Política

Un Estado fuerte: la lección que nos deja la pandemia

Lectura: 3 minutos

El tipo de Estado que requiere nuestro país es quizá el punto de desencuentro más profundo en estos momentos. A finales de la década de los 80, el Estado mexicano entró en una fuerte crisis debido a su obesidad, corrupción, burocratismo e ineficiencia. Tanto economistas formados –sobre todo en universidades de Estados Unidos– como la propia izquierda mexicana señalaron estas deficiencias con justa razón.

Los economistas graduados en el extranjero que ganaron el poder plantearon como alternativa la reducción significativa de las funciones del Estado, por lo que impusieron por más de 30 años una serie de reformas, denominadas neoliberales, que se caracterizaron por la reducción generalizada del gobierno, una aplicación de austeridad fiscal y monetaria llevada a cabo bajo la mirada vigilante del FMI, el recorte de las importaciones y el incremento de las exportaciones; en una segunda etapa se aplicaron reformas institucionales privatizando las industrias paraestatales y el sistema bancario que había sido nacionalizado en 1982. 

Si bien estas medidas redujeron significativamente la inflación, al final los resultados del neoliberalismo en México no fueron positivos, sobre todo en términos de bienestar social: más del 45% de las familias mexicanas viven por debajo de la línea de pobreza; tanto el ingreso monetario como el ingreso por familia se deterioraron significativamente en tres décadas. Por lo tanto, podemos afirmar que el debilitamiento del Estado que dio mayor preponderancia al mercado para generar mayor crecimiento económico fue exitoso únicamente para controlar la inflación y para beneficiar a una élite económica y política, pues el resultado principal fue un aumento sin precedentes de la desigualdad de ingresos y de riqueza. Otro de los saldos negativos más evidentes de la preponderancia del mercado sobre lo público fue la pauperización de la calidad de vida de las personas, gracias al debilitamiento institucional que mermó las capacidades básicas del Estado para brindar seguridad, salud, educación y alimentación.

estado fuerte
Imagen: SCMP.

La gran muestra de las consecuencias del deterioro del Estado mexicano lo podemos ver claramente en la actual pandemia del coronavirus, que llegó casi a la par del nuevo gobierno, con un sistema de salud prácticamente colapsado. Resulta paradójico que quienes debilitaron las capacidades del Estado mexicano, a través de sus críticas por la “ausencia de contrapesos al poder presidencial” para conservar los avances democráticos y de libertades, quieran ocultar su responsabilidad en los episodios de violencia, inseguridad, saqueos y actos de corrupción vividos en las últimas décadas. No quieren reconocer que nos dejaron un Estado débil que permitió que una minoría poderosa que juega en el mercado se impusiera sobre la mayoría de los ciudadanos.

Para enfrentar el enorme espectro de carencias que ha potenciado esta pandemia es necesaria la construcción de un Estado fuerte, que sin lugar a duda es la lección más importante que nos dejado la Covid-19, al presentarnos un aumento de la demanda de los servicios de salud y la necesidad de apoyar a la población por los empleos perdidos y las fuentes de trabajo que cerraron. Según un informe del FMI, a octubre de 2020 las medidas de apoyo a la población anunciadas por el gobierno mexicana apenas alcanzaban el 1 %, mientras que el promedio de los países emergentes era del 6 %.

Sin lugar a duda, la ausencia de mayor intervención del Estado para mitigar las consecuencias de esta pandemia está relacionada directamente con una insuficiente capacidad estatal del gasto público que ha tenido que ser orientado a atacar las necesidades primarias de salud. Por ello, en la coyuntura actual, es de vital importancia para el desarrollo y crecimiento económico, la construcción de un Estado fuerte, que debe partir de contar con más recursos fiscales, con instituciones eficientes y transparentes; por supuesto tarea difícil en un México herido que no cree en nada por las pésimas experiencias que se han vivido.


También te puede interesar: Prioridades de “las prioridades” de una Agenda Legislativa.

Cuando ellos despertaron… todo seguía siendo política

Lectura: 3 minutos

#CuandoDespertaron

Había una vez un dirigente de un partido quien, mientras dormía, soñaba que le habían encomendado ganar una elección a como diera lugar. Al tratarse del partido que detentaba el poder, este dirigente recibía órdenes de sus superiores. No procedía solo y su margen de decisión era, por no decir poco, casi nulo. Pero eso iba a cambiar, en los sueños, todo era posible.

Mientras soñaba, el dirigente revisaba los perfiles de los precandidatos y encontró que, en un estado del sur de país, uno de los precandidatos había sido acusado por violación. Su indignación era total.

—¡Cómo era posible que siquiera pudiera registrarse como precandidato una persona acusada de semejante delito!, pensaba el dirigente.

Seguía su sueño y se veía como todo un super héroe (con capa y toda la cosa) y que, levantando el vuelo cual superman, llegaba al palacio de su superior y le informaba sobre su hallazgo. Su superior, indignado, le ordenaba que por ningún motivo permitiera que ese precandidato siquiera participara en la elección interna. Había muchas personas valiosas en ese estado que perfectamente podrían ser los candidatos, sin esa sombra de duda que aquejaba al precandidato mencionado. Reconfortado, el dirigente voló de regreso y rápidamente anunció a todo lo largo y ancho del país, que retiraban a ese precandidato y que, si quería ir a la contienda, no lo haría arropado por su partido. La ovación no se hizo esperar, sobre todo la de las mujeres de ese estado del sur del país quienes, agraviadas, se sentían liberadas de no tener la posibilidad de que su gobernante fuera un violador.

