Salud

Cerrando ciclos

Lectura: 3 minutos

El caminante espiritual. si bien sabe que la vida es un sendero que se disfruta mientras se recorre, también reconoce que su existencia es como una cadena que se va formando con los eslabones que corresponden a los diferentes eventos, situaciones y ciclos que experimenta.

Toda cadena es tan fuerte como su eslabón más débil. Por ello, es fundamental cuidar de cerrar bien cada uno de los eslabones; sin apegos, por formidables que hayan sido las personas y los momentos pasados y sin aversiones por justificados que estén esos sentimientos para construir una personalidad sólida, satisfactoria, plena y abierta para hacer de nuestra existencia una experiencia valga la pena ser vivida.

Cada uno de los eslabones que conforman la subsistencia, son parte irrenunciable de la historia de cada persona, que necesitan ser bien cerrados para poder engarzar los siguientes y hacer funcional su ser. No hay eslabones buenos ni malos, sólo son. Aun cuando se les puede clasificar como afortunados o desafortunados, ninguno de ellos es absoluto ni eterno y a todos se les puede encontrar orientaciones positivas de la misma manera que todos tienen aspectos oscuros.

cerrar un ciclo
Imagen: Brian Rea.

En efecto, todo evento, por dramático, difícil o doloroso que haya sido, tiene particularidades luminosas que empujan la vida a más y mejor. Encontrar su luz y caminar por los senderos que alumbran enriquece y fortalece la vida. De igual forma, toda situación por bella, satisfactoria o gozosa que se haya experimentado tiene matices oscuros que atrapan e impiden continuar el camino.

Reconocer las representaciones positivas de los acontecimientos experimentados como dolorosos y las perspectivas negativas de los eventos placenteros son un primer paso para fortalecer la cadena de la vida, el segundo es dejarlos donde se encuentran, en el pasado.

Cerrar cada evento implica aceptar la participación personal en el mismo, reconocer la trascendencia que tuvo en la propia vida, saber agradecer, aceptar la necesidad de perdonar y soltar para seguir el camino ligero de equipaje.

cerrar ciclos
Imagen: Sam Nagel.

Cerrar implica abrir el corazón y la propia vida a lo novedoso, con la experiencia que ha dejado el pasado, con la certeza de las propias habilidades desarrolladas, con la esperanza que cada naciente día es una nueva oportunidad para experimentar la profundidad del devenir.

Estamos al inicio del último mes del año, un año atípico para el mundo entero, que ha presentado retos, pérdidas y adaptaciones. Un año que ha sacado a la luz la verdad oculta de todos nosotros: los miedos, la rigidez, la indiferencia, la solidaridad, las fortalezas, la creatividad, el ingenio y la voluntad de persistir. Un año difícil en todos los sentidos que ha exigido de un esfuerzo mayor y que literalmente nos ha robado el aire. Pero también ha sido un año que ha permitido sacar habilidades y fortalezas ocultas en las profundidades de nuestras personas, cualidades que descansaban tranquilamente pues sus servicios no habían sido necesarios. Las hemos visto, las hemos reconocido y ahora sabemos que podemos hacer uso de ellas para continuar nuestro sendero.

Es tiempo de recapitular y asumir lo ocurrido para cerrar el eslabón del 2020 y con mayor consciencia disponernos a enfrentar el futuro que se nos avecina con la certeza y la confianza de que todo lo que necesitamos para seguir ya lo tenemos, en todo caso, sólo nos hace falta buscarlo y sacarlo a flote para continuar.


También te puede interesar: La apertura y la confianza en el camino espiritual.

Dos estados en semáforo rojo por pandemia; OMS pide seriedad a México

Lectura: 2 minutos

A pesar de que Chihuahua dejó el semáforo rojo para pasar al naranja restrictivo por la pandemia de COVID-19; Zacatecas regresó al máximo nivel de alerta y Durango se mantiene ahí también con un incremento constante.

Ante la situación del país, la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo que México debía tomarse con seriedad la pandemia.

“Cuando ambos indicadores (muertes y casos confirmados) se duplican, creo que esto es un problema bastante serio. Le pedimos a México que sea muy serio”, dijo Tedros Adhanom, director general de la OMS, en conferencia de prensa.

