Naciones Unidas (ONU)

Liderazgo para gestionar el bienestar global

Lectura: 3 minutos

A partir de este miércoles 17 de junio México inicia la ruta formal y vinculante que lo convierte como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Durante 2021 y 2022 el país norteamericano será el representante selecto de la región latinoamericana en el cónclave que busca gestionar los conflictos armados internacionales. Después de diez años, México busca profundizar en la gestión del cambio que coopere a la reforma de esta comisión élite de la ONU a través de la promoción de nuevos mecanismos de participación y votación.

En un principio, se me ocurre pensar que no es justo que cinco potencias permanentes, Francia, China, Estados Unidos, Rusia y Reino Unido, decidan sobre los grandes asuntos humanos –lo cual es irónicamente antidemocrático y “atenta” contra la igualdad humana–, y quiérase o no, se ha observado en este siglo, por ejemplo, la falta de soluciones adecuadas a conflictos desgarradores como el sirio, libio, etcétera.

Es importante resaltar la importancia geoestratégica y política de México en el orden internacional, lo cual “legitima” su incorporación al debate relativo a la desactivación de los grandes problemas de conflictividad global, que a mi parecer se mantienen debido a que imperan criterios de “hacer valer” ciertas nociones ideológicas sobre otras que tienen un menor peso geopolítico, y que en consecuencia imposibilita la rúbrica de acuerdos universales.

mexico en la onu
Fotografía: Yucatán a la mano.

Vemos ejemplos claros en nuestros países como la inacabada desmovilización de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), las cuales quiérase o no y paradójicamente han creado “sufrimientos” a sectores marginados rurales por quienes dicen “levantar” las banderas de la sublevación en contra del sistema. Es el caso también del levantamiento armado en 1994 de los pueblos indígenas mexicanos en Chiapas en la exigencia de condiciones de vida dignas. 

Ciertamente, los avances científicos y tecnológicos han aportado “tibiamente” a la mejora progresiva en las condiciones de vida de nuestros sectores marginados, tanto en el campo como en la ciudad, debido a que solamente algunos sectores pueden acceder a los mismos. Por eso, es importante buscar el impulso de acuerdos desde instancias como el Consejo de Seguridad de la ONU, que interiorice la lucha global contra “epidemias” locales como la segregación, la desigualdad y la opresión como células replicadoras del descontento popular.

En segunda instancia, creo que éste es un momento “propicio” –y creo que así lo han entendido 187 de 192 representantes que han apoyado a México–para relanzar un nuevo liderazgo que permita reposicionar los valores, culturas e identidades de nuestros países a fin de incursionar en un mercado global de identidades, lo cual a la postre debería potenciar los diversos intercambios interpaíses.

bienestar global
Ilustración: Raquel Moreno.

Ahora bien, si algo ha caracterizado a la diplomacia mexicana en la historia contemporánea es aquella que busca la paz a través de la mediación y el diálogo para encontrar posturas comunes a desafíos de diversa índole que afectan la sana convivencia y el desarrollo democrático de nuestros ciudadanos –debido a retos tan disimiles como terrorismo, narcotráfico, corrupción institucionalizada, etc.–. Ya lo subraya el embajador mexicano en la ONU, Juan Ramón de la Fuente, para quien su lógica de acción está cimentada en pilares básicos como: la resolución pacífica de conflictos, la autodeterminación de los pueblos, la lucha contra la desigualdad, y la regulación de armas.

En conclusión, la tarea mexicana en este escenario global debe ir enfocado a las necesidades de resignificar las labores de acción “sobre el terreno” de las actividades de instancias como la ONU, al buscar sobre todo la desideologización de las iniciativas impulsadas en procura de dar respuestas acertadas a problemas de complejas y diversas raíces socioculturales de nuestro mundo.