El dirigente despertó de su sueño y estaba muy contento, se sentía reconfortado; pero unos momentos después, se miró al espejo y recordó quién era. Ya no tenía la capa, ni parecía súper héroe. Recordó que el personaje violador, que veía en su sueño, no había sido detenido y que el partido que aquel dirigente encabezaba, lo arropaba. Se deprimió entonces.


Había una vez un hombre supremo quien, mientras dormía, soñaba que todo funcionaba bien en el país que gobernaba. La pobreza no existía, el desarrollo económico era impresionante y el empleo crecía de forma exponencial. La violencia e inseguridad eran cosas del pasado y su combate a la corrupción había sido tan efectivo, que ahora todas las compras de gobierno eran concursadas, informadas en el preciso momento en que se llevaban a cabo y perfectamente registradas. Este hombre supremo vio entrar, por la ventana de su palacio, a un súper héroe vestido de capa. Era el dirigente de su partido. Lo recibió con júbilo y, cuando escuchó sobre el hallazgo de aquel hombre que osó registrarse como precandidato del partido donde ellos militaban, aun siendo acusado por violación, el hombre supremo le ordenó a su dirigente que, por ningún motivo permitieran que ese precandidato siquiera participara en la elección interna.

El hombre supremo despertó de su sueño y estaba muy contento, se sentía reconfortado, después se miró al espejo y recordó quién era. Estaba convencido de que todo lo que hacía estaba bien, y que lo que había soñado era lo que estaba pasando en el país que gobernaba. Lo único que no le cuadraba del sueño era por qué le había ordenado a su dirigente que no permitiera que ese precandidato violador participara en la elección interna. Se regocijó de recordar que eso sólo lo había soñado y que efectivamente, para él, lo importante es quién pueda llegar a ganar una elección y no qué antecedentes tenga.


sueno bestia

Había una vez un candidato a un gobierno de un estado del sur de un país quien, mientras dormía, soñaba. Para él era un sueño dulce, pero para cualquiera que viera lo que soñaba, era una pesadilla. En el sueño, sometía a mujeres, las amedrentaba. Las violaba una y otra vez. Aparecían más mujeres afectadas, en la medida en que el candidato tenía más poder. Se regocijaba del poder y lo usaba para tener más mujeres sometidas, asustadas y vulnerables. Su risa era una carcajada malévola. Se sentía un animal poderoso y bufaba estruendosamente mientras las mujeres trataban de huir sin conseguirlo. Las pisoteaba, las tomaba del cuello y las engullía como un monstruo hambriento. Después, veía en su sueño cómo todo se le venía abajo, porque un super héroe llamado dirigente y su superior lo dejaban solo y no apoyaban su candidatura.

El candidato despertó de su sueño y estaba muy angustiado, su corazón palpitaba aceleradamente y sudaba.

—“¡Cómo es posible que me quitaran mi candidatura!”, pensaba.

Se miró al espejo y recordó quién era. Se sintió tranquilo y en paz, seguía siendo candidato y sus sueños se harían realidad. Por lo menos eso pensaba él.


También te puede interesar: El Sistema Educativo es la primera clave para desarrollar a un país.

¿Anécdotas?

Lectura: 3 minutos

La seguridad personal e institucional de cualquier jefe de Estado o de gobierno en cualquier país es un asunto de seguridad nacional, llámese como se llame y pertenezca al partido político que pertenezca.

En México, el presidente de la República es constitucionalmente el jefe de Estado y de gobierno (además, jefe del partido oficial, según la vigente práctica priista). Su seguridad personal es de vital importancia para el país, sin duda alguna.

La semana pasada ocurrieron dos hechos lamentables (peor aún si, como creen muchos, fueron montajes gubernamentales): los insultos contra el presidente la de República al término de un vuelo comercial por un grupo de pasajeros que compartieron con él ese avión (domingo 28 de febrero), y la irrupción de un ciudadano (condenado como delincuente dos veces, según la historia oficial) hasta llegar al atril donde el presidente de la República dictaba su conferencia mañanera, violando todos los dispositivos de seguridad de Palacio Nacional.

burla filtro de seguridad
Imagen: Sin embargo.

De ser reales tales incidentes, si no se trata de montajes en busca de popularidad o de desviar la atención sobre otros problemas nacionales, los mexicanos tienen un motivo más por qué preocuparse: ¿cuáles serían las implicaciones para el país y los ciudadanos en el hipotético caso (nunca deseable, por supuesto) de que el presidente de la República sufriese un atentado contra su vida? (Ojo, que no se mal interprete: nadie lo está deseando, al contrario).

Desde el fin de la Revolución mexicana y, sobre todo, de la vigencia de la Constitución de 1917 ningún presidente de la República mexicana ha muerto durante el ejercicio de sus funciones. En 1928, hace casi 93 años, Álvaro Obregón fue asesinado cuando era presidente electo, no en funciones, después de haber conseguido su reelección.

Lo más cercano a una crisis política, económica y social de México por la muerte de un líder político nacional ocurrió hace 25 años con el asesinato de Luis Donaldo Colosio, candidato del PRI a la presidencia de la República, en la época que llegar a esa candidatura era pase automático (explicación para los nacidos a partir de 1980-90) a la silla presidencial. Hay quienes creen que todavía el país sufre efectos de ese crimen, que no magnicidio.

colosio anecdotas
Luis Donaldo Colosio Murrieta, político y economista mexicano (Imagen: Capital México).