“El aumento en el número de casos y de muertes en México es muy preocupante”, agregó. “En la semana del 12 de octubre, las muertes fueron alrededor de 2 mil. Para la semana del 23 de noviembre, el número de muertes se duplicó a 4 mil. Creo que esto muestra que México está en una mala situación. Y cuando ves el número de casos, es lo mismo”.

Por otro lado, este lunes 30 de noviembre, el gobierno de Chihuahua anunció el cambio al semáforo naranja restrictivo, tras mantenerse por varias semanas en rojo.

Y, después de que 28 personas fallecieran el pasado fin de semana, Zacatecas declaró el regreso al semáforo rojo. A pesar de ello, los negocios no cerrarán en esta entidad, implementando una restricción de horarios para negocios no esenciales, a las 19:00 horas.

Durango también está en semáforo rojo y reporta un aumento de contagios en días recientes. Chiapas y Campeche son los únicos estados en verde, mientras que el resto del país está en amarillo y naranja. Y la Ciudad de México tiene 200 colonias en rojo.

Los datos más recientes de la Secretaría de Salud, revelan que existe 1 millón 113 mil 543 casos confirmados de COVID-19 en México. El reporte hasta el día 30 de noviembre, reveló los siguientes datos sobre el coronavirus:

  • Casos confirmados: 1 millón 113 mil 543
  • Casos activos estimados: 61 mil 631
  • Casos sospechosos: 396 mil 338
  • Defunciones: 105 mil 940
  • Defunciones con casos sospechosos: 121 mil 734
  • Negativos: 1 millón 356 mil 344

Un 38.85% de las personas que fueron estudiadas, dieron positivo a COVID-19. La tasa de mortalidad en México es de 9.51%.

¿Qué sigue después de la vacuna?

Lectura: 3 minutos

El mundo entero se encuentra expectante a la aprobación final de la vacuna contra el COVID-19. Pensamos que una vez que esto ocurra, podremos regresar a nuestra “vieja normalidad”. Para entender este tema, no hay como acudir a los expertos para tener una visión realista del problema. Por eso quiero compartirles que tuve la oportunidad de escuchar al Dr. Alejandro Madrigal, Profesor de Hematología en el Instituto de Investigación contra el Cáncer, en Londres, Reino Unido; y al Dr. Francisco Becerra, quien fue Subdirector de la Organización Panamericana de Salud, sobre su visión profesional e informada al respecto de la vida después de la vacuna contra el COVID-19.

Enorme fue mi sorpresa cuando me compartieron que una variedad de vacunas están siendo desarrolladas y al menos una decena de ellas se encuentran en fase de prueba alrededor del mundo. Descansé cuando supe que están tan avanzados y aún más cuando comentaron que la efectividad de la vacuna contra el COVID-19 será de 90% (en el caso Pfizer & BioNtech) y de 95% (en el caso de Moderna). Lo anterior, considerando que la vacuna contra la Influenza estacional, que nos aplicamos cada temporada, tiene una eficacia de entre el 40 al 60%.

desinfectarse las manos
Imagen: VYC.

Sin embargo, sostuvieron los científicos, “No es momento de celebrar; ni de ser complacientes, relajando las medidas de contención de la pandemia”. Por ejemplo, el 14 de noviembre pasado, cinco días después en que Pfizer anunciara su vacuna, se registraron 663 mil 772 nuevos casos en el mundo en un solo día.

Pero pongamos los datos en perspectiva comparada, por ejemplo, en defunciones confirmadas al 29 de noviembre México reportó un acumulado de 105 mil 459 casos oficialmente; mientras que Estados Unidos (266,063); Brasil (172,561); India (136,696); Francia (52,127); Colombia (36,401); Sudáfrica (21,439); China (4,739); y Japón (2,106). Hasta aquí, pese a estar en el 4º lugar mundial en número de defunciones, podríamos pensar que México no lo está haciendo tan mal considerando que las cifras gubernamentales equivalen a prácticamente el 40% de lo que está experimentando Estados Unidos.

tabla

Sin embargo, si ponemos estos mismos datos en defunciones por millón de habitantes, tenemos que México reportó 817 casos oficialmente; mientras que Brasil (811); Estados Unidos (803); Francia (798); Colombia (715); Sudáfrica (361); India (99); Japón (16); y China (3). En otras palabras, México lidera el número de muertes por millón de habitantes, superando a Estados Unidos en 1.74%; a Colombia (con similar cultura) en 14.2%; a Japón (con similar población) en 21%. Si a eso le agrega que, según fuentes nacionales e internacionales, la cifra gubernamental mexicana esta subestimada entre 100 y 150 por ciento. Saque usted sus conclusiones.