Posdata: El Consejo de Seguridad de la ONU fue fundado en 1945 al finalizar la Segunda Guerra Mundial. Ésta es la quinta ocasión que México ocupa un sitial como miembro no permanente en la asamblea. Ya lo había hecho durante los períodos: 1946; 1980-81; 2001-02; y 2009-10. En 1982 el entonces embajador Alfonso García Robles fue premiado con el Nobel de la Paz por trabajar en la negociación del desarme nuclear.


También te puede interesar: Erradicar el virus del racismo: meta humana impostergable.

¿Pandemia versus globalización?

Lectura: 7 minutos

Más allá de los desafíos inmediatos de salud pública y para la economía, así como los relacionados con la “nueva normalidad” o “economía de bajo contacto” a corto y mediano plazos, el COVID-19 puede dejar como legado transformaciones estructurales de gran calado. Ése pareciera ser el caso del proceso de globalización, al tomar fuerza tendencias de freno o reversa que ya previamente mostraban impulso.

Se ha hablado mucho de la pandemia como botón de aceleración (fast forward), como si se adelantara el futuro. Eso ya ocurre, por ejemplo, con la incorporación acelerada a de las tecnologías de la información a todos los ámbitos de las actividades humanas. Sin embargo, las grandes crisis también pueden detonar o dar cauce a regresiones: a que se den pasos hacia atrás, como si se apretara el botón de regresar (Rewind).

Al menos desde hace cinco años eran notorias las inclinaciones nacionalistas y proteccionistas, y desde el 2018 con tensiones crecientes y abiertas entre potencias, sobre todo de Estados Unidos y China. Asimismo, ya eran frecuentes las muestras de menosprecio o abierto ataque a instituciones y organismos multilaterales y de gobernanza internacional, desde la Organización Mundial de Comercio hasta Naciones Unidas. Ahora estas actitudes se replican, como ocurre contra la Organización Mundial de la Salud, a partir de las amenazas de la administración Trump y la cancelación del pago de las cuotas de Estados Unidos.

En suma, la pandemia, que por su misma naturaleza demanda medidas de distanciamiento, se da en un mal momento para la globalización. Justamente en ese caldo de cultivo de movimientos populistas proclives al nacionalismo y al proteccionismo, en parte producto de contradicciones y problemas estructurales de la misma globalización.

pandemia trump
Ilustración: Zakeric.

Apenas empezaban asimilarse las consecuencias y las lecciones del crack financiero del 2008-2009 cuando nos explota una crisis aún más compleja.

En ese escenario, para un país como México, por su condición geopolítica y su exposición al mundo, es fundamental –crítico– tener una lectura completa al respecto, tanto de los retos y las amenazas como de las oportunidades. Hay mucho que perder si la visión y la respuesta son erradas, aunque también podríamos salir ganando, con la postura adecuada.

¿Adiós a la globalización?

Hoy hemos visto cómo China presiona para imponer un nuevo marco de seguridad en Hong Kong que pudiera violentar el tratado de 1984 que creó el estatus de “un país, dos sistemas”, el cual supuestamente debería extenderse hasta el 2047. Esto podría derivar en repercusiones geopolíticas y económicas de gran alcance, al estar de por medio un centro neurálgico tanto para el sistema financiero en Asia como, por la relevancia de su puerto, para el comercio global. En respuesta, Estados Unidos ha amenazado con retirar el trato especial a la ciudad. La cuestión es que esto es sólo una arista del antagonismo.

Durante la pandemia y previamente, la administración Trump lo mismo ha escalado la ofensiva contra Huawei, en una pugna cada vez más abierta por el liderazgo global en el desarrollo de las telecomunicaciones, que acusado a los chinos de una presunta responsabilidad para que el COVID-19 se propagara sin control. La competencia incluso de da en una carrera vertiginosa por el desarrollo de la primera vacuna contra el virus.

Simplemente consideremos la significación de que el Representante de Comercio Robert Lighthizer publicara en el New York Times un artículo con este título: “La era de la deslocalización de empleos de EE. UU. ha terminado” (11 de mayo). Ahí, precisamente se resalta que las crisis aceleran cambios y adelantan acciones por venir “después de derrotar esta enfermedad”: “devolver los empleos a Estados Unidos”.