Por eso es prioritaria, en exceso si se quiere, la seguridad personal e institucional del presidente de la República de México, llámese como se llame, pertenezca al partido político que sea, estemos de acuerdo o no con su gobierno y con sus políticas públicas. Nos parezca adorable o despreciable, allá cada quien.

Un gobierno responsable debería ya haber informado cómo fue posible que se hayan violado todos los filtros de seguridad en torno al presidente, revisarlos, corregirlos e inclusive sancionar a los responsables, si los hay, de esa falla. No sólo estuvo en riesgo la integridad personal del titular de Poder Ejecutivo, sino la integridad de la máxima institucional mexica, la presidencia de la República, aunque su titular no crea en las instituciones. Las consecuencias pudieron haber sido fatales tanto para la persona como para el país. No es una anécdota.

Debe preocupar también el que haya ciudadanos que crean y sostengan públicamente que los dos incidentes citados sean escenas montadas (con miembros de Ejército, según esas versiones) partes de una campaña mediática para incrementar o mantener la popularidad del presidente de la República. Esto demuestra que tanto el titular de la presidencia como la institución están perdiendo credibilidad en algún sector social. Y ello también es grave, igual para el Ejército. Tampoco es una anécdota.


También te puede interesar: Una Oración.

La epidemia de la falsedad

Lectura: 4 minutos

Es entendible que ante una situación tan inusitada como la de la pandemia actual, sea difícil comunicar en todo momento información precisa que le permita entender a la sociedad lo que ocurre. La complejidad de un fenómeno como el que nos ha tocado vivir en el último año, ha supuesto un reto gigante, no sólo para los gobernantes, sino incluso para los médicos y científicos que se han enfrentado a una realidad en constante cambio. Sin embargo, aquellos gobiernos que han preferido escuchar a quienes están más capacitados para saber, han tenido mejores resultados que quienes han preferido el discurso fácil, la propaganda y la falsedad.

En el libro tres de La República de Platón, Sócrates le pregunta a su interlocutor si no será necesario que, en aras de fomentar la lealtad y devoción de los guardias a su ciudad, se les eduque desde pequeños partiendo de algún mito que asegure lo anterior. En otras palabras, Sócrates plantea que el bien de la ciudad, a veces requiere que la verdad permanezca de cierta manera velada, de tal suerte que la armonía y estabilidad de las estructuras que la sustentan, no se vean comprometidas. Es de este pasaje del que surge la famosa idea de la “mentira noble” que, para algunos, prueba que la concepción platónica de la política, a pesar de su supuesta promoción de la búsqueda de la verdad como la base de la vida buena, necesita de cierta habilidad del gobernante para echar mano del engaño cuando el bienestar general lo requiera.

Supera al alcance de esta columna argumentar detalladamente que, en realidad, el compromiso de Platón con la verdad es un compromiso inequívoco si se ve este segmento en el conjunto de la obra del autor griego. Sin embargo, cabe decir, que incluso en el ejemplo de la mentira noble, existe una condición que precede a dicha acción para que esta sea válida o deseable: el gobernante siempre tiene un compromiso sólido con la verdad, y ante todo, ve por el bien de la sociedad a su cargo (de toda). Es decir, el supuesto recurso del engaño o subterfugio nunca se justifica en función del interés personal de quien gobierna: más bien, hace alusión a una especie de prudencia que permita a la sociedad alcanzar su bien, incluso cuando ésta no sea capaz de comprender la realidad en su totalidad.

gobernadores covid
Imagen: R. Sasikumar.

Este fragmento, que en sí es parte de un trabajo que tiene un carácter más utópico sobre cómo ha de organizarse una ciudad para garantizar la vida buena de sus habitantes, nos muestra que la cuestión de la relación que debe existir entre verdad y política, siempre ha sido una relación complicada. Y dicha complicación podríamos decir que surge de la natural dificultad que conlleva, por un lado, conocer la verdad de las cosas y, por otro, comunicar adecuadamente dicha verdad a las demás personas. Sin embargo, no todo es complejo de la misma manera: hoy en día, con el avance de la ciencia y la tecnología, tenemos una posibilidad más real de comprender ciertos fenómenos, cuando dichos fenómenos pueden ser explicados con base en datos y conocimientos técnicos.

La pandemia del Covid-19 ha puesto a prueba el compromiso que los gobiernos tienen con la verdad. En este caso, la verdad sobre el Covid, si bien compleja, puede ser comprendida cada vez más si se deja a los especialistas hablar por sí mismos. Es por esto que, en una situación como la actual, no tiene nada de prudente decir que se “está aplanando la curva”, cuando los contagios van en aumento; o que el uso del cubrebocas “depende de cada quien”, cuando cada vez hay más evidencia de que ese instrumento sí contribuye a reducir de manera considerable los contagios.

Para algunos gobiernos –el de este país incluido–, parecería que el manejo de la pandemia se ha dado en función de no contradecir determinados discursos, incluso cuando ello se contrapone al consenso científico sobre el comportamiento del virus. En el caso de México, quien ha estado al frente de los esfuerzos por contener la enfermedad –alguien que, en teoría, debería tener un compromiso inequívoco con la ciencia–, ha preferido acomodar constantemente los datos a la narrativa de la cabeza del gobierno.

pandemia falsedad
Imagen: GettyImages.

