Foro Económico Mundial.

Los reflectores en el Foro Económico Mundial en Davos 2020 estuvieron puestos sobre el presidente Donald Trump, la joven activista Greta Thunberg, siendo los temas centrales el cambio climático, el crecimiento económico y las tensiones comerciales.

Cambio climático

El tema central en Davos 2020 fue el cambio climático y los cortos resultados que se han tenido a pesar de los esfuerzos y acuerdos firmados entre naciones.

La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que luchar contra el calentamiento global era una “cuestión de supervivencia”, mientras que Trump rechazó a los “profetas de la fatalidad”.

Las compañías petroleras más grandes discutieron objetivos de carbono más ambiciosos en una reunión a puerta cerrada.

Bajo presión para evitar financiar la energía sucia, los banqueros están esbozando políticas de sostenibilidad. Pero el CEO de Citigroup, Michael Corbat, dijo que los bancos no “querían ser la punta de lanza” y que los clientes deberían hacer más.

La falta de normas internacionales sobre lo que hace a las empresas responsables con el medio ambiente también sigue siendo una preocupación y los gobiernos están divididos por el atractivo de un impuesto al carbono.

Un nuevo riesgo: la propagación del coronavirus. El CEO de Axa, Thomas Buberl, dijo que aparecerán más virus, en parte porque “se está calentando en todas partes”.

Para Bill Winters, director ejecutivo de Standard Chartered, “los temas en Davos han sido abrumadoramente sostenibles hasta el punto de que probablemente desplazó algunas otras discusiones importantes”.

Los reflectores sobre Trump

Con un juicio político sobre él en casa, Trump esencialmente pronunció un discurso de campaña en el que destacó su manejo de la economía más grande del mundo. “Hemos recuperado nuestro paso, hemos redescubierto nuestro espíritu”, dijo.

“Trump no vuelve loca a la gente en Davos”, dijo el presidente de Eurasia Group, Ian Bremmer. “Piensan que va a ganar un segundo mandato y no hubo pánico acerca de la perspectiva de que pudiera suceder”.

Te recomendamos leer: Otra de las mentiras de Trump en Davos [OPINIÓN de Guillermo Knochenhauer]

Tensiones comerciales

Los instintos proteccionistas de Trump aún ponen nerviosos a los observadores de la economía, incluso después del acuerdo comercial interino de la semana pasada con China.

Ahora, el primer mandatario estadounidense señaló su cambio de enfoque de Beijing a la Unión Europea y está dispuesto a usar el libro de jugadas arancelarias nuevamente.

“La amenaza de los aranceles ha llevado a las personas a estar dispuestas a renegociar los acuerdos comerciales”, dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.

Estados Unidos está considerando aranceles sobre las importaciones europeas de automóviles y amenaza con represalias por cualquier gravamen sobre los ingresos por servicios digitales. Además, Trump todavía quiere una reforma “muy dramática” de la Organización Mundial del Comercio.

Aún así, el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, dijo que Estados Unidos y Europa están avanzando hacia un pacto global sobre la tributación de los servicios digitales.

El ministro de Hacienda del Reino Unido, Sajid Javid, se arriesgó a un choque con Trump después de sugerir que Estados Unidos tendrá que esperar en fila para un acuerdo comercial posterior al brexit hasta que Gran Bretaña termine de negociar uno con la Unión Europea. “Pensé que iríamos primero”, dijo Mnuchin.

Crecimiento económico global

Los líderes mundiales parecían estar seguros de que la economía global estaba en buen camino después del susto de recesión en 2019. El Fondo Monetario Internacional predijo que crecería 3.3 por ciento este año, después de 2.9 por ciento en 2019.

El “escenario probable abrumador es que la economía avance este año”, dijo el director ejecutivo de Goldman Sachs, David Solomon.

Si bien esa era la opinión mayoritaria, hubo algunas posiciones extremas en las perspectivas de los mercados.

Bob Prince, del fondo de cobertura Bridgewater, dijo que los bancos centrales habían terminado el ciclo de impulso. Pero Scott Minerd, de Guggenheim, argumentó que la política monetaria relajada había creado un “esquema piramidal”.

Los banqueros centrales presentes argumentaron que todavía tenían espacio para relajar aún más la política monetaria si fuera necesario, pero no mucho, así que los gobiernos deberían hacer más para apoyar la demanda.

“Tenemos que ver más acciones que vayan más allá de la política monetaria para impulsar el crecimiento”, dijo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva.

Con información de Bloomberg

¿Nos va a ir mejor en 2020?

Lectura: < 1 minuto

Directora del FMI revela predicciones económicas en el Foro Económico Mundial en Davos.

Las cosas no pintan muy bien para la economía global. De acuerdo a las predicciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) la desaceleración registrada en los mercados emergentes como India, tendrán un impacto negativo en el dinamismo global.

Las proyecciones de crecimiento económico reveladas en el Foro Económico Mundial de Davos se revisaron a la baja en comparación a las estimadas en octubre de 2019.
En la imagen se muestra a la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, hablando en una conferencia de prensa antes del Foro Económico Mundial (FEM) en Davos, Suiza, 20 enero 2020.