Las potenciales implicaciones rebasan por mucho a las relaciones con China. Como señalamos, le atañen a México.

desempleo por pandemia
Ilustración: Otto Dettmer.

Hay que tener en cuenta que una alternancia en el gobierno estadounidense no implica necesariamente una situación distinta, pues la ofensiva no viene sólo de la Casa Blanca. Para muestra un botón: se ha reportado que legisladores tanto republicanos como demócratas trabajan en propuestas para presionar a las empresas para que saquen sus operaciones de proveeduría estratégica de China y las lleven a Estados Unidos, lo que incluiría estímulos fiscales, nuevas regulaciones e incluso subsidios, incluyendo un “fondo de reubicación” dotado inicialmente de 25 mil millones de dólares.

No son sólo propuestas y palabras. Ya hay acciones concretas en marcha, como una legislación con respaldo bipartidista para que el gobierno canalice miles de millones de dólares en estímulos a la industria de semiconductores con un propósito fundamental: llevar de vuelta a Estados Unidos operaciones de investigación y producción.

¿Más robots?

No sólo pesan los factores geopolíticos: éstos se refuerzan con nuevas capacidades industriales que dan viabilidad e inclusive rentabilidad a la relocalización productiva. En un artículo revelador publicado en el portal del Center for Economic and Policy Research, “COVID-19 could spur automation and reverse globalisationto some extent” (28 de abril), se da cuenta de cómo podría acelerarse la automatización y una reversa –“hasta cierto grado”– a la globalización.

Los autores, Deborah Winkler y Adnan Seric, de la Organización de Desarrollo Industrial de la ONU, exponen que, mucho antes de la epidemia, firmas globales han recurrido a elementos del concepto Industria 4.0 para mitigar riesgos de disrupción de sus cadenas de suministro, incrementar la resiliencia y mejorar los estándares de sus productos: lo mismo con el esquema de fábricas inteligentes que impresión 3D. Todo ello hace más factible el traer de vuelta a sus países sede partes de las líneas de producción con un costo-beneficio competitivo: pueden así estar más cerca de los principales mercados de consumo (China, Estados Unidos, Europa, Japón) y consolidar varios procesos regionalmente o en un sólo sitio.

“Hacer frente a esta pandemia podría acelerar algunas de estas tendencias de los últimos años, incluida la adopción de tecnología y el uso de nuevos datos”, señalan los investigadores, que ponen ejemplos como la incorporación de robots para suplir a trabajadores en la industria del vestido en Bangladesh, como medio de adaptación para alzas en la nómina. La automatización y la relocalización, desde el punto de vista de estas multinacionales, pueden ayudar a reducir la dependencia en la cadena de abasto internacional, particularmente la de manufacturas de bajo costo de mano de obra.

robots
Ilustración: Tech Hive.

Reversa provisional, pero disruptiva

En medio de las noticias sobre los problemas inmediatos de la pandemia, la influyente revista británica The Economist, siempre abierta partidaria de la globalización, publicó hace unas semanas un artículo de lectura obligada para entender lo que viene: “Has covid-19 killed globalisation?” (14 de mayo).

En su visión, el sistema abierto de comercio, que ya estaba herido por el colapso financiero del 2008 y la guerra comercial chino-estadounidense, ahora recibe un tercer duro golpe en apenas una docena de años.

Como la publicación, muchos consideramos que la globalización es irreversible, lo mismo por razones históricas que tecnológicas que hacen prácticamente inevitable el acercamiento y la integración humana. De hecho, coincidimos en que es necesario y urgente que se resuelvan dilemas estructurales para que ese proceso se profundice.

Varios de los grandes desafíos de la humanidad sólo podrán ser superados con más y no menos globalización: por ejemplo, el cambio climático, las distorsiones económicas que reproducen las desigualdades y las crisis migratorias, así como las propias pandemias, que si bien requieren políticas efectivas en cada país, también necesitan cooperación y coordinación internacional efectiva.