EN PERSPECTIVA, podemos afirmar que el panorama no es nada prometedor para México. Aún en el supuesto de contar con suficientes vacunas para los aproximadamente 130 millones de mexicanos, falta personal en los servicios sanitarios para aplicar tal cantidad, incluso en etapas, ya que la marca histórica de aplicación es de 10 millones de vacunas en un año a los mexicanos.

A ello hay que agregarle la inexistencia de una “cadena fría” confiable a lo largo y ancho del país. Porque si no estaba usted consciente, las vacunas se mantienen refrigeradas de entre -20ºC a -75ºC por un máximo de seis meses. Lo cual significa un esfuerzo enorme en inversión de infraestructura y gasto corriente para la política pública de salud de nuestro país.

¿Cómo la ve estimado lector? ¿Está México preparado para este inédito reto?


También te puede interesar: ¿Qué nos hace felices?

Científicos descubren planta tóxica contra el cáncer de mama

Lectura: 2 minutos

La naturaleza reveló nuevas propiedades para combatir el cáncer de mama. Se trata de un compuesto derivado de la planta Physalis nicandroides, una especie de la familia de las solanáceas, a la que también pertenecen el tomate, la papa, los chiles, entre otras. Esto fue revelado por un grupo de investigadores del Instituto de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), como parte de su trabajo, “Derivados de plantas y su posible aplicación contra el cáncer”.

El grupo encabezado por Daniela Araiza Olivera, investigadora del mencionado instituto, analiza moléculas sintetizadas de plantas con la capacidad de modificar el metabolismo y señalización de las células que producen distintos tipos de cáncer. En su trabajo, analizaron el efecto citotóxico de compuestos derivados a partir de la Physalis nicandroides en células tumorales de pulmón, mama, colon y células sanas de riñón. De los más de 20 derivados, fue el número nueve el que demostró su capacidad para disminuir la proliferación de células cancerígenas, sin afectar a las sanas.

“Encontramos que, de todos estos derivados, sólo la nueve, en pequeñas concentraciones, era tóxico para este tipo específico de cáncer de mama, cuya línea celular se llama MCF-7”, explicó Araiza Olivera en un comunicado de la UNAM.

La Physalis nicandroides tiene un alto contenido en vitaminas A y C, caroteno y un efecto antioxidante, capaz de disminuir el colesterol, siendo de gran utilidad también para pacientes con diabetes. Más de 50 derivados de esta planta tienen efectos citotóxicos, es decir, capacidad para matar o dañar células o tejidos, estos se conocen como withanolides y sacarosas-esteres.

“En nuestro estudio decidimos analizar los agentes quimioterapéuticos derivados de plantas”, explicó la especialista. “De hecho, desde la década de 1950 se empezaron a obtener fármacos a partir de plantas y se han ido mejorando. No obstante, siempre se buscan nuevos agentes que sean más específicos y con menores efectos secundarios”.

Otro de sus hallazgos, por medio de un análisis en modelado computacional, fue la familia de proteínas conocidas como cinasas, la cual demostró que la molécula anti-cancerígena de la Physalis nicandroides, se absorbe a nivel digestivo. Esto significa que “las pacientes lo ingerirían sin la necesidad de estar conectadas a ningún aparato”. Actualmente se encuentran estudiando más detalles sobre esta planta y cómo y por qué se producen estos efectos en este tipo de cáncer.

El cáncer de mama es el tipo más común en mujeres a nivel mundial y es la primer causa de muerte por cáncer en México. El número de víctimas ha visto un incremento entre 2010 y 2019, según datos de la Organización Mundial de la Salud. El 2019 presentó la tasa más alta con 19 casos nuevos por cada 100 mil personas mayores de 20 años. Se estima que en 2020, se cierre con 16 mil 500 casos nuevos de esta enfermedad.

Impactan 105 mil 655 decesos por la pandemia en México

Lectura: < 1 minuto

Al domingo 29 de noviembre, México suma 1 millón 107 mil 71 casos confirmados de COVID-19, según el reporte más reciente de la Secretaría de Salud. Se estima que un 38.7% de las personas estudiadas resultó en casos positivos de esta enfermedad.