Foto: REUTERS/Denis Balibouse

Mensaje del Club de Roma en el Foro Económico Mundial de Davos 2020

Lectura: 4 minutos

Ha dado inicio la edición correspondiente al 2020 del Foro Económico Mundial que cada año se celebra en Davos, Suiza. Este Foro que reúne a las élites políticas y económicas del mundo y cuyas consideraciones y conclusiones marcan, en buena medida, la agenda global, tendrá este año al cambio climático como uno de los temas centrales de su agenda.

Sandrine Dixson-Declève, co-presidenta del Club de Roma, tendrá una importante participación en este Foro. Algunas de las ideas centrales de su presentación son las siguientes: mientras que la política continúa paralizando los esfuerzos para combatir la emergencia planetaria que significa el cambio climático, la ciencia sigue siendo tan inequívoca e irrefutable como siempre. Ya hemos cruzado varios “puntos de inflexión” en los sistemas de la Tierra; umbrales vitales más allá de los cuales se producirán consecuencias irreversibles y catastróficas para toda la vida en nuestro planeta. Añade que los impactos del cambio climático y la destrucción ecológica son más graves y se manifiestan antes de lo que muchas predicciones científicas habían previsto. Debemos actuar de inmediato para evitar que los riesgos alcancen una etapa crítica.

Durante 10,000 años la civilización humana creció y prosperó debido a la estabilidad climática de la Tierra y a su diversidad biológica.

calentamiento global
Imagen: Reuters.

Desde la Revolución industrial del siglo XVIII los ecosistemas terrestres y oceánicos han absorbido cerca de la mitad de todas las emisiones de la quema de combustibles fósiles. Esto es debido a que el clima y los ecosistemas naturales que los regulan y toda la vida en la tierra están interconectados. De hecho, la diversidad de las especies y la integridad de los ecosistemas tienen un papel fundamental en la regulación del clima, los ciclos del agua, el secuestro del carbono y la producción de alimentos. Sin la capacidad de la naturaleza para absorber y almacenar nuestras emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) ya habríamos superado los 2°C de calentamiento, con consecuencias desastrosas.

Es un hecho que no sabemos cómo reconstruir la criósfera, el ciclo hidrológico, las selvas tropicales, los arrecifes de coral y otros sistemas de soporte vital de la Tierra.

Nuestros patrones de crecimiento económico, desarrollo, producción y consumo están empujando los sistemas de soporte vital de la Tierra más allá de sus límites naturales. Dependemos fundamentalmente de estos ecosistemas, pero somos nosotros los impulsores de su destrucción. Somos nosotros los que estamos empujando los sistemas que sostienen la Tierra más allá de sus límites planetarios. Estamos causando severos cambios en los patrones climáticos y provocando una destrucción incalculable en forma de incendios forestales desde el Amazonas hasta Australia y tormentas violentas desde Mozambique hasta Barbados. La mayoría de los gobiernos y las corporaciones continúan en la negación de los hechos, pero los riesgos de colapso se intensifican. En suma, éste es el mayor riesgo existencial que enfrenta la civilización humana moderna.

Nuestras formas de consumo y crecimiento no sólo destruyen los ecosistemas, sino que también han creado puntos críticos socioeconómicos graves y una mayor desigualdad tanto en las economías maduras como en las emergentes. Debemos abordar con urgencia los riesgos climáticos y la biodiversidad, así como construir nuevos sistemas económicos, sociales y financieros que fomenten el bienestar y la regeneración de la naturaleza.

emergencia y foro climatico
Imagen: NBC News.

Ante esta situación, el Club de Roma presenta el Plan de Emergencia Planetaria el cual propone una nueva ruta para recorrer a partir del 2020, un año crítico para la acción de políticas internacionales con decisiones clave para el cambio climático, la biodiversidad, los océanos, los objetivos del Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, entre otros temas fundamentales. El Plan exige la implementación de los compromisos para salvaguardar y restaurar nuestros bienes comunes globales, desde detener el declive de los ecosistemas críticos terrestres y oceánicos hasta proporcionar mecanismos financieros para cambiar a prácticas regenerativas de uso de la tierra. También se destaca la necesidad de un nuevo Fondo de Emergencia Planetaria multilateral para abordar rápidamente elementos de la crisis, frente a impactos inevitables. Se describen también 10 palancas clave para transformar los sistemas de energía, cambiar a una economía circular y garantizar una sociedad justa y equitativa fundada en el bienestar humano y ecológico.

El Plan de Emergencia Planetaria llega en un momento crucial, en el que el mundo debe cambiar el rumbo, evitar el desastre inminente y optar por una profunda transformación.

Por su parte, para el Foro Económico Mundial el cambio climático plantea una amenaza urgente que exige una acción decisiva. El Informe de Riesgos Globales del Foro Económico Mundial continúa clasificando estas amenazas ambientales en la parte superior de su lista.

La Iniciativa Climática del Foro Económico Mundial apoya la ampliación y aceleración de la acción climática global a través de la colaboración de los sectores público y privado.