Sin embargo, son claros los síntomas de esta reversa que, aunque provisional, no dejará de tener efectos altamente disruptivos:

El número de pasajeros en Heathrow disminuyó en un 97% interanual.
Las exportaciones de automóviles mexicanos cayeron un 90% en abril.
El 21% de los viajes transpacíficos de contenedores en mayo ha sido cancelada.
Se estima que el comercio mundial de bienes puede reducirse entre 10 y 30 por ciento este año.
En sólo los primeros 10 días de mayo, las exportaciones de Corea del Sur cayeron un 46% interanual, la peor disminución desde 1967.
Alrededor del 90% de las personas vive en países con fronteras en gran medida cerradas. Muchos gobiernos se abrirán solo a países con protocolos de salud similares.

economia, pandemia y globalizacion
Ilustración: Bill Bragg.

Tendencias previsibles

De acuerdo con The Economist, a medida que se reabran las economías, la actividad podría recuperarse, pero no esperemos un rápido regreso a un mundo sin restricciones de movimiento y libre comercio.Lo más probable es que la pandemia “politizará” los viajes y a la migración, aún más de lo que estaban. En Estados Unidos, Trump quiere reducir aún más la inmigración, aduciendo que los empleos deben ir a los estadounidenses. Otros países le seguirán, con un sesgo hacia la autosuficiencia.

Naciones tan cercanas como Francia y Gran Bretaña han tenido frecuentes fricciones por las reglas de cuarentena, en plena era Brexit. China ha amenazado a Australia con aranceles punitivos por exigir una investigación sobre los orígenes del virus. Estados Unidos y China siguen en pie de guerra sobre el comercio.
A pesar de algunos casos de cooperación durante la pandemia, como los préstamos de la Reserva Federal, Estados Unidos se ha mostrado reacio a actuar como líder mundial o súper potencia, como lo intentó tras la caída del bloque soviético.
Esta sacudida hacia adentro debilitará la recuperación, dejará a la economía vulnerable y propagará la inestabilidad geopolítica.
En todo el mundo, gran parte de la opinión pública se está alejando de la globalización. Y esto es sólo el comienzo.
El comercio sufrirá a medida que los países abandonen la idea de que las empresas y los bienes reciben el mismo trato sin importar su procedencia.
Los gobiernos y los bancos centrales están pidiendo a los contribuyentes que suscriban a las empresas nacionales a través de sus paquetes de estímulo, creando un incentivo enorme y continuo para favorecerlos.
Y el impulso para llevar las cadenas de suministro a casa en nombre de la resiliencia se está acelerando. The Economist pone el ejemplo de India: el llamado explícito de su Primer Ministro a “una nueva era de autosuficiencia económica”.
Otros más: el estímulo japonés COVID-19, que incluye subsidios para empresas que repatrían fábricas, mientras, del otro lado del mundo, los funcionarios de la Unión Europea hablan de “autonomía estratégica” y están creando un fondo para comprar participaciones en empresas.
El comercio digital prospera, pero su escala es modesta. Se estima que las ventas al exterior de Amazon, Apple, Facebook y Microsoft equivalen a sólo el 1.3% de las exportaciones mundiales.

La pregunta es: ¿dónde queda México? ¿Qué vamos a hacer? Voltear a otra parte no servirá de nada. Hay que pensar y actuar estratégicamente, en función de nuestras circunstancias. Con base en fortalezas como las que hemos construido en materia industrial y de nuestra red de tratados de libre comercio, incluyendo el TLCAN. Hay retos y amenazas, pero también oportunidades. Proponemos abordar este balance SWOT en el próximo comentario.

Algo es seguro: ensimismarnos en los problemas internos y la polarización política en nada ayudan. El mundo no va a detenerse ni nos esperará.


También te puede interesar: Alternativas prácticas para evitar una tragedia de desempleo y pobreza.

México brilla en órganos de la ONU

Lectura: 2 minutos

México será parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas

Con 187 votos a favor y 5 abstenciones, la Asamblea General del Consejo eligió a México para ser uno de los países que ocupe un escaño en el Consejo de Seguridad, una distinción anunciada por la cancillería mexicana.