A la mencionada fecha, los datos en el país son los siguientes:

  • Casos confirmados: 1 millón 107 mil 71
  • Casos activos estimados: 65 mil 470
  • Casos sospechosos: 402 mil 703
  • Defunciones: 105 mil 655
  • Defunciones con casos sospechosos: 121 mil 436
  • Negativos: 1 millón 359 mil 465

La tasa de mortalidad en México es de 9.54% y los casos han ido a la alza en el Estado de México y la Ciudad de México en las últimas semanas. A la fecha, la capital del país cuenta 17 mil 484 muertes y se estiman 18 mil 90 casos activos. Existen en esta ciudad 200 colonias en semáforo rojo, al registrar en total 2 mil 719 casos activos que, junto a los de colonias cercanas, suman el 58% de todos los casos en la Ciudad de México.

Solamente Chihuahua, Durango y Zacatecas se encuentran actualmente en semáforo rojo por COVID-19, mientras que, por otro lado, Chiapas y Campeche son los únicos en semáforo verde. El resto del país se encuentra en amarillo y naranja.

Acumula México 104 mil 242 muertes por COVID-19

Lectura: 2 minutos

El 26 de noviembre de 2020 se registraron 8 mil 107 nuevos casos de COVID-19 en México, que ya suma 104 mil 242 muertes, según el reporte más reciente de la Secretaría de Salud. Los datos se presentaron el mencionado día, a las 19:00 horas, en conferencia de prensa en el Salón de Tesorería de Palacio Nacional.

Los números muestran la suma total, hasta la semana número 46 de la pandemia y son los siguientes:

  • Casos confirmados: 1 millón 78 mil 594
  • Casos activos estimados: 60 mil 532
  • Casos sospechosos: 416 mil 312
  • Defunciones: 104 mil 242
  • Defunciones con casos sospechosos: 119 mil 933
  • Negativos: 1 millón 303 mil 494

El director general de Epidemiología, José Luis Alomía Zerraga, explicó que el porcentaje de positividad hasta ahora es de 46%. “Para efectos de números nacionales, la ocupación (hospitalaria) de camas generales es de 38%, y la ocupación (hospitalaria) de camas con ventiladores es de 31%”, señaló el especialista. “Vemos cómo todavía la tendencia, aunque con una menor pendiente y una menor velocidad que la que se veía a principios de la pandemia, aún tiene un comportamiento ascendente”.

A través de su cuenta de Twitter, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dijo que la Secretaría de Salud recibió la “solicitud de autorización” de la vacuna que desarrolló Pfizer contra esta enfermedad. Con anterioridad, el subsecretario de Prevención y Promoción de Salud, Hugo López-Gatell, había comentado sobre las dificultades de esta vacuna, que debe mantenerse en un sistema de ultracongelación, a 70 grados centígrados bajo cero, el cual no existe en “ningún país”. Sin embargo, López-Gatell también dijo que se encuentran en conversaciones con Pfizer, que podría ofrecer la tecnología necesaria para preservar la vacuna y distribuirla.

A la fecha, en el mundo se registran 61 millones 301 mil 380 casos confirmados de COVID-19, con un total de 1 millón 437 mil 629 muertes. Los países con más casos confirmados, a la fecha de los datos más recientes, son: Estados Unidos (13 millones 249 mil 447), India (9 millones 309 mil 871), Brasil (6 millones 204 mil 570), Rusia (2 millones 215 mil 533) y Francia (2 millones 183 mil 660). México se ubica en la posición número 11 de países con más casos confirmados, por debajo de Alemania y Polonia, entre otros.

Afecta pandemia salud mental, algunos piensan hasta en el suicidio

Lectura: 5 minutos

Un día simplemente te dijeron: ya no puedes salir. El “quédate en casa” se repitió hasta el cansancio, para imponer una sentencia que, de no cumplirse, podía costarte la vida. Tal vez pensaste que sería una semana o dos, pero pasaron tres, cuatro, hasta que los meses se acumularon y, en consecuencia, las pérdidas y la incertidumbre. La pandemia de COVID-19 presentó el contexto ideal para incrementar los problemas de salud mental.

Quienes ya tenían síntomas de algún padecimiento, como el estrés, insomnio o irritabilidad, terminaron por verlos crecer hacia algo mayor. Y quienes no presentaban ninguna de estas situaciones, comenzaron a desarrollarlas en el encierro. Así, la enfermedad que nos obligó a usar cubrebocas e imponer una distancia entre las personas, terminó por despegar otros malestares.