Es comprensible que haya cosas que deban permanecer prudentemente salvaguardadas por cuestiones de seguridad o algún otro tipo de consideraciones –en un caso de guerra, por ejemplo, si se revela toda la información que se tiene, se arriesga a que el enemigo la aproveche–. Es también comprensible buscar que se tenga una visión optimista, pero ello no a costa de la realidad. Nada tiene de noble la falta de transparencia, y en este caso, lo único que genera la mentira es sufrimiento y dolor, que, al menos hasta cierto punto, pudo haber sido menor.

En su momento, el ahora expresidente de Estados Unidos, buscó también acallar la voz de quien, por su preparación técnica, estaba autorizado para establecer una política de contención sensible y basada en lo que se sabía. No fue sino hasta la salida de Trump que la visión del Dr. Fauci, alguien ampliamente respetado por su prestigio intelectual, empezó a ser nuevamente tomado en cuenta; algo que en definitiva ha contribuido a los resultados alentadores que hemos visto en las semanas recientes. Y es que está claro que, cuando se habla con claridad y con conocimiento de causa, la gente responde y los prospectos de éxito se multiplican: así lo muestran otros esfuerzos como el que encabeza la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern.

La verdad es algo a lo que no debemos renunciar cuando escogemos a quienes nos gobiernan. La debemos exigir. A la hora de decidir, analicemos quienes, durante esta pandemia, han preferido poner su proyecto personal por encima del bien de las personas: por encima de la realidad. En los dos casos que mencionábamos, quienes han tenido la responsabilidad de liderar, no velaron una verdad porque pudiera ser imprudente; la velaron, más bien, porque pensaron que la falsedad convenía más a su proyecto. En las democracias, las decisiones, en última instancia, las toma el pueblo: pero el pueblo pierde autoridad cuando sus líderes tienen una relación comprometida con la verdad.


También te puede interesar: 2021: Lo que nos toca a nosotros

Invisibilización, discriminación y descalificación: retos de una mujer en la política

Lectura: 5 minutos

Es el momento de la toma de fotografía de los miembros de un partido político. Los hombres son mayoría y no basta con eso, buscan tapar a sus compañeras para prohibirles gran protagonismo en la escena. Desde actos tan pequeños como ese, hasta difamación y descalificaciones de capacidad son los retos que una mujer como Estefanía Navarrete Reyes tienen que superar en la política mexicana

Estefanía Navarrete Reyes, odontóloga de profesión y activista de corazón, es aspirante a precandidata al séptimo distrito de la alcaldía Gustavo A. Madero por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena). Su sueño de llegar a una Diputación Federal reside en que quiere representar a grupos vulnerables ante la ley, especialmente a las mujeres de la Ciudad de México (CDMX)

En entrevista para El Semanario, Navarrete se definió como madre, hermana, hija, profesionista, feminista y amante de la política desde su naciomiento. No obstante, su papel en la esfera pública del país se ha visto obstaculizada por retos propios de un país “patriarcal y machista” como México. 

A lo largo de los cinco años que lleva en Morena, la aspirante a precandidata ha tenido la fuerza y convicción para saltar las barreras que la poca perspectiva de género deja. En este sentido, expresó que es víctima de discriminación y descrédito al grado de que sus compañeros han puesto en duda su capacidad por el simple hecho de ser mujer. 

Estefanía compartió que en su trayectoria, algunos políticos han expresado que únicamente por “ser mujer” es incapaz de realizar alguna actividad de importancia. Incluso, manifestó que ha sufrido señalamientos que vinculan su posición con falsas relaciones socioafectivas. Pese a ello, ella aseguró que quiere seguir en la batalla. 

“Un compañero me quiere hacer a un lado. Fue una de mis grandes motivaciones y dije ‘me va a soñar, va a tener pesadillas, pero aquí me voy a quedar’”, dijo la morenista.

Y es que efectivamente, de acuerdo con una encuesta realizada por los Institutos Electoral de la Ciudad de México (IECM), Nacional Electoral (INE) y la Red de Apoyo a Mujeres Municipalistas A.C., en el proceso electoral 2017-2018, 33.9 por ciento de las candidatas a Diputaciones Federales sufrieron violencia verbal. Asimismo, 25.2 por ciento recibieron agresiones simbólicas y 25.2 por ciento, económicas. 

Pese a los retos que por razones de género experimentan, Navarrete Reyes aseguró que las mujeres tendrán un papel de suma importancia para las elecciones del 6 de junio. Puso de manifiesto que las candidatas serán quienes den la cara por las exigencias de todo el género. 

Estefanía Navarrete. Fuente: Especial.

4T será feminista o no será: Navarrete Reyes

Para Navarrete Reyes, la Cuarta Transformación necesita ser feminista si busca un verdadero cambio. Agregó que como un movimiento de izquierda tiene la obligación de recoger las necesidades de todos los grupos poblacionales. 

La odontóloga manifestó que la construcción de una sociedad con equidad de género será un proceso largo. Esto, sobre todo debido a que México se encuentra regido por un sistema tanto patriarcal como machista y, por ende, a muchos de sus compañeros y autoridades les ha costado trabajo comprender que el movimiento feminista tiene que ser consolidado. 

“Esta Cuarta Transformación que viene de la izquierda tiene que ser feminista, porque si no es feminista, entonces no va hacer”, expresó la política. 

Según el testimonio de la aspirante a ocupar un lugar en el Congreso de la Unión, con la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador se han tenido algunos avances en materia de género. Argumentó que en sexenios anteriores se omitió hablar de temas de gran relevancia como la legalización del aborto. 