“Tengo el honor de informar que México ha sido electo por 187 votos miembro del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas. Gran reconocimiento a nuestro país en todo el mundo. Enhorabuena,” escribió el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en su cuenta de Twitter.

El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CSNU), es uno de los seis órganos principales de la Organización encargado de garantizar la paz y la seguridad internacional, recomendar la admisión de nuevos miembros a la Asamblea General y de aportar cualquier cambio a la Carta de las Naciones Unidas.

De acuerdo con datos referidos por la Secretaría de Relaciones Exteriores, México ha sido parte del Consejo de Seguridad de la ONU como miembro no permanente en cuatro ocasiones: 1946, 1980-81, 2001-02 y 2009-10. Por tanto, ésta sería la quinta vez, de 2021 a 2022.

Lo miembros no permanentes son 10 y son elegidos a nivel regional para cumplir un mandato de dos años. La presidencia del organismo rota mensualmente entre sus miembros, expuso la dependencia federal.

El embajador mexicano en Naciones Unidas, José Ramón de la Fuente, indicó que también México fue elegido para ser parte del consejo económico y social de la Organización por los próximos tres años.

Votación sin ‘moche’

José Ramón de la Fuente aclaró que los nombramientos de México como parte de dos relevantes organizaciones de Naciones Unidas no representaron un costo adicional para el erario.

México no recurrió a invitaciones especiales, regalos o algún acto sutil de soborno para lograr la votación mayoritaria a su favor; sin embargo, el embajador de México ante Naciones Unidas recalcó que fueron dos actos culturales encabezados por la Universidad Nacional Autónoma de México y el Gobierno de Oaxaca, los recursos a los que el país recurrió para mostrar su riqueza ante el mundo.

La Tierra, un dolor, una agonía

Lectura: 4 minutos

La Tierra grita de dolor. Sin embargo, pareciera que nadie escucha su llanto.

México cuenta con una espectacular naturaleza, la cual, es de suma importancia, no solamente para nuestro país, sino para todo el mundo.

Hoy más que nunca estamos conscientes de la interconexión que existe entre todos los puntos del planeta, sabemos a ciencia cierta que unos no podemos sobrevivir sin los otros.

De manera igualmente importante, la humanidad no podrá seguir existiendo si no protegemos y restauramos a la naturaleza. Nunca como ahora, la sobrevivencia del planeta ha estado tan amenazada.

El día 5 de junio se conmemora en todo el mundo el Día Internacional del Medio Ambiente.

Impulsada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) esta iniciativa data de 1974, y como reconoce la propia ONU, “se ha convertido en una plataforma global de alcance público que reúne a gobiernos, empresas, celebridades y ciudadanos en torno a un asunto ambiental apremiante”.

Se calcula que nuestro planeta alberga cerca de 10 millones de especies. Mas, no se trata sólo de las especies en sí, sino del papel que éstas juegan a nivel de los ecosistemas en donde habitan e incluso, la diversidad genética de la que contienen.

La hora que vivimos es tan crítica para la biodiversidad, que Naciones Unidas alerta respecto a la posibilidad, cada vez más real, de que en la próxima década una de cada cuatro especies conocidas se haya extinguido.

Es por eso que tenemos la obligación de actuar con rapidez y eficiencia, de hacer un compromiso inapelable e inviolable que asegure la conservación, restauración y el buen manejo de todos los ecosistemas.

Hoy, la Tierra brama de dolor, porque ha sido violada.

México, uno de los países con mayor riqueza en materia de biodiversidad parece caminar en sentido contrario a las corrientes que desde todas partes del mundo reclaman acciones más decididas y contundentes para salvar la vida del planeta.

la tierra y el tren maya
Imagen: Milenio.

El Tren Maya, representa un atentado en contra del planeta, la agresión e irresponsabilidad que implica su construcción son de dimensiones descomunales.