“La pandemia a lo largo de todo este tiempo, nos ha afectado de diferentes maneras”, cuenta en entrevista con El Semanario, José Javier Mendoza Velásquez, jefe del Área Médica en servicios de atención psiquiátrica de la Secretaría de Salud y académico del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Lo que más ha pasado es el incremento de lo que nosotros identificamos como trastornos ligeros o síntomas psiquiátricos, que no logran establecer un trastorno como tal, no se identifican como una enfermedad, pero que sí son síntomas, como el insomnio, la irritabilidad, el estrés, la ira”.

Circunstancias adversas

Un tamizaje realizado por la UNAM y la Secretaría de Salud, con información de 104 mil 875 personas, reveló que 26 mil 90 reportaron casos de violencia durante la pandemia, con 12 mil 408 incrementando el consumo de sustancias como alcohol y otras drogas. Este escenario va directamente relacionado con los 10 mil 799 casos de depresión y 8 mil 339 de ansiedad generalizada, lo cual también llevó a 5 mil 562 personas a autolesionarse o pensar en quitarse la vida.

No es nada fácil llevar a cabo nuestra rutina cotidiana detrás de cuatro paredes, con toda nuestra familia, teniendo que estudiar y trabajar desde ahí, o incluso luchando por sobrevivir al perder nuestros medios de ingresos. Y a esto sumémosle la posibilidad de contraer una enfermedad que puede ser mortal. Ante todo, la gran cuestión: ¿cuándo terminará? “Generalmente, cuando tenemos un problema, sabemos cuánto tiempo tenemos que aguantar, pero aquí lo único que sabíamos es que cada vez aumentaba. Ante esa situación no había una base que nos ayudara a estar un poco más tranquilos sobre esto”, explica Mendoza Velásquez.

¿Y dónde nos refugiamos de todo esto? ¿A dónde escapamos para despejar nuestra mente? En el alcohol y las drogas que no hacen más que empeorar todo. “Conforme fue aumentando (la cuarentena), fuimos estando más tiempo en contacto con el estrés, con los cambios, con las situaciones distintas que, al final del día, lo único que hacen es acumular experiencias traumáticas en el individuo y pueden aparecer otros trastornos, dentro de los cuales, los que más nos preocupan principalmente son los trastornos más estables como la depresión, el trastorno por estrés postraumático o el trastorno por estrés agudo, el consumo de sustancias y, en su caso, la aparición de otros trastornos emocionales que conducen a la violencia o suicidio”, asegura el académico de la UNAM.

Los más vulnerables

Desde que inició el confinamiento en México en marzo, hubo quienes lo sufrieron más, explica el especialista. “Va a impactar más en personas con mayor vulnerabilidad, en personas que tengan otras condiciones psicosociales importantes, como pobreza, educación, ahí las situaciones todavía son un poco más complicadas”, comenta.

Razones no faltaban para sentirse mal. “Esto todavía se podía complicar más con la vivencia del duelo, sea por la pérdida de una persona, sea por la pérdida de trabajo, sea por la necesidad de desplazarme, todas esas situaciones fueron incrementando riesgos a la salud mental. Entonces, misma historia ocurrió cuando nos ‘desconfinaron’, el volver a la realidad, el volver a salir a la calle, se convirtió todavía en episodios de mayor riesgo”, asegura Velásquez.

El especialista vio muchos casos graves, sobre todo, en el personal sanitario, quienes llegaron a padecer “burnout”, es decir, estrés crónico y extremo. Otra población vulnerable, comenta, fueron los adultos mayores. “En el contexto de la salud mental del adulto mayor, sí había una deficiencia muy notable, porque tanto al adulto mayor como al adolescente, nadie le pidió su opinión, él no participó en la toma de la decisión. Simplemente un día le dijeron, ‘tú ya no sales’ y ya no pudo salir. El adulto mayor tú lo ves así como muy ansioso, con mucha dificultad para adaptarse, enfrentar la vida, hay muchos que todavía, hasta la fecha, siguen sin salir. Y esto ha ido cambiando a lo largo del tiempo, pero hay mucha gente que todavía se mantiene en casa y esa es una situación bastante complicada”.