Asimismo, comentó que aunque el primer mandatario no maneje un discurso feminista, sí ha colocado a mujeres en puestos de alto nivel. En este sentido, resaltó a Olga Sánchez Cordero en la Secretaría de Gobernación (Segob) o Tatiana Clouthier Carrillo en Economía. 

Estefanía Navarrete. Fuente:Facebook

Salud preventiva y con perspectiva de género: apuesta de Navarrete

De cara a una ciudad insegura y poco accesible, Navarrete Reyes apuntó que de llegar a la Cámara de Diputados, tendría una agenda basada en cuatro ejes: juventud, la lucha a favor de las niñas y mujeres, el derecho a la salud digna y el apoyo a los comerciantes. 

Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en México mueren alrededor de 10 mujeres por razones de género, al día. Al respecto, Estefanía explicó que aunque también hay hombres asesinados, las causas son totalmente distintas.

“Los feminicidios ocurren porque somos mujeres. Esto nos lleva a pensar en que tenemos que hacer algo, trascender, no podemos quedarnos el discurso, tenemos que trascender a las acciones”, dijo la morenista.

Con un pañuelo de color verde en su muñeca, la odontóloga expresó la urgencia de legalizar el aborto a nivel nacional. Explicó que fuera de la Ciudad de México y Oaxaca -entidades donde ya está permitido- las mujeres de bajos recursos recurren a lugares clandestinos que atentan contra su vida.

Otra de las propuestas de Navarrete, consiste en la creación de una red de mujeres a nivel nacional. Hasta el momento, ella encabeza una agrupación dentro de la alcaldía Gustavo A. Madero y dados los resultados que ha tenido, señaló que es un proyecto que debería hacerse en grande. 

Reyes comentó que en ocasiones, las mujeres tienen más confianza de contar sus problemas entre ellas mismas. Por ende, resaltó que es necesario construir redes donde se informe, impartan talleres con perspectiva de género y se sensibilice a la población.

En su experiencia, la actual red que maneja a nivel alcaldía ha tenido grandes resultados. Esto, sobre todo porque las mujeres que han acudido a las actividades, salen de su rutina y terminan empoderadas.

En cuanto a la salud, la entrevistada resaltó que requiere ser abordada con perspectiva de género. Agregó que existen enfermedades que las niñas y mujeres son más propensas a padecer únicamente por factores biológicos, pero que a final de cuentas son prevenibles.

“Si tenemos un buen programa de salud, podemos prevenir esas enfermedades y disminuirlas. Por ejemplo la osteoporosis, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y una de ellas que es la principal, el cáncer de mama”, agregó Estefanía.

Efectivamente, con base en datos brindados por el Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIB), en México fallecen alrededor de 12 mujeres por cáncer de mama al día. En este sentido, representa la primera causa de muerte en el género.

No obstante, eso de la prevención aplica realmente para hombres y mujeres. Para Estefanía Navarrete, lo que México requiere es un sistema de salud basado en acciones preventivas y no en reactivas.

La aspirante a precandidata recordó que un alto número de personas que han perdido la vida por COVID-19, padecían diabetes, hipertensión u obesidad. En este sentido, puso de manifiesto que con una mejor cultura alimenticia y de actividad física, las cosas podrían ser mejores. 

Bajo estos argumentos, la odontóloga, activista y feminista señaló que si llegase a la Cámara Baja dejaría su huella en defensa de los sectores más vulnerables: los jóvenes con entornos complejos para salir adelante, los comerciantes del sector informal y por supuesto, las niñas y mujeres que necesitan ser escuchadas.

Estefanía Navarrete. Fuente: Facebook

La vida de los que se fueron y no estarán, las preocupantes cifras de seguridad

Lectura: 6 minutos

La vida en nuestro país parece haber perdido su valor los últimos 20 años, de acuerdo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en México han sido víctimas de homicidio doloso y feminicidio 176 mil 891 personas de 2015 a 2020,

Previo al inicio del sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el Plan Nacional de Paz y Seguridad con el que proponía pacificar al país enfocándose en ocho ejes fundamentales

Si bien es cierto hasta 2018 se vivió un aumento exponencial en las cifras de homicidio doloso y feminicidio, estas no han decrecido de forma sostenida en los últimos dos años, entre 2019 y 2020 hay en promedio cerca de 3 mil víctimas de estos delitos por mes.

En entrevista para El Semanario, Paul Frissard, quien es Coordinador de investigación y políticas públicas en México Unido Contra la Delincuencia (MUCD), comenta que las cifras de estos delitos se han estancado en los niveles más altos en los últimos 40 años de la historia en México

¨Es cierto que esas cifras no aumentan a las velocidades en las que estaban hasta 2018, tuvimos un aumento de las cifras exponencial, desde mediados de 2018 se están estancando en los niveles más altos, al menos, en los últimos 30 o 40 años de la historia mexicana¨, explicó Paul.

Aumento en la militarización sin resultados positivos 

La vida de los que se fueron y no estarán, una alarma a las preocupantes cifras de seguridad
Fotografía: AFP

En el octavo eje presentado en el Plan Nacional de Paz y Seguridad, se plantea la ¨Seguridad pública, seguridad nacional y paz¨ y en ese punto se detalla un subtema ¨Repensar la seguridad nacional y reorientar a las Fuerzas Armadas¨.

El documento apunta que las Fuerzas Armadas deberán de participar en la ¨construcción de la paz por medio de un papel protagónico en la formación, estructuración y capacitación de la Guardia Nacional¨.

Pero este objetivo está muy lejos de alcanzarse, de hecho, se ha vuelto contraproducente ya que esto ha dado pie a que se militarice más el país y se le otorgue facultades a las Fuerzas Armadas que están en contra de su doctrina militar. 