Pareciera que los mexicanos no hemos aprendido nada, que no sabemos nada, que no contamos con instituciones y órganos que se han avocado al estudio del manejo, restauración y conservación, de especies y ecosistemas.

El trayecto del Tren Maya atraviesa y fragmenta los ecosistemas de la península de Yucatán, selvas secas y húmedas, manglares y cenotes.

Todos los días, la Tierra emite alaridos de estrujante dolor, porque sigue siendo mancillada sin misericordia.

El proyecto presentado de recorrido del Tren Maya, impulsará, por ejemplo, la creación de nuevos asentamientos humanos, los cuales acarrearán una  transformación paulatina en una región frágil en cuanto a sus suelos y su agua. Tal hecho pondrá en peligro la sobrevivencia de más de 200 especies que habitan en la zona y que se encuentran en riesgo, supuestamente protegidas por las leyes mexicanas.

tren maya, peligro para la tierra
Cartoon: Rictus (El Financiero).

Por si esto fuese poco, será indispensable el uso de herbicidas con el fin de mantener las vías del tren libres de plantas colonizadoras, las sustancias se filtrarán a los mantos freáticos de los ríos subterráneos y los cenotes, afectando la salud de estos frágiles ecosistemas y, por ende también, de la población humana que depende de ellos.

El argumento, como lo fue durante décadas y siglos, es que traerá progreso y beneficios económicos.

Éste ha sido el discurso que, paradójicamente, ha llevado a la Tierra a lo que si no nos apuramos será un camino sin retorno.

Bajo la promesa del progreso y de la derrama económica, el daño que se ha ocasionado a la naturaleza es cientos de veces mayor que cualquier beneficio, real o prometido, que pudiera obtenerse.

En esta circunstancia de urgencia ambiental y frente a lo incierto que es el propio éxito de esta mega construcción en pleno corazón de la selva, la pregunta es evidente: ¿vale la pena destruir la selva… a cambio de quién sabe qué beneficio?

Pensemos en las generaciones que vendrán después de nuestros hijos y nietos cuando el Tren Maya sea obsoleto y la selva haya desaparecido. 

Más que nunca, ¡la Tierra clama frente al violento dolor del que es víctima!


*Este texto se publica en ocasión del Día Mundial del Medio ambiente, decretado por las Naciones en 1974.


También puede interesarte: Recuperación de la crisis del COVID-19, el Pacto Verde y la Agenda Digital.

Espaldarazo de la ONU a AMLO

Lectura: 3 minutos

Naciones Unidas apoya propuesta de AMLO sobre equipos médicos

161 países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han expresado su copatrocinio a la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre el comercio de medicamentos y equipos médicos, afirmó este viernes Juan Ramón de la Fuente, embajador de México ante ese organismo.

El funcionario puntualizó que esta iniciativa fue hecha por el titular del Ejecutivo en la teleconferencia del G20 del 26 de marzo pasado.

En aquella ocasión, López Obrador sugirió que Naciones Unidas controle el comercio de insumos necesarios para el tratamiento del COVID-19, esto debido a la escasez y acaparamiento por parte de quienes tienen los recursos económicos para adquirirlos.

“Tiene que darse un trato humanitario, no especulativo, no lucrativo”, dijo.

De la Fuente subrayó la importancia de esta iniciativa debido a que no solo plantea evitar el acaparamiento o especulación de los insumos que actualmente se utilizan para el combate contra el nuevo coronavirus, sino también para los futuros.

“Si ya vimos que hay una especulación sobre los cubrebocas, imagínense cómo será con las vacunas”, puntualizó.

El embajador detalló que la iniciativa cuenta con el copatrocinio de países como Alemania, China, España o Reino Unido.

De la Fuente explicó que la propuesta ahora está en un “periodo de silencio”, es decir, un lapso de 72 horas que se da para que alguno de las naciones miembro de la ONU exprese su opinión sobre la iniciativa, incluso si es una postura en contra.

161 países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han expresado su copatrocinio a la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre el comercio de medicamentos y equipos médicos, afirmó este viernes Juan Ramón de la Fuente, embajador de México ante ese organismo.