Contra los prejuicios

Lo importante ahora es identificar los casos graves, cuando hay síntomas que ya no nos permiten realizar actividades cotidianas, para luego romper con los prejuicios que existen contra las enfermedades mentales. “Lo que sería ideal, es echar mano de entender que estas situaciones son muy comunes, son esperadas bajo esta situación, darse el tiempo de reconocer eso”, explica el académico. “Creo que es más importante ser un poco amable con uno mismo, entender que todos lo estamos pasando mal, no es una situación única y que vale la pena pedir ayuda”.

Mendoza Velásquez explica que en esta área existen prejuicios desde el simple hecho de buscar asistencia, hasta el tomar medicamento y las enfermedades en cuestión. “Existe esta creencia de que las personas tienen que resolver sus problemas de salud mental solos y que aquel que pide ayuda es un sinónimo de algo más. Es importante entender que todos tenemos problemas en la salud y una de nuestras áreas de salud, no especial, es la salud mental”, cuenta. Lo grave está en que muchos, como él, pronostican que la depresión se convertirá en la primera causa de discapacidad en adultos en los próximos años.

salud mental
José Javier Mendoza Velásquez, jefe del Área Médica en servicios de atención psiquiátrica de la Secretaría de Salud

Para evitar problemas graves de este tipo, durante el confinamiento, la Organización Mundial de la Salud hace algunas recomendaciones: mantenerse informado por medios formales y confiables, seguir una rutina sana que incluya: buenas horas de sueño, no descuidar la higiene personal, alimentación saludable y en horarios fijos, hacer ejercicio, establecer horarios de trabajo y descanso y realizar actividades placenteras; así mismo, reducir la exposición a noticias que generen tensión y estrés, mantener contacto social a distancia con familiares y amigos, reducir o evitar el consumo de alcohol u otras drogas y moderar el tiempo que se pasa en internet y videojuegos. Si se manifiestan síntomas de algún malestar mental o crisis emocionales, se puede llamar a La Línea de la Vida del Gobierno de México: 800 911 2000, así como a la Línea de Atención Psicológica de la UNAM: 55 5025 0855; donde se imparte ayuda y se puede pedir orientación para tratar cada caso en particular.

“Lo más importante es aprender a hacer este acto de autoreflexión, de identificar cuándo yo estoy en riesgo, identificar que algunos de estos puntos probablemente puedan mejorar si nosotros movilizamos algunas cosas”, aconseja Mendoza Velásquez. “Vigilar bien su sueño, tratar de establecer adecuadamente nuestros horarios, establecer rutinas que puedan ser flexibles. Antes teníamos rutinas muy inflexibles, ahorita tenemos que aprender a flexibilizarnos un poco, aprender que no todo está escrito en piedra, saber que esto es temporal, saber que existen opciones que pueden hacer que esto termine bien. Creo que esto nos ayuda un poquito a entender que esta situación, independientemente de lo funesto que parezca, puede llevarnos a un buen resultado”.

Dos asuntos de gran relevancia en Salud

Lectura: 7 minutos

El primero, la evolución de la Covid-19 en México. El viernes pasado el señor presidente en su acostumbrada conferencia de las mañanas destacó que el manejo de la pandemia estaba siendo muy exitoso y que comparado con otros países íbamos muy bien, todo como consecuencia de una nota de El País en que se le criticaba; debido al origen del periódico, aunque ahora hay una versión mexicana, criticó e incluso hizo burla del manejo de la Covid-19 en España, todo muy a su estilo entre chanzas y veras. Al día siguiente en la conferencia vespertina, utilizada para emitir resultados del control de la epidemia, no lo hizo el subsecretario López-Gatell, se dijo que los resultados a últimas fechas eran muy buenos, que la letalidad había bajado considerablemente y que los hospitales se mantenían en rangos de ocupación que permitían la atención de los enfermos. 

Me permití hacer un ejercicio para analizar lo sucedido a últimas fechas y me encontré con datos muy interesantes y que no concuerdan con lo emitido ni por el presidente ni por la Secretaría de Salud. Revisé lo sucedido entre el 22 de octubre y el 22 de noviembre, el día más reciente en que los datos de los diferentes que tomé como muestra estaban todos disponibles en las plataformas que consulté: Datosmacro y COVID-19 Stats. En Europa enfrentan una nueva segunda ola de la enfermedad después de un par de meses en que la frecuencia había disminuido, están ante un rebrote, la mayoría de los países han podido enfrentar esta segunda etapa de una mejor manera con letalidad menor y una mortalidad por millón de habitantes probablemente menor que en la primera etapa, son excepción a esto Bélgica y la República Checa que obtienen muy malos resultados; llaman la atención los resultados obtenidos por Suecia y Noruega y aún por el Reino Unido que consiguen disminuir sus índices de letalidad y tienen un reducido número de fallecimientos.