¨No ha habido una reorientación de las fuerzas armadas en materia de seguridad pública, de lo contrario ha habido un incremento del despliegue territorial de las fuerzas armadas, de su participación en tareas de seguridad pública ¨, argumentó Paul.

La vida de los que se fueron y no estarán, una alarma a las preocupantes cifras de seguridad

Fotografía: Spencer Platt/Getty Images

Desde la declaración de guerra al crimen organizado por parte del presidente Felipe Calderón, la presencia de los militares, en lugar de disminuir, ha aumentado y esta facultad de inferir en la seguridad pública contrasta con la vinculación que tiene un militar con la población.

¨En esta propuesta de reorientar las fuerzas armadas porque tenemos que decirle desde el ´Calderonato´ ha aumentado el despliegue territorial de las fuerzas armadas … todo eso no ha disminuido en la administración actual, de lo contrario ha aumentado ¨, sostuvo el politólogo. 

Esta militarización del país es contraproducente en sectores donde se vive al margen del Estado, ya que, su única relación directa con este viene dada por la injerencia violenta de los militares, lo que produce desconfianza a estas fuerzas del Estado. 

Los feminicidios, un país inconsistente en su tipificación 

La vida de los que se fueron y no estarán, una alarma a las preocupantes cifras de seguridad
Fotografía: ADN40

En las cifras de víctimas de fuero común no existía el feminicidio, fue hasta 2014 que este delito fue anexado al Código Penal Federal y empezamos a conocer los alarmantes números de feminicidios que ocurren en el país

Entre 2015 y 2020 hubo 4 mil 688 mujeres víctimas de feminicidio de acuerdo con las cifras oficiales, lo que significa que en promedio asesinan en México a más de 780 mujeres por año

A pesar de que en el Código Penal Federal está bastante claro los criterios para identificar un delito como feminicidio, en la práctica existe una inconsistencia por parte del sistema jurídico en México al momento de tipificar los feminicidios

Paul expone que, aunque en la en la legislación los criterios estén bastante claros, en la realidad existe mucha dificultad por parte del Ministerio Público en la interpretación de estos.

¨En MUCD, analizamos los homicidios dolosos y feminicidios en conjunto porque vemos una diferencia muy grande entre estados para tipificar y después clasificar estos delitos¨, explica Paul.

La vida de los que se fueron y no estarán, una alarma a las preocupantes cifras de seguridad

Fotografía: Psicología-Online

El politólogo da un ejemplo de estas diferencias diciendo que se puede tener un asesinato de mujer con exactamente las mismas características en dos estados diferentes, y en cada uno se tipifica de forma diferente.

Paul resalta la importancia de un trabajo profundo en perspectiva de género a los operadores del sistema de justicia y que esto exista en los procesos de investigación para no caer en la revictimización que busca culpar a la víctima por haber sido víctima

¨No solamente tiene que ver el hecho de tipificar adecuadamente el delito o no, tiene que ver más con que durante todo el proceso haya esta perspectiva de género que incluya procesos de no revictimizacion¨

Sin entender el problema no podremos avanzar

México asesinatos
Fotografía: Getty Images

El problema de la violencia, no sólo en México, sino en diferentes latitudes no depende de una sola variable, es, de hecho, multifactorial. Entendiendo esto podremos abrir el panorama para identificar porqué se produce violencia en determinados sectores. 

¨Uno de los factores que apuntan los estudiosos de la criminología sobre qué son las dinámicas que desatan la violencia sí reconocen una participación de la marginación de las personas en condiciones laborales, marginación en desarrollo social¨, explica el miembro de MUCD. 

Apunta, en este sentido, a los niveles de participación de los actores públicos del país y cómo sus enfoques del problema afectan en atacar lo profundo del mismo.

¨En la narrativa de los gobiernos existe el discurso de que la violencia en México es asunto, principalmente, de bandas o grupos criminales que se enfrentan entre sí¨, dijo. 

Esta narrativa por parte de los gobiernos se vuelve cómoda porque intentan eximirse de sus responsabilidades como autoridad en este ámbito la cual es prevenir la violencia y transfieren la responsabilidad, desde una visión maniquea, a unas personas que pertenecen al mal

El politólogo señala la importancia de abordar la problemática desde el punto de vista local y no general, porque los contextos en cada zona del país son muy diferentes 

¨Estas dinámicas tienen que ser entendidas desde un punto de vista súper local, puede que un contexto en la región de la montaña de guerrero sea muy distinto de lo que está pasando en el Bajío, sí necesitamos plantear, terminar de entender mucho mejor que es lo que está pasando en cada contexto especifico¨, expuso.

La famosa cifra negra, las víctimas que no son cifras oficiales 

México asesinatos
Fotografía: Getty Images

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) realizada por el Inegi, la cifra negra se estimó en 93,2% lo que significa que sólo al 6,8% de los delitos del fuero común reportados se les inició una carpeta de investigación 

Lo preocupante en este dato es que la tendencia, de 2015 a la fecha, se mantiene por encima del 92%, lo que nos pone a analizar el contexto en que nos encontramos donde existe una desconfianza de la población hacia las instituciones encargadas de procurar justicia.  