El funcionario puntualizó que esta iniciativa fue hecha por el titular del Ejecutivo en la teleconferencia del G20 del 26 de marzo pasado.

En aquella ocasión, López Obrador sugirió que Naciones Unidas controle el comercio de insumos necesarios para el tratamiento del COVID-19, esto debido a la escasez y acaparamiento por parte de quienes tienen los recursos económicos para adquirirlos.

“Tiene que darse un trato humanitario, no especulativo, no lucrativo”, dijo.

De la Fuente subrayó la importancia de esta iniciativa debido a que no solo plantea evitar el acaparamiento o especulación de los insumos que actualmente se utilizan para el combate contra el nuevo coronavirus, sino también para los futuros.

“Si ya vimos que hay una especulación sobre los cubrebocas, imagínense cómo será con las vacunas”, puntualizó.

El embajador detalló que la iniciativa cuenta con el copatrocinio de países como Alemania, China, España o Reino Unido.

De la Fuente explicó que la propuesta ahora está en un “periodo de silencio”, es decir, un lapso de 72 horas que se da para que alguno de las naciones miembro de la ONU exprese su opinión sobre la iniciativa, incluso si es una postura en contra.

“Todas las señales que percibo, y dada la gran aceptación, creo que la propuesta que planteó tiene todas las posibilidades para que a partir del próximo lunes se adopte como una resolución (en la Asamblea General)”, expuso.

“Todas las señales que percibo, y dada la gran aceptación, creo que la propuesta que planteó tiene todas las posibilidades para que a partir del próximo lunes se adopte como una resolución (en la Asamblea General)”, expuso.

Te puede interesar: López Obrador ante el G20

ResiliArt, voz a la cultura en tiempos de crisis

Lectura: 2 minutos

ResiliArt un debate para dar voz a la cultura en tiempos de crisis

En su esfuerzo por apoyar a los artistas e instituciones cuyas fuentes han sido afectadas, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) creo ResiliArt, a partir de la crisis sanitaria global que se ha generado.

“Si bien miles de millones de personas en todo el mundo recurren a la cultura como fuente de consuelo y conexión, el impacto de COVID-19 no ha evitado el sector cultural. Más del 80 por ciento de las propiedades del Patrimonio Mundial de la UNESCO se han cerrado”, indicó el organismo.

La UNESCO anunció la realización de una serie de debates que tienen como objetivo arrojar luz sobre el estado actual de las industrias creativas en medio de la crisis, a través de una discusión global exclusiva con profesionales clave de la industria, al tiempo que captura las experiencias y las voces de resistencia de los creadores.

El proyecto, que lleva por nombre ResiliArt,  realizó su primera sesión se realizó este miércoles, de manera virtual, con la presencia de la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay; el subdirector, Ernesto Renato Ottone, y el embajador de buena voluntad, Jean-Michel Jarre.

A ellos se unieron personalidades de todas partes del mundo, como Angélique Kidjo, cantante proveniente de Benín; Nina Obuljen-Kor?inek, ministra de Cultura de Croacia, y Deeyah Khan, directora cinematográfica, quien sostuvo que incluso si este tipo de actividades no se ven como necesarias, son una parte importante, y subrayó la importancia de proteger el arte.

Luego del encuentro virtual, la directora general reconoció en redes sociales que “la cultura es un alimento para la mente” y añadió que la UNESCO está comprometida con el hecho de redefinir “el futuro de la creación artística, la remuneración y la economía”. Dicha organización ha invitado a los artistas a participar con este movimiento mediante la publicación de mensajes que den apoyo al gremio.

Juan Ramón de la Fuente, positivo de COVID-19

Lectura: < 1 minuto

El embajador de México ante Naciones Unidas, Juan Ramón de la Fuente, confirmó haber sido contagiado de coronavirus COVID-19 en Nueva York, según narra en su columna del lunes 13 de abril para el diario El Universal.