salud en europa

En América resaltan los malos resultados en Argentina, que en el periodo de tiempo que analicé incrementó su letalidad (de 2.7% a 2.85%) y tuvo un alto número de fallecimientos, en Perú, Chile, Bolivia, Ecuador, Guatemala y Brasil los fallecimientos por millón de habitantes fueron menores que en otras áreas del continente y en la mayoría de ellos se disminuyó el índice de letalidad, cosa que no sucedió ni en Chile ni Bolivia; en Estados Unidos la letalidad disminuyó considerablemente (de 2.10 en todo el periodo a 0.88%) el número de fallecimientos por millón fue de 104. En México la letalidad se mantiene muy alta, 8.2% y existen también un elevado número de fallecimientos por millón, estos datos pueden tener dos explicaciones: una, que al no realizarse la búsqueda de casos, el número de enfermos y asintomáticos es bajo y, por lo tanto, el denominador baja y la letalidad aumenta artificialmente; la otra, es que los resultados del tratamiento en los hospitales no esté siendo la mejor, probablemente una mezcla de estos factores es lo que está sucediendo.

salud en america

Como colofón, el pasado lunes Bloomberg publicó una escala de resiliencia ante el Covid-19 entre 53 países, escogieron estos entre los que tienen economías mayores a los 200,000 millones de dólares, mide la respuesta ante la epidemia, y midieron –entre otros los casos– por 100,000 habitantes en el último mes, la tasa de letalidad en el último mes, las muertes por millón a lo largo de la pandemia, la severidad de los confinamientos que se realizaron, la proyección de crecimiento del PIB en 2020 y lo que llaman el índice de bienestar humano (expectativa de vida, acceso a la educación e ingreso per cápita). En esta clasificación México ocupa el sitio 53 de los 53 países estudiados; es probable que el sistema de evaluación no sea perfecto, pero intenta hacer una evaluación. En tanto nuestro primer mandatario sigue sin usar el cubrebocas. La esperanza es que parece que la vacunación puede estar cerca, que el gobierno mexicano, no la Secretaría de Salud, ha hecho trámites para obtenerla rápidamente y que México tiene una gran experiencia en vacunación y los éxitos son muy posibles.

El segundo asunto al que me referiré es sobre los Consejos de Certificación de especialidades médicas: estos surgen en México a imagen de lo que venía sucediendo desde antes en países como Estados Unidos y el Reino Unido, ante la necesidad de garantizar a la sociedad que los médicos que la atienden cuentan los conocimientos necesarios. La vigencia del conocimiento en medicina es breve, afortunadamente surgen con mucha frecuencia cambios que modifican los posibles resultados ante los problemas de los enfermos; desde hace años se ha fijado, quizá un poco artificialmente, en cinco años, con esto se marca que en este tiempo sufren cambios notables. Es cierto que el médico tiene como responsabilidad fundamental mantenerse vigente en los conocimientos, cuando menos, del área que maneja. Los Consejos surgen intentando colaborar en la calidad de la atención médica. En 1985 surge el primero de ellos, el Consejo Mexicano de Médicos Anatomopatólogos, a lo largo de los años 70 se establecieron la mayoría de ellos y actualmente funcionan 47; paulatinamente fueron adquiriendo prestigio y obtuvieron un lugar avalando la vigencia de los conocimientos de los médicos a los que certificaba.

A principios de los 90 el Dr. Jesús Kumate, entonces Secretario de Salud, promovió la creación de una instancia que supervisara el funcionamiento de los Consejos, se creó El Consejo Normativo de Especialidades Médicas que parte de la Academia Nacional de Medicina y de la Academia Mexicana de Cirugía, y es el encargado de otorgar la idoneidad a los Consejos y lo hace de manera continua. El certificado del Consejo se volvió necesario para ejercer adecuadamente, los profesores de los cursos de especialización requieren tener un certificado vigente, los cursos requieren el aval de los consejos; los hospitales para obtener la certificación por parte del Consejo de Salud necesitaban que los médicos que laboran en él estén certificados. Siempre han tenido enemigos, generalmente algunos médicos que mencionan los altos costos de la certificación y recertificación convirtiéndose en una fuente ingresos para unos cuantos, además de aducir que los Consejos toman un lugar que debe tener sólo el Estado, otros argumentan que es un mecanismo centralizado, dado que casi todos están establecidos en la Ciudad de México.

Dr Jesus Kumate
Dr. Jesús Kumate Rodríguez ,​fue un médico y político mexicano (Foto: Luz Noticias).

Hay que mencionar que los costos de la certificación y de la recertificación en los Consejos tiene un costo que va de $3,000 a $13,000 con un promedio de $5,500, que en la mayoría de los casos apenas alcanzan a cubrir los gastos de funcionamiento que la elaboración y realización de las evaluaciones conllevan, que en todos los casos las directivas cambian periódicamente y que los que terminan no tienen ganada una recertificación automática, sino que regresan a todos los compromisos de sus colegas; si algún consejo no ha cumplido a plenitud sus funciones es sólo responsabilidad de ese Consejo y sólo compartida con el CONACEM que no ha realizado su labor de vigilancia a plenitud. Que son parte de la Sociedad Civil y que de ninguna manera intentan tomar funciones del Estado que son las universidades las que expiden el título de especialidad y la Dirección General de Profesiones la que emite la cédula profesional, y que los Consejos avalan la vigencia del conocimiento.

El caso es que algunos de los que se oponen consiguieron ser escuchados y en el Poder Legislativo se intenta modificar la Ley General de Salud para quitar al CONACEM y a todos los Consejos en su papel coadyuvante en la búsqueda de calidad en la atención. Los disidentes consiguieron ser escuchados en el Senado de la República y la Comisión de Salud aprobó una propuesta de modificación de la Ley General de Salud en la que los Consejos pierden su papel desautorizando y deshabilitando la certificación y la recertificación de la vigencia del conocimiento. Entre los miembros de la Comisión de Salud que aprobó el Dictamen del que hablamos había cuatro médicos, todos de Morena, el presidente Miguel Ángel Navarro Quintero, un ginecólogo obstetra egresado del CH “20 de Noviembre” del ISSSTE, que ha tenido una larga carrera política en el Poder Legislativo en diferentes instancias de salud en su estado natal; Ántares Vázquez, dermatóloga egresada del Hospital General de México, con una productiva y larga carrera, académica, docente y política; Margarita Valdés Martínez, surgida del sindicato del IMSS; y Américo Villarreal egresado de la Universidad La Salle, hijo del gobernador de Tamaulipas del mismo nombre del Partido Revolucionario Institucional; me extraña que ellos hayan aprobado el dictamen porque conocen el valor de los Consejos, especialmente Miguel Ángel Navarro y Ántares Vázquez. Sin embargo, lo que puede suceder es que todos se sitúan en la acera de evitar la participación de las organizaciones de la sociedad civil que tiene su líder partidista y nuestro presidente.

Pero podemos estar tranquilos porque otro miembro de MORENA, también miembro de la Comisión de Salud, Jesusa Rodríguez, también la aprobó. Parece ser que el dictamen fue aprobado por el pleno del Senado, por lo que pasará a la Cámara de Diputados, donde esperamos que no prosperé. El pasado 24 de noviembre, Onofre Muñoz, presidente del CONACEM, mandó a los presidentes de los Consejos un mensaje tranquilizador en el que menciona que los Consejos conservan sus funciones.

Me extraña que tanto Onofre Muñoz como su asesor jurídico Marco Stéfano no se hayan percatado que se pierde la principal función y la que da origen a su creación, que es la de certificar la vigencia de los conocimientos. Hoy se lleva a cabo el cambio de Mesa Directiva de la Academia Nacional de Medicina, toman posesión como presidente José Halabe y como vicepresidente Germán Fajardo, ambos expresidentes de sus consejos respectivos, Halabe del de medicina interna y Fajardo del de otorrinolaringología; esperamos un mensaje orientador y tranquilizador en este dilema en el que nos encontramos.


Referencias:
– Economía, Macroeconomía, Grupo Expansión: datosmacro.expansion.com
– Coronavirus Official Data: epidemic-stats.com
– Dictamen de las Comisones unidas de Salud y Estudios Legislativos por el que se reforma el artículo 81 de la Ley general de Salud.
– Circular del presidente de CONACEM a los presidentes de los Consejos de Especialidades Médicas.


También te puede interesar: Un nuevo libro de Leonardo Padura.