¨Las cifras oficiales son el conteo de las investigaciones iniciadas en agencias del Ministerio Público, que quiere decir esto, que si no hay investigación por parte del MP simplemente no aparece la cifra¨

Esto complica enormemente la labor para identificar sí hubo o no una disminución en la incidencia delictiva o simplemente disminuyó la denuncia del delito, pero este sigue ocurriendo

De acuerdo con México Evalúa el 63,2% de las víctimas en todo el país en 2019, aseguraron no haber hecho sus respectivas denuncias por causas atribuibles a las autoridades de justicia donde destaca ¨la pérdida de tiempo¨

No podríamos ver mejorías en las estadísticas de delitos de fuero común en nuestro país hasta cuando no se regrese esa confianza desde las autoridades hacia la población que los haga sentirse seguros y atendidos.

Good Riddance, Loser!

Lectura: 4 minutos

El filósofo y empresario francés Christophe Clavé publicó un texto que a la luz de los recientes acontecimientos en la Banana Republic al norte del Bravo me parece interesante compartir con los lectores.

Francamente, analizar los dislates de Trump es tarea semejante a la disección de una rana: a nadie le gusta y a nadie le importa. Pero si esto es así, ¿de dónde diablos los ríos de tinta, los bosques de papel y los millones de locuciones que la comentocracia y la(s) clase(s) política(s) derramaron por doquier en el fallido intento por explicar(se) al 45º presidente gringo que hoy gruñe con la cola entre las patas en Mar-a-Lago?

La reflexión de Clavé sugiere lo que pudiera ser parte de la explicación.

Todas las evidencias apuntan a que Donald John Trump es un gargantúa sociópata-egomaniaco que representa a la mitad de los gringos. Creo que a un llamado suyo batallones de Proud Boys, Pledge Keepers y de los ridículos –si no fueran tan peligrosos– QAnoners se abalanzarían sobre México para limpiarnos de comunistas, violadores, ladrones y demás fauna nociva para la democracia.

democracia
Imagen: Tasto Kastopolis.

QAnon es una piara de gringos adoradores de Satán que postula la existencia de un Estado profundo gobernado por una camarilla de políticos pedófilos e infanticidas que extraen de los órganos de las criaturas sustancias para prolongarse la vida. Para los QAnonitas, Donald Trump es el Mesías puesto en el mundo para terminar con esa conjura.

Los seguidores de QAnon sostienen que Hillary Clinton, Barack Obama, George Soros, Oprah Winfrey, Tom Hanks, Ellen DeGeneres, el papa Francisco y el Dalai Lama, entre una lista más larga que la Cuaresma, lideran el Estado profundo. A la fecha no han aparecido nombres de mexicanos, aunque imagino a varios candidatos de entre los conservadores de nuestro pasado reaccionario.

Según estos donaldzombies, los conjurados celebraban sus cónclaves en el sótano de una pizzería cercana al Capitolio en Washington. Atormentado por el peligro a los niños y la amenaza al American way of life, un mentecato llamado Edgar Maddison Welch se armó con pistolas y rifles y asaltó la pizzería para fusilar a los conspiradores. Ya en el establecimiento, se dio cuenta de que el negocio no tiene sótano. Se entregó a la policía.

¡Hágame usted el refavor carbón!

Y mientras esa caterva de patriotas se organizaba para la segunda guerra civil y llevar al cadalso y al garrote a cuanto demócrata cruzara su camino, Donald se la pasó hipnotizado por Fox News, The Hustler y USA Today. Hoy me queda claro que al formular su acertada y profunda tesis, Jesús Hernández Toyo no tenía en mente sólo a los políticos mexicanos: “La política apendeja a los inteligentes y enloquece a los pendejos”.

politica trump
Imagen: NBC News.

Esta sentencia orgullosamente mexicana es la herramienta analítica para entender la estrepitosa caída de la Casa Trump.

Así, la reflexión de Clavé hace más sentido. Por favor, en donde el filósofo se refiere al mundo, piense en Estados Unidos. Yo inserto mis propios comentarios.

“El coeficiente intelectual medio de la población mundial, que desde la posguerra hasta finales de los años 90 siempre había aumentado, ha ido disminuyendo en las dos últimas décadas…

“Esto es una inversión del efecto Flynn. Parece que el nivel de inteligencia medido por pruebas está disminuyendo en los países más desarrollados. Puede haber muchas causas de este fenómeno. Uno de ellos podría ser el empobrecimiento del lenguaje [analicemos los discursos de Donald]. De hecho, diversos estudios demuestran la disminución del conocimiento léxico y el empobrecimiento del idioma: no sólo se trata de la reducción del vocabulario utilizado, sino también de las sutilezas lingüísticas que permiten elaborar y formular un pensamiento complejo. La desaparición gradual de los tiempos (subjuntivo, imperfecto, formas compuestas del futuro, participio del pasado) da lugar a un pensamiento casi siempre en tiempo presente, limitado al momento: incapaz de proyecciones en el tiempo [hay que escuchar las conversaciones de los rufianes en el interior del Capitolio]. La simplificación de los tutoriales, la desaparición de las mayúsculas y la puntuación son ejemplos de “golpes fatales” a la precisión y variedad de la expresión. Sólo un ejemplo: eliminar la palabra “señorita” (ya obsoleta) no sólo significa renunciar a la estética de una palabra, sino también promover sin querer la idea de que no hay etapas intermedias entre una chica y una mujer [nueve de cada diez entre la turba no terminó la secundaria].

toma de capitolio
Imagen: E. Marlac.

“Menos palabras y menos verbos conjugados implican menos capacidad de expresar emociones y menos capacidad de procesar el pensamiento. Los estudios han demostrado cómo parte de la violencia en las esferas públicas y privadas proviene directamente de la incapacidad de describir las propias emociones a través de palabras. Sin palabras para construir el razonamiento, el pensamiento complejo se hace imposible [de nuevo los discursos de Trump y las consignas de su muchedumbre]. Cuanto más pobre es el lenguaje, más desaparece el pensamiento. La historia está llena de ejemplos y muchos libros (George Orwell1984; Ray BradburyFahrenheit 451) han contado cómo todos los regímenes totalitarios siempre han obstaculizado el pensamiento, a través de la reducción del número y el significado de las palabras [toda alusión a Fox News no es coincidencia]. Si no hay pensamientos, no hay pensamientos críticos. Y no hay pensamiento sin palabras.

¿Cómo se puede construir un pensamiento hipotético-deductivo sin el condicional? ¿Cómo es posible considerar el futuro sin una conjugación de tiempo futuro? ¿Cómo es posible capturar una temporalidad, una sucesión de elementos en el tiempo, ya sean pasados o futuros, y su duración relativa, sin un lenguaje que distinga entre lo que podría haber sido, lo que ha sido, lo que es, lo que podría ser, y lo que será después de que lo que podría haber sucedido, haya sucedido realmente?”

Good riddance, loser!

Juego de ojos.

También te puede interesar: La primera televisora mexicana.

Adiós Presidente. No lo vamos a extrañar

Lectura: 3 minutos

 #AdiosPresidente

“Querido Presidente:

Ha sido usted un mentiroso durante todo su mandato. No ha pensado más que en usted mismo y no tiene la capacidad de escuchar a los demás. Cada vez que ha tenido oportunidad de hablar en público (cosa que le encanta) se encarga de denostar a políticos adversarios, a medios de comunicación e incluso a otros países, para ponerse en posición de víctima y denunciar que hay una campaña en su contra.

Usted, señor Presidente, vive en otra realidad. En esa del soberbio, del que cree siempre tener la razón y en donde no hay posibilidad de diálogo. Es un populista que ha degradado la imagen de nuestra nación en todo el planeta.

La polarización en nuestro país nunca había alcanzado los niveles que hoy vemos. El encono y el rencor se han alimentado todo este tiempo por sus discursos que no construyen nada, sólo destruyen e inquietan a propios y extraños.

Usted ha gobernado a través de sus declaraciones, no ha habido logros gubernamentales importantes, pura verborrea. No dejará ningún legado, pasará a la historia como el peor Presidente.

Siempre alega que la democracia sólo ha beneficiado a una minoría poderosa y abusiva. Critica a un sistema que, aunque paradójico, le ha dado todo lo que tiene.

Usted llegó y se hizo del poder público por capricho. Aprovechó que la sociedad creía que no se podría estar peor; harta del establishment que había prevalecido durante tantas décadas. ¡Qué equivocados estábamos! Con sus cosas buenas y malas, por lo menos ese establishment había construido en este país tantas cosas que usted quiso destruir en tan poco tiempo.

Un grupo minoritario se ha cegado con lo que usted dice y su discurso los ha vuelto fanáticos. A tal grado que tomaron las calles y el Congreso. Sus gritos de odio provienen del engaño mayúsculo del que han sido víctimas. Porque usted, señor Presidente, no tiene escrúpulos. Puede mentirle al de enfrente, en su cara y sin el menor pudor, y decir lo que quiera; porque usted, por el simple hecho de ser Presidente, cree que tiene el derecho de hacer lo que le venga en gana. No entiende que este país luchó por crear instituciones que precisamente le crearan contrapesos a su figura y que eso se hizo con el fin de que ningún Presidente volviera siquiera a contemplar cualquier conducta autoritaria y represiva, como usted seguro visualizó.

Sobre el coronavirus, ¿qué le digo? La torpeza con la que se atacó la pandemia es sólo proporcional al número de contagiados y de muertos que hay en nuestro país. ¡Un desastre colosal! Esperemos que con el plan de vacunación se remedie.

La democracia es la columna vertebral en este país y el que usted hable de fraude en las elecciones, una y otra vez, deja claro que usted no cree en ella. Lo bueno es que el voto cuenta y es en el sufragio efectivo donde se empodera al ciudadano. Es el ciudadano quien manda y quien define a sus gobernantes. No se le olvide que usted llegó ahí por nosotros. Los mismos que lo pusimos en el cargo somos ahora su verdugo.

¿Pensaba de verdad que gobernando así iba usted a prevalecer? La gente quiere estar bien, y con usted no ha sido el caso. Se vive en tensión todo el tiempo pensando:

– “¿Con qué nueva ocurrencia nos saldrá ahora el Presidente?”

y ya nos quedó claro que, precisamente en esas ocurrencias es donde quería que el pueblo descansara y se distrajera. Quería que no nos diéramos cuenta que realmente no sabía ser Presidente y que el puesto le quedó enorme; ¿pero sabe qué, señor Presidente? Nos menospreció. Nos dimos cuenta de su engaño, nos dimos cuenta que en su gobierno no mejoramos, sólo nos enfrentamos. No somos más productivos, ni más ricos, ni más libres. No vivimos mejor y por eso se va.

Adiós, Presidente Trump, tenga la seguridad de que no lo vamos a extrañar.”

Así me imagino una carta que cualquier ciudadano norteamericano le puede estar escribiendo a Donald Trump ahora que deja el cargo.

¿Ustedes, qué se imaginan?

Buen inicio de año y mis mejores deseos para el 2021.


También te puede interesar: Mis reflexiones del año 2020 (Segunda parte).