El también exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) refirió que no presenta síntomas graves de la enfermedad causada por la nueva cepa de coronavirus.

“Todos hemos vivido con intensidad estas semanas. A mí me ha tocado vivirlas en Nueva York y en México. Fui positivo al COVID-19 y me sometí a una cuarentena rigurosa. Aunque estoy sano, tengo 68 años, que es un factor de riesgo. No obstante, mi evolución clínica ha sido muy benigna, prácticamente sin síntomas, como ocurre en 8 de cada 10 personas que contraen el virus”, indicó en el texto.

En su escrito, el Dr. Juan Ramón de la Fuente indicó que continua realizando sus labores como embajador de México ante Naciones Unidas a distancia, con lo que dejó ver que se encuentra activo y sin mayores complicaciones.

Te puede interesar: El poder del COVID-19, más mortal que el H1N1

Día Internacional de la Felicidad

Lectura: 3 minutos

El 20 de marzo se celebra el Día Internacional de la Felicidad

Desde el 2013 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) invita a celebrar cada 20 de marzo el Día Internacional de la Felicidad con la intención de recordarnos el papel relevante que tiene esta emoción en nuestra vida diaria.

EL 20 de marzo ha sido denominado como el Día Internacional de la Felicidad por la ONU quien desde el 2013, año en que inició esta celebración el organismo internacional realiza el Informe de Felicidad Mundial, en el 2018 México ocupa el lugar 24 de un total de 156 países evaluados, con ello se trata de recordar el papel relevante que tiene esta emoción en nuestra vida diaria, así como para fomentar la integración de la felicidad en las políticas públicas

Por ello en el 2015 las Naciones Unidas lanzó los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que pretenden poner fin a la pobreza, reducir la desigualdad y proteger nuestro planeta, tres aspectos primordiales que contribuyen a garantizar el bienestar y la felicidad, indica en su página oficial. Y añade que la iniciativa fue iniciada por Bután, un país que desde principios de la década de 1970 reconoce el valor de la felicidad nacional sobre el de los ingresos nacionales y que prioriza la Felicidad Nacional Bruta sobre el Producto Nacional Bruto.

El 28 de junio de 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas accedió a que el 20 de marzo se conmemorara el Día internacional de la Felicidad, e invitó “a todas las personas de cualquier edad, así como a las escuelas, a los negocios y a los gobiernos a celebrar todos juntos” esa fecha.

Al reconocer la importancia de la felicidad, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha implementado varios objetivos y estudios para ayudar al bienestar del planeta.

Objetivos de Desarrollo Sostenible

El 25 de septiembre del 2015 durante la Cumbre de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible, que se llevó a cabo en la Ciudad de Nueva York, más de 150 líderes mundiales aprobaron la Agenda para el Desarrollo Sostenible. Como resultado, el documento “Transformar Nuestro Mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible” fue adoptado por 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas.

En este, se incluyen los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, buscando terminar con la pobreza, la desigualdad y la injusticia, y combatir el cambio climático, con el objetivo de lograr mejoras a nivel mundial para el año 2030.

Estos son los Objetivos de Desarrollo Sostenible y lo que buscan lograr según la ONU:

  1. Fin de la pobreza – Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.
  2. Hambre cero – Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible.
  3. Salud y bienestar – Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.
  4. Educación de calidad – Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos
  5. Igualdad de género – Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas
  6. Agua limpia y saneamiento – Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos
  7. Energía asequible y no contaminante – Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos
  8. Trabajo decente y crecimiento económico – Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos
  9. Industria innovación e infraestructura – Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación
  10. Reducción de las desigualdades – Reducir la desigualdad en y entre los países
  11. Ciudades y comunidades sostenibles – Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles
  12. Producción y consumo responsables – Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles
  13. Acción por el agua – Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos
  14. Vida submarina – Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible
  15. Vida de ecosistemas terrestres – Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, gestionar los bosques de forma sostenible, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y poner freno a la pérdida de la diversidad biológica
  16. Paz, justicia e instituciones sólidas – Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles
  17. Alianzas para lograr los objetivos – Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible